La autopsia revela que el hombre que apuñaló a un guardia civil en Lanjarón murió de un infarto
El agresor entró en un restaurante y sin mediar palabra agredió al agente, que estaba fuera de servicio
El hombre de 42 años que este pasado domingo se desvaneció y murió tras apuñalar a un guardia civil fuera de servicio en la localidad granadina de Lanjarón sufrió una "muerte súbita cardiaca", según ha determinado la autopsia practicada al cadáver.
La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer las causas que llevaron a este hombre a apuñalar al agente y que tras ser reducido, se desvaneció y falleció, según la autopsia, a causa de un infarto, según han detallado a Europa Press fuentes de la investigación.
Los hechos ocurrieron sobre las 17,20 horas en la avenida de la Alpujarra del municipio, cuando el agente, destinado al puesto de Lanjarón, se encontraba fuera de servicio disfrutando del día junto a otros compañeros y sus familias, con los que había estado comiendo en un restaurante.
El agresor se acercó por detrás y sin mediar palabra le apuñaló con un arma blanca en el abdomen. El agente fue evacuado a un centro hospitalario, donde se recupera de la lesión y recibirá el alta en las próximas horas, según han detallado a Europa Press fuentes sanitarias.
Los compañeros allí presentes redujeron al agresor hasta que llegara una patrulla para llevarlo a los calabozos, aunque se desvaneció y falleció. Posteriormente fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Granada para practicarle la autopsia que ha determinado las causas exactas de la muerte.
El alcalde de Lanjarón, Eric Escobedo, ha deseado a través de un comunicado una pronta recuperación para el agente y ha condenado cualquier tipo de violencia, incidiendo en que éste es un "municipio de paz, donde no hay cabida para situaciones de este calibre".
Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) han trasladado "todo el apoyo" al compañero herido, al que han deseado una pronta recuperación, y a quienes estuvieron presentes durante lo ocurrido, al tiempo que han lamentado el fallecimiento de esta persona.