Hachís oculto como helados, pistolas y un coche robado: el golpe contra el tráfico de drogas en Albolote
Tres de las viviendas de un edificio ocupado operaban como centros de producción y una como centro de almacenaje y distribución de marihuana y hachís
La Guardia Civil ha llevado a cabo la segunda fase de la operación Green Cellar contra el cultivo y el tráfico ilegal de marihuana en un edificio ocupado ilegalmente en la localidad de Albolote. En esta segunda fase, que ha tenido lugar el pasado día 7 de octubre, los investigadores de la Guardia Civil de Maracena han descubierto tres centros de producción de marihuana en los que se han intervenido 1.525 plantas de cannabis sativa; y un piso que servía de guardería de droga en los que localizaron 120 kilos de hachís y 32,6 kilos de marihuana y una envasadora al vacío. Los agentes también descubrieron en el garaje del edificio un coche con matrículas francesas robado en Francia en septiembre de 2022.
En la primera fase, que tuvo lugar el pasado mes de mayo, la Guardia Civil se incautó de más de 190 kilos de marihuana; de más de 5.800 plantas de cannabis sativa en diferentes estados de crecimiento; de dos pistolas municionadas de calibre 9 mm sin número de serie; de un silenciador; de munición; de 4,9 kilos de hachís; y de 3.150 euros.
El hachís descubierto estaba envuelto como si fueran barritas de helado de una conocida marca. Cada uno de estos envoltorios contenía 50 gramos de hachís. La Guardia Civil ha detenido hasta el momento a un individuo que estaba ocupando ilegalmente uno de los pisos en cuyo interior los agentes encontraron 218 plantas de cannabis sativa.
La operación Green Cellar ha tenido una segunda fase porque los investigadores de la Guardia Civil de Maracena descubrieron que habían vuelto a habilitar centros de producción de marihuana en este edificio ocupado ilegalmente de Albolote y sospechaban, además, que podían estar utilizando una de las viviendas para guardería de droga.
Con la ayuda de los técnicos de la compañía suministradora de electricidad, los agentes constataron que nuevamente había un elevado consumo de electricidad, por lo que se solicitó autorización judicial para para registrar las viviendas sospechosas.
Una vez obtenida, la Guardia Civil desplegó un amplio dispositivo en torno a este edificio y procedieron a los registros. Los investigadores localizaron tres pisos con toda la infraestructura necesaria para el cultivo y elaboración de la marihuana. En el primero crecían 218 plantas de cannabis sativa con sumidades floridas; en el segundo 783 plantas y en el tercero 524 plantas.
El cuarto piso funcionaba como centro de almacenaje y en él la Guardia Civil descubrió otros una envasadora de marihuana, así como 32,26 kilos de marihuana envasada al vacío y dispuesta para la venta; 90 kilos de polen de hachís y 30 kilos de resina de hachís con aspecto de chocolatinas.
La operación sigue abierta y los investigadores continúan con sus pesquisas para tratar de averiguar quiénes son los responsables últimos de la droga intervenida. Esta actuación de la Guardia Civil de Maracena se incardina en la operación Miller, una operación que está desarrollando la Guardia Civil a nivel nacional contra el cultivo y tráfico ilegal de marihuana.