Ilusión que necesitamos para trabajar mejor y no hartarnos de nuestra organización

El otro día leía en El País, en su suplemento salmón, un artículo de la periodista Carmen Sánchez-Silva sobre cómo recuperar la ilusión de los trabajadores. En el artículo se decía que con la mitad de las plantillas desmotivadas, algunas empresas se esfuerzan por cambiarlo: con confianza, iniciativa y competir son las claves.

Partía de un dato: 6 de cada 10 profesionales españoles se sienten desmotivados en su trabajo sobre todo debido al bajo salario y a la falta de reconocimiento. Añadía con más información: 4 de cada 10 trabajadores se declaran quemados. Y añadía algún aspecto más: uno de cada dos empleados no se encuentra motivado en su puesto por cuatro aspectos:

- La monotonía

- La falta de feeling con el jefe

- La carga de trabajo

- La sensación de un salario inferior a su valía

Algún dato más: la productividad de una compañía puede bajar hasta el 40% cuando los empleados no están a gusto en sus puestos.

Una de las líneas más trabajadas por directivos/as para mejorar esta situación se centra en tratar de conseguir una cultura más humana para sus organizaciones, una cultura que pasa por cuidar a las personas y conseguir que recuperen la ilusión.

La importancia de reenamorar nuestra gente en nuestras organizaciones es un elemento fundamental para el cambio. Trabajar el talento, la cultura de la organización, favorecer la cocreación, fomentar la libertad para ayudar a la transformación, abrir las puertas para llenar de sugerencias las empresas, favorecer la visibilidad de las personas que trabajan en las organizaciones, asentar los cambios producidos, formen tablas buenas relaciones interpersonales, conseguir un proyecto común de equipo, …..

Y yo lo que veo es que cuando trabajas sin magia y sin chispa; sin disfraces, solo con la ropa adecuada; sin tigres, hadas ni búsquedas del tesoro, no encuentras la ilusión para ir cada mañana al trabajo.

¿Por qué es importante ir con motivación al trabajo?

La razón para centrarse en este aspecto es que, cuando cuentas con motivación, te beneficias de importantes ventajas, entre las que destacan:

• Eficiencia. Cuando un proyecto nos apasiona, no nos importa volcar nuestros conocimientos y tiempo en él.
• Eficacia. Si sentimos satisfacción en el empleo las probabilidades de alcanzar los objetivos propuestos se disparan.
• Productividad. Cuando hay implicación en el trabajo, la productividad se eleva un 12%.
• Energía. Contar con un objetivo apasionante es sinónimo de entusiasmo y energía.
• Gestión del estrés.  Si estamos en un estado de desmotivación, cualquier obstáculo parece insalvable; en cambio, la motivación nos permite tener una perspectiva más positiva.
• Relaciones interpersonales. Aumenta la colaboración y el trabajo en equipo.
• Éxito laboral. Si la motivación laboral es alta, la tasa de éxito que conseguiremos es a su vez superior.

Algunas ideas para ponerlo en práctica:

1. Definir los objetivos

2. Tomarse un descanso

3. Buscar un compañero de trabajo

4. Organizarse

5. Establecer objetivos pequeños y alcanzables

6. Recomponerse por los logros

7. Buscar ayuda profesional si lo necesitamos

8. Aceptar nuevos retos

9. Encontrar una pasión

10.Aumentar las relaciones interpersonales

11. Practicar el optimismo

12. No fingir jamás

13. Buscar un refuerzo motivacional

14. Cambiar la manera de comunicarnos

¿QUÉ PUEDO HACER?

Analizar las causas, ¿qué ha cambiado?, ¿qué teníamos antes, cuando teníamos ilusión,  que no mo ahora?, ¿qué nos falta?

• Podemos tomarnos un descanso, pero de los de verdad, sin móvil, sin redes sociales, desconectar, para resetear y encontrarnos con nosotros.
• Aprender algo nuevo, diferente, que nos amplíe la visión del mundo, que no tenga que ver con el trabajo.
• Intentar hacer las cosas minuciosamente, despacio, bien hechas,…, las cosas bien hechas, generan satisfacción. Y enlazan con la emoción de la ilusión.
• Ordenar nuestra vida, el caos, y no saber por donde empezar, también puede contribuir a la desmotivación. Poner horarios para las actividades de casa, del trabajo, de ocio,…, pequeñas metas.
• No nos quejemos !! si algo no nos gusta, intentemos cambiarlo, si no se puede, aceptémoslo. Pero, quejarse, lo único que consigue es ahogarnos, generar un bucle de pensamientos negativos, …, además de todos los efectos perjudiciales que tienen los pensamientos negativos para nuestro organismo.
• Relativizar, nada es tan grave, casi todas las cosas de la vida tienen solución. Seguro que hay mas claves dentro de cada uno de las que creemos.

Una pregunta para cerrar: ¿nos sentimos partícipe con nuestro trabajo de un gran proyecto? Y es que para que haya felicidad en el trabajo hay que sentirse bien cuidado y hacer todo lo posible para estar motivados.

Terminamos con un trozo de la píldora de Leila Guerrero: Mis padres alimentaron la ilusión, la dejaron crecer durante tanto tiempo como fue posible. Ellos sabían que después el mundo nos hace cosas terribles. Y también que, cuando se ha vivido en toda su potencia, esa ilusión permanece sólida como un refugio nuclear y nos recuerda que los dragones existen pero que pueden ser vencidos.