Un granadino, entre los autores de "uno de los libros más completos" de la película 'West Side Story'

Fran Arráez es uno de los cinco escritores de la publicación que Notorious Ediciones ha lanzado con motivo del sexagésimo aniversario del estreno del film

west side story
'West Side Story', la historia de 'amor sin barreras' que marcó a más de una generación vuelve este viernes de la mano de Steven Spielberg | Foto: Archivo GD
Rosa Núñez
0

West Side Story, ese clásico musical que marcó a más de una generación, cumple 60 años. Tras su estreno en 1961, esta adaptación de la obra de Shakespeare 'Romeo y Julieta' inspiró muchas otras versiones de la misma, como la también conocida Grease, de 1978.

Para celebrar el cumpleaños de este clásico de Broadway, Steven Spielberg estrena este viernes en cines su remake particular, protagonizado por Rachel Zegler y Ansel Elgort, como María y Tony, respectivamente. Sin embargo, el director estadounidense no ha sido el único que se ha inspirado por la historia de este 'amor sin barreras' de los años 60. Cinco escritores, entre ellos, el granadino Fran Arráez, se han sumergido en las más profundas entrañas de este musical para sacar a la luz los mil y un secretos y curiosidades mejor guardadas de la producción.

Así es como nace West Side Story: El libro del 60 aniversario, publicado en octubre, hace apenas mes y medio, por Notorious Ediciones. Para la creación de esta casi enciclopedia del musical se han unido Juan Luis Álvarez, Albert Galera, Jaime Iglesias, Alejandro Melero y Fran Arráez, quien destaca que "puede que sea uno de los libros más completos que se han hecho de la película original".

Portada del libro 'West Side Story: El libro del 60 aniversario' | Foto: Gabinete

West Side Story desde la pluma de un granadino

Para la edición del libro, "cada uno nos hemos ocupado de aspectos determinados de la película en los que estamos más especializados", explica Arráez. En este caso, él ha escrito tres capítulos: uno en el que habla de uno de los codirectores de la película, Jerome Robbins; otro en el que se centra más en la obra de teatro previa a la realización del film; y otro en el que explica en qué consiste el fenómeno de los ghost singers o las voces fantasmas de Hollywood.

En el primer capítulo de los redactados por Arráez, llamado 'Coreografiar la calle', el granadino habla del coreógrafo Jerome Robbins. La película de 1961 fue codirigida por Robert Wise (director también de cintas tan extraordinarias como 'Sonrisas y lágrimas') y por Robbins, director del musical de West Side Story en Broadway, estrenado en 1957. Éste tuvo tanto éxito que se llevó a la gran pantalla y la presencia de Robbins se decidió como imprescindible, ya que se encargó de todas las coreografías, mientras que Wise dirigió la parte actoral, realizando entre los dos un trabajo impecable que a día de hoy sigue manteniendo su esencia.

Como curiosidades, Arráez narra que este coreógrafo era tan perfeccionista que separó a los actores que formaban parte de cada banda en la película y promovía conflictos internos entre ellos para hacer las disputas más reales. Era por eso que todo el mundo quería trabajar con él porque era un genio, pero realmente era una tortura. Los actores que trabajaban con él solían tener heridas y moratones. "Eso ocurría constantemente en los trabajos de Jerome Robbins", asegura Fran Arráez. Cuando terminó el rodaje, todo el equipo actoral quemó sus rodilleras en la puerta de su oficina como protesta.

De hecho, Robbins era tan problemático que lo llegaron a despedir de la película antes de terminarla. Por cosas como esta: cuando estaban grabadas todas las coreografías, los productores se plantaron porque el codirector quería repetirlas hasta la saciedad, o hasta que él las viera bien, lo que suponía gastos extras. Wise, que acabó ganando junto a él el Premio Óscar, pidió al equipo de producción que Robbins colaborara en el montaje final de la película, a pesar de que un experto montador como él no necesitaba ninguna ayuda en este sentido.

Broadway Rumble, el siguiente de los capítulos de Fran Arráez en el libro, trata sobre la producción teatral original de West Side Story del año 1957 en la que se basa la película. Este granadino, dedicado en gran parte al mundo de las tablas, resalta en su texto el calado que tuvo esta aventura de amor en la época: "Fue un boom y cambió la historia del teatro por completo. West Side Story es la versión moderna de 'Romeo y Julieta', pero con la realidad social de América a finales de los años 50, salvo que, en vez de tomar como protagonistas a dos familias rivales, relata el problema de la inmigración, con el grupo de los pandilleros, los sharks, contra los americanos locales, los jets". La obra fue tal revolución que, al principio, la gente se salía del cine, y eso que en el teatro fue mucho más dura. En el libro, en concreto en uno de los capítulos de Juan Luis Álvarez, también se habla de Grease y otras versiones deformadas o adaptaciones del clásico de Shakespeare, como 'Romeo + Julieta', de 1996, protagonizada por Leonardo DiCaprio y Claire Danes y dirigida por Baz Luhrmann.

Fran Arráez hace gran referencia al guion de la historia: "Es brutal lo moderno de lo que habla, por desgracia: los problemas de racismo, las zonas de la ciudad divididas y controladas por pandillas, nacionalistas que no permiten que entre en su país o ciudad gente de fuera porque consideran que es un peligro... Por desgracia, estamos hablando de una obra que se hizo en 1957, pero es un tema que no puede ser más actual".

