Personas que dejan huella
Hay personas que dejan huella en la vida. Son personas que tienen algo más que lo que nos encontramos a diario. Y son capaces de pasar por la vida de uno, marcado estilo, haciéndose sentir.
Las personas que dejan huella son sin duda, personas de confianza. Son personas que tienen humor, que van con la honestidad por delante, que se presentan con la humildad como una de sus características más atractivas y siempre con todo el talento de cada una de ellas. Son personas que todo lo que hacen lo llevan a cabo con coherencia, con prudencia, con templanza, con sinceridad responsable. Y es que son buenas personas.
Por ese motivo, es esencial encontrar a aquellas personas que sean capaces de sacar lo mejor de cada persona, que sepan motivar y crear un buen ambiente. No se trata de personas que dan órdenes sino de personas que trabajan codo con codo con quien haga falta.
Es evidente que dejar huella significa pasar por este mundo dejando un poso positivo, habiendo aportado algo, nuestra propia esencia y nuestra manera de ser. Por tanto, intentar dar lo mejor de nosotros mismos cada día a aquellos que nos rodean hace que lleguemos al corazón ajeno. U es bueno recordar que, debemos dar lo mejor de nosotros, por nuestro propio bienestar. Y de este modo, vivimos conectados con la autenticidad.
Es evidente que quien pisa fuerte, deja huella por dónde anda. Quien se deja la piel en todo lo que hace, también deja huella. Y decía Patrícia Ramírez, que las personas buenas y bonitas, dejan rastros de amabilidad, compasión y bondad.
Leía en la mente es maravillosa que hay personas que entran en nuestra vida y lo cambian todo, personas por las que vale la pena parar, respirar y valorar. Valorar lo que realmente importa. Los detalles, las pequeñas cosas, cosas como el agua del mar, las nubes, una mirada de esas que lo dicen todo, unos ojos como los suyos, el modo en el que sonríen, un abrazo infinito mezclado de sal, sus manos, despertar a su lado,.…
Y añade que hay diferencias importantes entre quienes dejan huella y quienes dejan cicatrices. Dice que las huellas son marcas imborrables en la piel y en la memoria que nos hacen rememorar momentos de amor, de aprendizaje y de crecimiento. Mientras que las cicatrices son marcas que no elegimos tener y que nos recuerdan un dolor que se podía haber evitado.
Sin duda nos gusta que osen por nuestro la forma personas que nos dejan huella, que nos abrazan y reconstruyen nuestro interior. también es verdad que existen personas que nos dejan huella y otras que nos marcan para toda la vida. Probablemente queremos mejor encontrar personas que nos marquen para siempre.
Conocemos en nuestra vida cientos de personas que muchas de ellas pasan sin pena ni gloria. Junto a e ello, de tanto en tanto pasan por nuestra vida, personas a las que nos apetece agarrarnos ya que nos cambian l vida ora toda la vida. Y en eso están los verdaderos amigos que no entran y salen y se van, sino que dejan un recuerdo siempre presente.
Sabemos que nuestro cerebro necesita modelos de comportamiento de referencia porque es innato a nosotros. Y hay gente que deja huellas imborrables, cómo las personas valientes, que quieren comerse el mundo, así como las constantes, disciplinadas, que saben que no hay éxito sin constancia y don como hormigas. Junto a estas dos tipos de personas, también hay las personas optimistas, que son capaces de contagiar su visión y su entusiasmo a su alrededor, junto a las divertidas, que tienen el fin de hacernos reír, además de las independientes o libres o las transparentes, que se muestran tal como son.
Y para dejar huella, cómo dicen los de cuerpo y mente, es importante:
- No preocuparse por lo que piensan los demás de uno/a.
- Afrontar el miedo a lo desconocido.
- Tener el valor de ser coherente.
- Trascender el perfeccionismo.
- Abrir la vida a la utopía.
- Conectarnos con nuestro ser, más allá del ego.
- Permitirnos fluir con el tiempo.
Somos lo que hacemos y las huellas que vamos dejando son el reflejo de nuestro impacto.