Ser uno mismo: vivir en armonía
Ser uno mismo es una labor diaria que implica coherencia.
Y estar en armonía con uno mismo requiere, ante todo, ser uno mismo.
Ser uno mismo supone que uno tiene la capacidad de desear, de pensar, de hablar en nombre propio, saber cómo decir “no”, cómo no engancharse con las expectativas y proyecciones que los demás tienen con respecto a nosotros, y no estar sujeto a normas colectivas, sociales y culturales.
El problema resulta cuando el aparentar nos quita sentirnos nosotros mismos. Evadirse es un mecanismo de defensa para sobrellevar los momentos difíciles. O soñar un rato con los ojos abiertos es una válvula de escape.
Pero todos tenemos un yo personal, que define nuestra identidad y un yo social, el traje con el que nos presentamos en el mundo. El problema surge cuando se produce una modificación del concepto de uno mismo en respuesta a las expectativas sociales, lo que nos hace perder la identidad. Hay quienes aparentan para gustar, otros para impresionar, otros para dominar. Y es que aparentemente vivimos en la sociedad de aparentar, en la sociedad del 'postureo'. Y muchas veces apara entrar lo que no somos, va en nuestra contra. Y quién vive para aparentar, se olvida de vivir. Y olvidarse de vivir, genera una fatiga emocional. Todo ello nos dice de la importancia de la armonía y la coherencia.
En 'caminar distinto' se dice que las 10 reglas para vivir en armonía con uno mismo/a son:
- La felicidad, la alegría, el éxito son solo efectos secundarios, de una vida organizada.
- Cuando hablamos con cualquier persona, recordemos que al igual que nosotros, también tiene una opinión muy positiva de sí misma.
- ¿Cómo puede alguien ayudarnos si no estamos haciendo nada por nosotros mismos/as?. Una persona siempre se define por sus acciones, no por sus palabras.
- Hacer lo que amamos, y todos los sentimientos negativos desaparecerán. Muchos sentimientos negativos como el rencor, se forman en nuestro interior debido a estar insatisfecho con uno/a mismo/a.
- ¿Queremos ver a nuestro mayor enemigo? ¡Mirémonos en el espejo! El único enemigo real que tenemos somos nosotros. Para dejar de ser nuestro peor enemigo/a, tenemos que romper las barreras que no nos permiten crecer y desarrollarnos.
- Busquemos el mejor camino, en lugar del camino mas corto.
- Cuando no tenemos un objetivo, no vemos nada claro. Un meta agudiza la visión.
- Si queremos demostrarle algo a alguien, significa que vivimos para esa persona. Si queremos ser felices, dejemos de intentar demostrar que tenemos razón.
- La capacidad de amar y aceptar la soledad, es signo de una persona emocionalmente madura
- La felicidad viene cuando lo que QUEREMOS, PODEMOS y DEBEMOS hacer, es lo mismo. Las personas a menudo deben, pero no quieren; quieren, pero no pueden, y así sucesivamente. La clave para lograr la armonía interior, es poner foco en auto-realizarse, evolucionar internamente y ser su mejor amigo/a. El resto es extra.
Ser uno mismo es ser crítico con la realidad, exponer lo que nos gusta y lo que no, no permitir que los demás se adueñen de nuestra vida. El arte de ser nosotros mismos significa libertad. El arte de ser uno mismo nos hace sentirnos orgullosos, dignos, satisfechos, dichosos… Y ser uno mismo implica descubrir dentro de nosotros el gran potencial que poseemos para dirigir nuestras vidas.
Por tanto, ser uno mismo nos hace ser personas únicas e irrepetibles y, entre todos, miembros de una sociedad viva que nos ayude a construir un mundo sin ataduras, exigencias e imposiciones. El arte de ser uno mismo nos hace sentirnos orgullosos, dignos, satisfechos, dichosos… Ser uno mismo es un proceso a lo largo de nuestra vida que nos hace auténticos e irrepetibles.