La redención del Granada pasa por ganar en Almería
El conjunto dirigido por Paco López cierra su semana maratoniana con otro derbi crucial en el que tratará de dar continuidad al fútbol desplegado contra el Betis
El Granada cierra su semana maratoniana, de tres encuentros en siete días, con la oportunidad de redimirse tras un inicio pobre en Liga. El punto que obtuvo frente al Betis en la pasada jornada será bueno solo si consigue dar continuidad este domingo (14:00 horas) al fútbol que desplegó hace apenas 72 horas y, sobre todo, si gana al Almería en el Power Horse Stadium. Los dos conjuntos andaluces, rivales directos en la pugna por la permanencia, librarán en la sobremesa un derbi de esos que, cuando se disputan al final del curso, son auténticas finales por la salvación. El de esta fecha, a pesar de la prontitud con la que ha quedado fijado en el calendario, no es menos determinante ni está falto de épica en su contexto. Tal vez, a la conclusión de la campaña, incluso resulte definitorio, y quién sabe si no libera el nerviosismo en las oficinas del equipo que salga peor parado.
Hay indicios de un cambio en la dirección del viento a favor del Granada. El conjunto dirigido por Paco López logró fortificar su defensa en Las Palmas con la inclusión de Raúl Torrente, a pesar de la derrota final, y frente al Betis, además de ratificar el esfuerzo en la protección, impuso por momentos un juego vertical que abrumó a los de Heliópolis. El equipo ha transmitido en dichos duelos la sensación de estar cerca del ansiado equilibrio en la balanza que le permita respirar con cierto alivio, pero todo pasa por resolver citas como la de este domingo. Su rival, el Almería, atraviesa un momento delicado. Vicente Moreno fue cesado en el conjunto indálico y tomó las riendas de manera interina Alberto Lasarte, quien, aun sin conocer su futuro en la entidad almeriense, fue claro al señalar que "es un día importante en la temporada".
El equipo vecino es colista y con tan solo la mitad de puntos que el Granada, guarismos que han precipitado el movimiento en el banquillo. Su urgencia es máxima, lo que, unido a la permuta en el cuerpo técnico, lo convierte en un rival imprevisible para los de franjas horizontales. Hasta la fecha, ha manifestado síntomas los que ha padecido el combinado nazarí: una defensa extremadamente frágil -ambos han encajado 18 goles-, pero un ataque prolífico. Lasarte, ante su gran oportunidad en lo profesional, aseguró ante los medios que el vestuario indálico "tiene mucha ilusión, se ha dado cuenta de que ha llegado su momento y sabe que este partido está marcado con una equis", por lo que cabe esperar un planteamiento ambicioso. El propio técnico expuso su intención de plasmar un juego "agresivo, vertical e intenso".
En nómina tiene futbolistas para ello, después de una inversión llamativa en el mercado que, por el momento, no ha surtido el efecto deseado. Entre sus puntales, tres viejos conocidos de la hinchada granadinista, importantes todos ellos. Luís Maximiano protege los palos, incorporado este curso; Alejandro Pozo acelera por el costado diestro, reconvertido a lateral y carrilero, a diferencia de sus tiempos como nazarí, y Luis Suárez lidera el ataque, sin perder un ápice de la potencia con la que rubricó goles con el histórico EuroGranada. Además, integra más velocidad a su parcela ofensiva con Largie Ramazani, centímetros en la muralla con la incorporación de Edgar y clarividencia con el también recién llegado Sergio Arribas. Ninguno estaría descartado para afrontar el duelo, a tenor de las palabras de Lasarte, aunque algunos, como Robertone, Pubill o César Montes, son seria duda.
En el Granada, la atención se centra en el pubis de Uzuni, maltrecho, que le obligó a salir del campo ante el Betis. Se trata de una dolencia particular, que acompaña a quien la padece durante tiempo, pero que depende de las sensaciones. Este sábado, el albanés entrenará con normalidad, aunque Paco López esperará hasta el último momento para comprobar si puede disponer o no del atacante. Sobre el papel, la única baja segura es la de Vallejo.
El técnico rojiblanco avanzó cambios en su alineación para gestionar los esfuerzos de una semana tan extenuante, por la que también expuso su disgusto. "Sinceramente, es inaceptable que un equipo tenga que jugar menos de 72 horas después de hacer un esfuerzo tremendo, con la exigencia que hay en esta Liga, y que nuestro rival haya tenido casi tres días más que nosotros para preparar el partido", exteriorizó el valenciano, molesto también porque, mientras sus pupilos se desfondaban el jueves, el Almería no compite desde el martes. Su once, no obstante, será dictado en buena medida por la capacidad de recuperación de sus futbolistas, y no parece demasiado probable que intervenga de forma profunda.
La mayor duda se sitúa en el centro de la defensa, donde la evolución de Miguel Rubio, integrado desde finales de la semana pasada en la dinámica de grupo, puede promover la salida de Ignasi Miquel de la alineación. Sin embargo, no es descartable que incluso la zaga permanezca intacta, dado el rendimiento ofrecido en las últimas citas. Engranaron bien Gumbau y Gonzalo Villar en la medular, por lo que a priori continuarán marcando el tempo rojiblanco. En uno de los costados sí aparecerá, salvo sorpresa, Bryan Zaragoza, cuya incursión puede suponer la ausencia de Melendo en el esquema, aunque el ataque se organizará en función del estado de Uzuni. Si el albanés está en condiciones, presumiblemente acompañara a Boyé en punta. Si no, Puertas puede dar un paso al frente.
La batalla se antoja trascendental en el devenir de ambos equipos. Si ganan los de casa, el Granada se hunde y Paco López queda muy tocado. Si ganan los visitantes, tal vez salieran del descenso y, seguro, abren brecha con respecto al Almería, que se quedaría muy descolgado. El empate no serviría para más que engrosar la diferencia con los equipos que se sitúan por delante y dar rienda suelta al pánico. Parece demasiado pronto, pero, sin duda, lo que suceda este domingo pesará mucho en la media final del curso.
Alineaciones probables:
UD Almería: Luís Maximiano; Alejandro Pozo, Chumi, Edgar, Akieme; Melero, Dion Lupy, Arribas; Embarba, Largie Ramazani y Luis Suárez.
Granada CF: André Ferreira; Ricard, Ignasi Miquel, Torrente, Carlos Neva; Melendo, Gumbau, Gonzalo Villar, Bryan Zaragoza; Puertas y Lucas Boyé.
Árbitro: Pablo González Fuertes, del comité asturiano.