El Hospital San Rafael impartirá formación en cuidados paliativos a enfermeros de Granada

El programa abordará aspectos socioculturales y espirituales, la cuestiones éticas y legales aplicables o aspectos psicosociales como el duelo y el acompañamiento

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Firma del convenio entre la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en Granada, y el Colegio Oficial de Enfermería | Foto: Gabinete
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El Hospital San Rafael, perteneciente a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en Granada, y el Colegio Oficial de Enfermería han firmado un acuerdo de colaboración a través del cual, los profesionales del centro hospitalario granadino referente en cuidados paliativos impartirán formación específica sobre esta especialidad a los enfermeros de la ciudad.

La especialización en cuidados paliativos enfoca la dimensión más humana de la medicina. Requiere de una preparación profesional de excelencia, capaz de atender necesidades muy diversas que van desde el tratamiento del dolor, la atención emocional, social y espiritual, o gestión de equipos, entre otras. Lograr el mayor confort en estos momentos solo es posible con unos cuidados paliativos basados en una atención integral e interprofesional. “En esta especialidad es crucial una atención humanizada, pero que además sea excelente a nivel técnico”, explica el director-gerente de los centros de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en Granada, José Luis Castellar. “En el momento en que una enfermedad se convierte en incurable, es necesario adecuar el esfuerzo diagnóstico y terapéutico, evitar las pruebas y tratamientos que se consideren fútiles, teniendo siempre en cuenta la voluntad y el deseo de la persona enferma con el fin de mejorar su calidad de vida y salvaguardar su dignidad en el final de la vida”.

En este sentido, el objetivo de este acuerdo entre ambas entidades es nutrir y dotar al tejido enfermero granadino de recursos y herramientas profesionales específicas para velar por el completo bienestar de las personas con enfermedades avanzadas que se encuentran en el periodo de final de vida.

El presidente de las enfermeras granadinas, Jacinto Escobar, ha destacado la importancia de la especialización para avanzar en la excelencia de cuidados y ha recordado que la asistencia sanitaria en paliativos requiere una formación específica para minimizar el dolor y facilitar el bienestar. “No se trata solo de curar, la labor enfermera es mucho más global”, ha resumido.

“Como precursores del modelo asistencial actual desde hace casi cinco siglos desde Granada para el mundo, para la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios este acuerdo supone un paso más en nuestro compromiso por cuidar del bienestar físico, emocional y espiritual de las personas enfermas y sus familias a través de una formación de calidad y desde la experiencia que nos avala en este campo, de los profesionales enfermeros para asistir desde la más plena humanización los procesos de final de vida desde la ética, la bioética y el cuidado del cuerpo y el alma de quienes lo necesitan”, explica José Luis Castellar.

El programa formativo abordará desde los principios generales de los cuidados paliativos, como los profesionales de la salud ante la muerte o el concepto de calidad de vida y muerte digna, hasta aspectos más complejos para el paciente y sus familiares en este proceso como aspectos los socioculturales y espirituales, la cuestiones éticas y legales aplicables a los cuidados paliativos o aspectos psicosociales como el duelo y el acompañamiento o el impacto psicológico en la enfermedad. También se profundizará es aspectos biológicos como el dolor o el tratamiento farmacológico, cuidados paliativos oncológicos y no oncológicos, la gestión de equipos en unidades de Cuidados Paliativos o la formación, docencia e investigación en esta materia.

“Las enfermeras somos el eslabón más cercano al paciente y a sus familiares y esta sinergia nos va a permitir implementar los conocimientos necesarios para adecuar nuestra atención a esa fase crítica. Nos ayudará a garantizar al paciente en paliativos una vida con el mayor bienestar posible, sin dolor o con el mínimo que logremos, para garantizar su dignidad en esta fase de la enfermedad, pero también en la muerte”, ha añadido Escobar.

San Rafael, referente en Cuidados Paliativos

Con 30% de pacientes anuales atendidos desde su unidad de Cuidados Paliativos y un equipo multidisciplinar compuesto por médicos, psicólogos, trabajadora social y un amplio número de enfermeros con formación avanzada en esta especialidad, el Hospital San Rafael se ha convertido en referente en este tipo de cuidados en la provincia de Granada. “Desde San Juan de Dios entendemos estos cuidados de una manera en la que la atención psicosocial de la persona enferma y su entorno cobran un papel fundamental, más allá de ese control clínico imprescindible y toda la mejora posible de su calidad de vida”, explica el director de enfermería del Hospital San Rafael, Francisco Javier Capilla. “En este sentido, contamos con un equipo de Atención Psicosocial a Personas con Enfermedades Avanzadas en colaboración con la Fundación ‘La Caixa’, para dar respuesta a todas estas vertientes sociales y emocionales que afectan al paciente y su familia”.

La tipología de pacientes de esta unidad abarca desde los pacientes oncológicos o pacientes con enfermedades crónicas evolutivas no oncológicas -insuficiencia cardíaca, insuficiencia respiratoria, insuficiencia hepática, insuficiencia renal…-, hasta pacientes con demencia u otro tipo de procesos neurológicos, pacientes con ictus con factores de mal pronóstico o pacientes con el síndrome de la inmunodeficiencia humana (VIH).

Todo ello velando por la atención y cuidado de estos pacientes desde la excelencia con unas condiciones que garantizan el cumplimiento de sus derechos relacionados con la intimidad, la confidencialidad, la privacidad y su autonomía. “El sentido de esta actividad formativa abierta a todos los enfermeros de Granada reside en esas señas de identidad que caracterizan a la Orden desde hace 450 años: curar y cuidar de las personas enfermas y más desfavorecidas de la sociedad, poniéndolas en el más absoluto centro y atendiendo la dimensión física, mental y espiritual del ser humano y su entorno social y familiar”, afirma Capilla. “Compartir nuestra especialización es una manera más de seguir velando por estas personas más allá de nuestros propios centros”.