Igualdad celebra el Día de la Infancia entregando diplomas a los menores de los centros de acogida

El delegado de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación en Granada, Manuel Montalvo, ha conmemorado el Día Internacional de la Infancia con la entrega de entradas para partidos de baloncesto, conciertos infantiles y diplomas por el buen comportamiento a los menores de los centros de acogida de la provincia que pertenecen a la Junta de Andalucía. Junto a él han estado Fernando Bailón, de Fundación Club Baloncesto Granada y Emilio Rodríguez, representante del Club de Baloncesto femenino Raca Manuela Fundación, así como los responsables de los centros de menores, Israel Pérez Ariza y Javier González, de la Asociación Agradid, para la defensa de la infancia desprotegida.

Durante su intervención, el delegado ha destacado el ejemplar comportamiento de los y las menores acogidos en los centros de la provincia durante el estado de alarma y actualmente, con la nueva normalidad. “Me gustaría reconocer y agradecer a los niños y niñas la conducta que tuvieron al cumplir todas las directrices y normativas aún en situaciones tan complejas como las que nos tocó vivir”.  La pandemia para estos menores fue especialmente duro debido a que  tuvieron que interrumpir cualquier contacto con sus familias biológicas, allegados, familias colaboradoras, e incluso familias de acogida. “Sin embargo su actitud nos ha ayudado a todos a combatir contra el virus”, aclara Montalvo. El reconocimiento que la Delegación de Igualdad hace a los y las menores se va a realizar a través de la entrega de diplomas personalizados para cada uno de ellos.

Montalvo ha puesto en valor el trabajo de todos los profesionales de estos centros, propios y colaboradores. “Su labor ha sido esencial durante el estado de alarma. Desde el primer día han cuidado, animado y protegido a todos los y las menores tuteladas”. Además, ha querido agradecer la labor del Club Manuela Fundación por su disposición para ayudar e invitar a los y las menores a los partidos que se disputan en Granada. “La semana pasada nos entregaron 500 entradas para que los niños y niñas así como sus educadores pudieran asistir al partido de baloncesto femenino en el Palacio Municipal de Deportes de Granada”.

En palabras del delegado, “la posibilidad de que puedan participar en alguna actividad deportiva es muy importante para ellos. El deporte, además de sus múltiples beneficios físicos y psicológicos, es una potente herramienta de transformación social y una actividad formadora, desempeñando un papel fundamental como promotor de la integración social”. Para que los y las menores puedan asistir a estos eventos tendrán que ir acompañados de los educadores de los Centros de Protección de Menores, lo que ha supuesto un total de 470 entradas para niños, niñas y responsables.

Los y las menores, sobre todo aquellos que se encuentran en edades más tempranas, son especialmente sensibles a las situaciones de maltrato a las que han podido estar expuestos, lo que tiene unas consecuencias irreversibles en el desarrollo de sus capacidades y conductas. Por ese motivo la atención y la protección a la infancia es una de las prioridades del gobierno andaluz, puesto que se va a tener no solo una influencia en el presente sino también en el futuro de los y las menores y en el avance de la sociedad en la que viven.

Como recalca Montalvo, “son muchas las barreras y dificultades que tienen que superar los y las menores con medida de protección y es nuestra obligación y nuestro empeño proporcionarles los recursos para la atención de sus necesidades apostando por conseguir la tan difícil igualdad de oportunidades”.

En Granada hay 392 menores tutelados a través de la Delegación territorial de Igualdad que se encuentran en los centros de protección de la provincia. En estos espacios se les ofrece un entorno de convivencia y cuidados normalizado donde se cubren todas sus necesidades.

Estos centros constituyen espacios donde se atiende a menores con medidas de protección, guarda o desamparo, promoviendo el desarrollo integral de las diversas dimensiones como personas, combinando la calidad técnica y la calidez humana que posibilita relaciones afectivas inspiradas en los estilos y características de una familia normalizada. Los equipos de profesionales realizan programas de intervención educativos, sociales, psicológicos y laborales para posibilitar la atención de todas sus necesidades.