Inbox vs Gmail: ¿Solo puede quedar uno?
Inbox se lanzó a finales de octubre en pruebas y solo algunos usuarios que solicitaban, esperaban y recibían la invitación podían probarlo
¿Te encanta Gmail? ¿Lo vuestro es una relación estable? Sea como fuere, quizá deberías empezar a cambiar el chip, porque puede ser que Inbox termine por sustituir al clásico servicio de correo de Google. O al menos esa es la sensación que está dando.
Inbox se lanzó a finales de octubre en pruebas y solo algunos usuarios que solicitaban, esperaban y recibían la invitación podían probarlo. Después Google abrió un poco más la mano permitiendo el envío de nuevas invitaciones.
Yo lo empecé a usar hace ya algunas semanas y lo cierto es que me gustó bastante, aunque sé de buena tinta que hay a quienes les desagrada profundamente su afición a empaquetarlo todo. Comete errores de agrupación, sí, pero de forma general me he encontrado con un cliente de correo que permite gestionar el correo y crear recordatorios de forma bastante efectiva.
En mi caso, que me ha gustado, el uso de Inbox en el móvil me ha ido atrapando en sus redes y la consecuencia lógica ha sido que cada vez utilizo menos Gmail (además, en Chrome también fui invitado a utilizar Inbox), por no decir prácticamente nada.
Han ido pasando los días y entro poco a la bandeja de Gmail, incluso después del bonito rediseño al estilo Material Design. Sin embargo, como no he tocado la configuración de notificaciones, lo que también ha pasado es que he estado recibiendo por duplicado las alertas de una y de otra aplicación.
Como no tenía claro lo que iba a hacer, si seguir siéndole fiel a Gmail o directamente irme a vivir con Inbox, todavía recibía, como digo, notificaciones de ambas. Es como cuando inicias sesión en el cliente instalado por un fabricante, pero luego instalas Gmail, y terminas recibiendo por duplicado correos. Por supuesto, si eso ocurre, lo que termina pasando es que cierras sesión o capas las notificaciones de uno de los dos.
Y en esas estaba yo, recibiendo notificaciones a pares y pensando en bloquear las de Gmail y, en cierto modo, darle la espalda, cuando me ha saltado el siguiente mensaje -hoy mismo, jueves 13 de noviembre- de forma automática dentro de Inbox:
Vamos, que la propia Google me está invitando a dejar de usar Gmail y quedarme con Inbox. Esto, unido a aquella explicación sobre por qué Inbox es el futuro del correo de Google, me lleva a reflexionar sobre quién es el nuevo niño bonito de Mountain View. ¿La acogida por parte de los usuarios estará alineada con las intenciones de Google? Veremos.