Investigan posibles contratos irregulares en el Ayuntamiento de Cogollos Vega, que defiende su legalidad
En la diligencia de ordenación se otorga cinco días para que el Ministerio Fiscal y el representante legal del Ayuntamiento se pronuncien
El Tribunal de Cuentas investiga posibles contrataciones irregulares en el Ayuntamiento de Cogollos Vega por presuntos pagos aprobados contrarios a los reparos de la Intervención, si bien desde el municipio han defendido estos contratos alegando que todos van dirigidos a la prestación de servicios básicos y que se han hecho "dentro de la legalidad".
En la diligencia de ordenación de la Sección de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas se otorga cinco días para que el Ministerio Fiscal y el representante legal del Ayuntamiento se pronuncien acerca de la procedencia de nombrar un delegado instructor para el desarrollo de las actuaciones previstas en la Ley de Funcionamiento del Tribunal de Cuentas.
El Ayuntamiento ha hecho alegaciones a este procedimiento dentro del plazo establecido, según ha informado a Europa Press el alcalde, Manuel Lucena (PP), quien ha precisado que se trata de contrataciones para personal de basura, ayuda a domicilio y limpiadoras del consultorio médico, entre otros; todos para servicios básicos que, según defiende, se ajustan a la legalidad. El Ayuntamiento se encuentra a la espera de la respuesta del Tribunal de Cuentas tras el recurso presentado.
La Asociación Cívica de Cogollos Vega, que ha informado de este procedimiento, ha señalado en una nota que el Ayuntamiento aprobó resoluciones de Alcaldía presuntamente contrarias a la legalidad, "a pesar de las notas de reparo de la Intervención del municipio que advertían de la ilegalidad de las contrataciones".
El colectivo afirma que es la segunda vez que este Tribunal pone en conocimiento de la Fiscalía supuestas irregularidades del municipio granadino, donde lamentan que "no todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades a la hora de acceder a un puesto de trabajo en el Ayuntamiento".
Han criticado así al alcalde por hacer del consistorio "su cortijo", contratando en base al "amiguismo y no a los principios de igualdad, mérito y capacidad que rigen el acceso a un empleo en la Administración Pública".
