Jesús Quero: “Hemos puesto en marcha un plan de reestructuración para reducir la deuda de la Fundación PTS, que es preocupante”
Pese a que los compromisos de pago ascienden a 29 millones de euros, en el Parque Tecnológico se han invertido ya 693 millones de euros y se han creado 2.715 empleos
La Fundación PTS ha cumplido con creces los objetivos encomendados desde su nacimiento, basados en la generación de riqueza y empleo. Los datos son contundentes en este sentido. Desde que comenzaron las máquinas a trabajar en sus terrenos en 2005, se han invertido 700 millones de euros en los equipamientos, la urbanización y los veinticinco edificios que componen el Parque, y se han generado casi 2.800 puestos de trabajo. Tras la apertura del nuevo hospital, la población laboral ronda las 5.000 personas. Sin embargo, y pese a esas cifras tan positivas, en el último año y medio se ha encendido la luz de alarma por la deuda que ha ido generando la Fundación y que, en la actualidad, ronda los 29 millones de euros. Ello ha provocado que se hayan puesto en marcha una serie de medidas para paliar tal cantidad y, entre ellas, la más importante es la negociación con el Ministerio de Economía para poder renegociar la deuda y ampliar los plazos de devolución de los préstamos concedidos en su día a diez o veinte años más.
Pese a esa preocupante situación económica, la Fundación PTS no parece correr peligro y ya se planifica un futuro que pasa, además de la mencionada reducción de deuda, por la puesta en marcha de tres nuevos edificios en 2017 y la ampliación del Parque en 325.000 metros cuadrados más, una vez quede aprobado el nuevo PGOU de Ogíjares.
Para explicar el presente y el futuro del Parque, Jesús Quero Molina (1955) ha visitado la sede de Granada Digital. El veterano político granadino es el director de la Fundación PTS desde 2002, cargo al que llegó tras abandonar la delegación del Gobierno Andaluz en la capital. También fue alcalde de Granada, entre 1991 y 1995, parlamentario andaluz y senador, siempre en las filas del PSOE. Su amplio currículo le concede la cualidad de afrontar con mucha experiencia los retos marcados en una institución clave para el desarrollo económico de Granada.
“El PTS transfiere los mecanismos del conocimiento que se genera en Granada al sector de la economía real”
Pregunta (P). Con los datos de inversión y empleo que generados desde 2005, ¿se han cumplido los objetivos marcados cuando se creó la Fundación PTS?
Respuesta (R). Sí, sin ninguna duda. El PTS es un proyecto de desarrollo económico de Granada y provincia. Aunque basado en la salud, pretende crear mecanismos de transferencia del conocimiento que se genera en Granada -que supone el 4 por ciento de todo el conocimiento que se genera en España- al sector de la economía real y, por tanto, contribuye a la creación de riqueza y de puestos de trabajo, y al aumento del producto interior bruto. ¿Si se ha conseguido? Yo creo que sí. Siempre nos hubiera gustado que se hubiera conseguido más y, sobre todo, más deprisa. Pero estoy satisfecho. Son 700 millones invertidos y 2.750 puestos de trabajo creados. Lo más importante para mí es que de esas 2.750 personas, más de 1.500 son granadinos que no tenían trabajo anteriormente. Son empleos nuevos gracias a las empresas nuevas. Ese es el gran valor del Parque
También supongo que habrá generado empleos indirectos.
En los casi 700 millones solo se contabiliza la inversión en urbanización, construcción y equipamientos de edificios del Parque. Un 50 por ciento provienen de la Junta, otro 25 por ciento de la Universidad y el resto de la administración central y de la iniciativa privada. Pero hay mucho más, porque están las inversiones para la llegada del Metro, la remodelación de la autovía para posibilitar el acceso al Parque y la inversión privada que se está materializando ahora en viviendas o negocios. Eso ha servido para generar esos puestos de trabajo. ¿Es suficiente? No. Por eso es necesaria una segunda fase, ya que el esfuerzo inversor será infinitamente inferior, pero la productividad de esa inversión va a ser infinitamente mayor.
“La Fundación dispone de unos activos patrimoniales de 40 millones de euros y podríamos desprendernos de algunos”
Sin embargo, acumula en la actualidad una deuda de 29 millones de euros. ¿Es una situación preocupante?
Preocupante sí es. La Fundación tiene una situación económica sólida desde el punto de vista patrimonial, ya que posee unos activos patrimoniales superiores a los 40 millones de euros. Por eso, más que de deuda, yo hablaría de unos compromisos de pago a corto y medio plazo -entendiendo por medio plazo los próximos diez años- de 29 millones de euros. Es una situación que nos debe ocupar y preocupar. A ella llevamos dedicados de manera prioritaria los dos últimos años. Pero no es una situación desesperada. La Fundación es un instrumento para desarrollar el Parque y no tiene que dar beneficios. Ha conseguido sus objetivos en un 90 por ciento. ¿Se puede 'gripar' el instrumento? Vamos a intentar que no, pero insisto en que es un instrumento al servicio del Parque Tecnológico.
Esa situación de insolvencia a corto plazo, ¿cómo está afrontando? ¿Qué medidas se están tomando?
