La importancia de contar con una buena formación veterinaria

Además de la carrera, formarse continuamente es crucial para poder atender a los animales como se merecen

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Veterinarios ecuestres en una imagen de archivo | Foto: Archivo GD
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Contar con una buena formación para veterinarios es muy importante. Y no solo hablamos de estudiar una buena carrera, la formación continua es crucial para poder atender a los animales como se merecen. Salir de la Universidad y olvidarse del tema no es algo admisible si queremos ser unos buenos profesionales, acertar siempre con el diagnóstico y cuidar a los animales para que tengan una vida más larga y con una mejor calidad.

¿Dónde conseguir esta formación continua?

Hay muchísimos centros que ofrecen la opción de seguir formándote incluso cuando ya has terminado tus estudios reglados. Seguro que en tu ciudad hay una de estas academias o institutos que ofrecen cursos para desarrollar más habilidades y capacidades en este campo. Lo más interesante es que busques una especialización, ya sea en un tipo concreto de animal o bien en una enfermedad, una patología o un cuidado específico. Ser especialista o experto en alguna temática es lo que te ayudará no solo a encontrar un mejor trabajo, también a desarrollarlo con mayor confianza y garantías.

La enseñanza online, otro punto a favor

Si en tu ciudad no encuentras la formación que quieres hacer, siempre tienes a mano los recursos educativos online gracias a internet. Hay muchísimas empresas que se dedican a proporcionar estos cursos, ya sea en formato vídeo, mediante manuales escritos, incluso con prácticas para que las lleves a cabo desde casa y puedas aprender más y mejor. También debes tener cuidado en este sentido y es que en muchos casos estos cursos son insuficientes y se quedan en lo superfluo. ¿Cómo saber cuál es el mejor? Puedes mirar el índice para ver qué temáticas se tocan, buscar opiniones de otros alumnos que lo hayan hecho antes o incluso probar a descargar una muestra gratuita, si lo permite.

El plus de la experiencia

Por supuesto, más allá de una formación académica, la mejor formación veterinaria siempre pasará por el lado práctico. Tratar pacientes reales te ayudará a ver casos que de otro modo no podrías conocer. La intuición suele ser importante, pero por supuesto debes tener una base que te ayude a hacer diagnósticos certeros y ofrecer el tratamiento más indicado para cada caso. Cuantos más casos prácticos trates, mejor profesional veterinario serás. Este tipo de profesiones, aunque necesites tener una base teórica, en realidad son muy prácticas.

Comparte experiencias

En el terreno de la salud, compartir experiencias con otros profesionales es una buena forma de conocer más casos y cómo se han resuelto. Es muy interesante participar en foros -tanto presenciales como virtuales-, conocer las experiencias de otros compañeros de profesión, descubrir nuevos tratamientos y cómo están funcionando, así como tener otra visión de patologías que tú tratarías de una manera, pero otro profesional lo ve de otra forma. Esto es, sin duda, una de las cosas más enriquecedoras que puedes hacer para tener una buena formación veterinaria y salvar vidas. Ayudar a tus compañeros de profesión a conocer cómo lo haces tú y a la vez que ellos te den su visión es un camino en el que todas las partes ganan.