El tercer capítulo escrito por el granadino, Ghost Singers, explica qué es el fenómeno de las voces fantasmas de Hollywood, es decir, los cantantes que prestaban su voz a los actores del momento, algo que se desconoce bastante. "Para mí es el capítulo más interesante porque en España no hay nada publicado al respecto", manifiesta. Prácticamente, todos los actores de la película fueron doblados en sus canciones excepto dos: Georges Chakiris y Rita Moreno (aunque ella sí recurrió a otra voz fantasma en un solo tema: A boy like that, interpretada por Betty Wand. "Esto significa que los actores a los que todo el mundo adoraba no cantaban o, al menos, no como la industria quería", continúa el granadino.

Arráez pone el ejemplo de Natalie Wood, la protagonista del film, que encarnaba a María. Según cuenta, la actriz estadounidense, que cantaba bien, grabó toda la película cantando ella, pero la habían engañado, pues finalmente, las canciones fueron cantadas (dobladas) por Marni Nixon. Esto se debe a que en Hollywood se buscaba que las voces fueran "tremendamente limpias", según Arráez. Para poner otro ejemplo, Rita Hayworth llegó a tener seis cantantes dobles en toda su carrera, o sea que ni siquiera cogieron una sola voz cantada concreta para ella. Como esta curiosidad, Fran Arráez desvela otros tantos nombres de cantantes de esa época, así como posteriores, pues esto se ha seguido haciendo en los años 90.

Por su parte, estas voces invisibles firmaban a su vez contratos de confidencialidad por los que no se podía saber quiénes eran y ni siquiera cobraban derechos por las canciones, ni aparecían en los créditos de las bandas sonoras. En el caso de Nixon, que era muy buena actriz de doblaje, pues realmente se adaptaba a la perfección a las actrices a las que tenía que imitar, casi nadie sabe de ella que puse voz a tantas actrices de musicales clásicos. Además, con ella, en muchos casos, las maniobras que utilizaron los productores fueron "muy feas", dice Arráez, relacionadas con engaños y humillaciones, como en el caso de West Side Story.

Un profundo trabajo de investigación

Para la realización del trabajo, en el caso de Fran Arráez, uno de los cinco escritores a los que se ha entrevistado, la investigación llevada a cabo, sobre todo para el último de sus capítulos, ha sido a través de "documentales, entrevistas y programas de radio en inglés", así como "con la autobiografía de Marni Nixon". Sin embargo, estos nombres de las voces fantasmas y el hecho de que esto se hiciera se hizo público con una entrevista que se le hizo a Deborah Kerr, en la que quiso reconocer el trabajo de su amiga y actriz de doblaje, en la que agradecía su colaboración en algunas notas. Esto supuso un escándalo en ese momento y una mentira porque ella, en realidad, no cantaba nada. De esta manera, se formó tal revuelo que la película My fair lady, de 1964, que obtuvo 12 nominaciones a los Premios Óscar, excepto para Audrey Hepburn, de quien consideraron que había engañado al público, ya que no era una actriz completa, y se había visto envuelta en un mundo tremendamente machista.

Asimismo, ya desde pequeño, Arráez ya era un enamorado de las bandas sonoras y cuenta entre risas que cuando era adolescente, a veces viajaba a Londres sólo para comprarlas. Este colaborador de 'A media luz', de esRadio (dirigido por Ayanta Barilli), al que va una vez a la semana a hablar de música en el cine, ha dedicado varios programas a los ghost singers. Fue en uno de esos episodios en el que el equipo de Notorious Ediciones se decidió a ponerse en contacto con el granadino para proponerle que trabajara en la producción de West Side Story: El libro del 60 aniversario.

Celebrando el cumpleaños de la película

Notorious Ediciones, la editorial más importante en referencia al cine en España después de Nickelodeon y que trabaja con sus archivos, publica cada mes entre dos o tres libros diferentes centrados generalmente en el cine clásico. Como con Arráez, también fueron contactando con el resto de escritores uno a uno, ya que se trata de una empresa que suele  editar libros colectivos.

Este en concreto, se publicó en octubre con la intención de que su lanzamiento coincidiera con el sexagésimo aniversario de la película. Esta edición está disponible en las grandes librerías, así como en El Corte Inglés o FNAC, además de en la web de la editorial. Enrique Alegrete, uno de los fundadores de la editorial junto a Guillermo Balmori, tiene una grandísima colección de archivos gráficos de las películas de Hollywood, por lo que en los libros se incluyen siempre carteles antiguos, fotogramas del film, escenas de rodaje...

De igual forma, el remake de Spielberg se estrenaba el año pasado, pero debido a la pandemia de Covid-19, no pudo ser así, por lo que decidieron posponerla un año para coincidir con el aniversario y aprovechar las fechas navideñas.

Para colmo, aunque esta casualidad es más bien una triste noticia, Stephen Sondheim, el letrista de las canciones originales de West Side Story falleció el pasado 26 de noviembre. Este fue su primer trabajo en Broadway, realizado con tan sólo 27 años y para las canciones de un gran compositor como era Leonard Bernstein, lo que impulsó su carrera.