Investigan por segunda vez a una pareja de Alhendín por el robo de joyas en la casa donde ella limpiaba

Una anciana de 82 años de Armilla denunció que le habían robado todas las joyas que tenía en casa y la Guardia Civil descubrió que habían sido ellos y las habían vendido en una joyería

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Foto: E.P.
E.P.
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La Guardia Civil ha puesto de nuevo a disposición judicial en calidad de investigados a una mujer de Alhendín de 28 años y a su pareja, de 33, como presuntos autores de dos delitos de hurto en la vivienda donde ella trabajaba como empleada de hogar y de dos delitos de receptación.

Esta misma pareja fue investigada el pasado febrero por los mismos delitos después de que una anciana de 82 años de Armilla denunciara que le habían robado todas las joyas que tenía en casa y la Guardia Civil descubriera que habían sido ellos quienes las habían sustraído y las habían vendido en una joyería del centro de Granada.

La Guardia Civil ha sabido de otros dos nuevos casos en los que los dos investigados son los presuntos responsables del hurto de más joyas en otras dos viviendas Alhendín donde la joven trabajaba como empleada de hogar.

Las dos nuevas víctimas leyeron la noticia en un periódico granadino y sospecharon que la joven investigada podía ser la misma que estuvo limpiando en sus casas, por lo que acudieron a la Guardia Civil a denunciar el hurto de sus joyas.

En su denuncia manifestaron que en su día sospecharon que la joven supuestamente les sisaba pequeñas cantidades de dinero y que pudiera haber sido ella la que se llevara las joyas, pero al no tener pruebas no quisieron denunciarla.

La Guardia Civil ha encontrado la referencia de las joyas sustraídas a estas dos vecinas de Alhendín en una joyería granadina, ya que los joyeros reseñan y fotografían las que compran, y éstas mujeres las han identificado como las que les robaron. No han podido ser recuperadas, ya que al haber transcurrido más de quince días, que es el plazo legalmente establecido durante el cual los compradores no pueden deshacerse o mandar a fundir las piezas de oro que compran, éstas habían sido fundidas.

La Guardia Civil ha averiguado que en estos dos nuevos casos también fue la joven la que presuntamente sustrajo las joyas y que su pareja las vendió en dos comercios granadinos, por lo que la primera ha sido investigada por dos delitos de hurto y el segundo investigado por dos delitos de receptación.