Incautadas 241 plantas de marihuana en Iznalloz y Santa Fe

La Guardia Civil, en colaboración con Endesa, interviene dos implantaciones y detiene a tres personas acusadas de delitos contra la salud pública y defraudación de fluído eléctrico

Guardia Civil Marihuana
Implantación intervenida | Foto: Guardia Civil
Gabinete
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La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a tres personas en dos nuevas actuaciones contra el cultivo de marihuana realizada en las localidades de Iznalloz y Santa Fe.  En total se han encontrado 241 plantas de cannabis sativa, distribuidas en dos plantaciones de las denominadas “indoor”, situadas en los propios domicilios de los inculpados. En estas dos actuaciones se ha investigado a tres personas como autoras de los delitos contra la salud pública por cultivo de sustancias estupefacientes y de defraudación de fluido eléctrico.

En la intervención llevada a cabo en Santa Fe, los agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de esa localidad realizaron el registro de la una vivienda ante las sospechas fundadas de que se estaba cultivando marihuana en su interior. Se constató que una de las habitaciones estaba exclusivamente dedicada al cultivo de la marihuana y disponía de equipos de iluminación y ventilación suficientes para el cultivo intensivo de las 100 plantas que allí se encontraron. Los dos responsables del cultivo, una mujer de 42 años y un hombre de 38 años de edad han sido puestos a disposición judicial como autores del hecho.

En la segunda intervención, la Guardia Civil de Iznalloz y su Área de Investigación realizaron una entrada y registro en una vivienda de esta localidad que era usada para el cultivo de marihuana y en la que se intervinieron 141 plantas de cannabis sativa. Para abastecer de energía eléctrica a los equipos de iluminación y ventilación instalados, el responsable de la plantación había realizado un enganche ilegal al alumbrado público. En este caso un varón de 36 años de edad ha sido puesto a disposición judicial como responsable de la plantación.

La colaboración entre Guardia Civil y Endesa es ya algo habitual en este tipo de actuaciones. Por un lado se consigue la detección de anomalías en el consumo de electricidad y eliminación de enganches ilegales con el consiguiente beneficio para el resto de vecinos y por otro lado se constata documentalmente el delito de  defraudación eléctrica que es imputado a los responsables.