Se están tomando muchas medidas desde el último año y medio para reducir esos 29 millones. En junio de 2015 recuerdo que dije en la reunión del patronato de la Fundación que se había encendido la luz roja. Desde entonces hemos reducido la deuda en un 3,5 por ciento, alrededor de un millón de euros. Los compromisos de pago eran superiores a los 30 millones y hoy día están en 29. Nos hemos apretado el cinturón para que no quede ningún agujero. Y, en segundo lugar, estamos trabajando en las dos líneas que se puede trabajar. Una, intentar renegociar con el Ministerio de Economía y Competitividad la ampliación de los plazos de devolución de préstamos, que es el origen fundamental de nuestra deuda (casi 20 millones) y, además, conseguir algún periodo de carencia. Y la otra poner en marcha el plan de reestructuración que hemos encargado a través de un estudio. Seguramente tendremos que desprendernos de algunos activos que no son estratégicos para la Fundación, sino que lo son para el Parque. Pero a mí me da igual que un edificio que está en el Parque, siempre que esté afecto a la finalidad para el que se construyó, sea de la Fundación o sea de un tercero.
“Refinanciar la deuda con el Ministerio de Economía y Competitividad sería muy importante”
¿Refinanciar la deuda con el Ministerio de Economía y Competitividad a diez o veinte años más sería una tabla de salvación?
Sería muy importante. De hecho, el Ministerio ya concedió una moratoria de 20 años de plazo a los Parques en 2015, pero no pudimos acogernos a ello porque, curiosamente, habíamos pagado nuestros vencimientos anteriores. Creo que con esa cifra sería suficiente. Ahora mismo nuestros compromisos de pago con ellos llegan hasta 2027 y aspiramos a ampliar ese plazo.
29 millones de euros de deuda es una cantidad que llama la atención. Supongo que se habrá generado por las inversiones realizadas, ¿no?
Se enmarcan en inversiones que se han realizado, que están en el Parque y que forman parte del patrimonio de más de 40 millones de euros. La Fundación PTS se constituyó en su momento con un capital de 600.000 euros de entonces. Si hoy tiene un patrimonio de 40 millones de euros, aunque tenga unos compromisos de pago de 29, quiere decir que hemos sacado de donde no había. Da idea del balance que hay que hacer.
Viendo la deuda actual, o los compromisos de pago adquiridos, ¿es viable la Fundación PTS?
El estudio realizado dice que sí. Y por encima de la viabilidad, que se comprobará con las soluciones que aportemos en el corto y medio plazo, lo que sí tengo claro es que es necesaria. El Parque Tecnológico es una unidad, no es una acumulación de edificios que han ido cayendo del cielo, y unos días cae un hospital, otro día una facultad, una institución de investigación o una empresa... La gran fortaleza y el gran potencial que tiene el Parque es que es una unidad. Por ejemplo, hay investigadores, que también dan clase en la Universidad, y que ven como sus resultados se aplican a prácticas de atención sanitaria, y de sus proyectos de investigación han nacido empresas en el Parque. Alguien tiene que gestionar aquello. Se puede llamar Fundación, PTS o como sea, pero es necesario.
“Hay que crear una sociedad mercantil que gestione el activo inmobiliario del Parque”
¿Tienen planteadas otras alternativas de gestión?
En la última reunión del Patronato planteé mi idea de que la Fundación ha cubierto un papel, y que ahora debería ser un espacio de reflexión, de lugar de encuentro de administraciones y de impulso global del proyecto. Pero aquí hay que gestionar un activo inmobiliario de 40 millones de euros, y no parece que una Fundación sea el instrumento más útil para gestionarlo, ya que hay arrendamientos o desahucios. Habría que generar, y así fue entendido por varios patronos que manifestaron expresamente su conformidad con este planteamiento, una sociedad mercantil de la que formen parte la propia Fundación y algunas entidades que forman parte de la misma. Pero, por ejemplo, yo no veo al Consejo Superior de Investigaciones Científicas participando en una sociedad mercantil. Quizá el futuro vaya hacia una bifurcación de la Fundación como lugar de encuentro entre administraciones y espacio para la reflexión y de una sociedad anónima mercantil como espacio de gestión y promoción inmobiliaria.
¿Cuántos edificios hay construidos en el PTS?
Ahora mismo hay 22 edificios funcionado, más dos que están terminados y a punto de entrar en funcionamiento, y un vigésimo quinto en construcción muy avanzada.
Y de esos 25 edificios, ¿cuántos son propiedad de la Fundación?
La Fundación tiene una casuística muy variada. Tiene, a día de hoy, tres edificios de la que es propietaria al 100 por 100, un cuarto al 90 por ciento, un quinto al 40 y un sexto en un 25.
“El PTS acumula por las mañanas una población cercana a las 10.000 personas”
¿Se ha revalorizado el Parque con la apertura del nuevo hospital y del Nevada? Ya se habla de una milla de oro.
Lo de la milla de oro es una frase mía. Solamente hay que darse una vuelta por allí. Por desgracia, durante muchos años las únicas grúas que había en Granada eran las del PTS. Terminadas las construcciones de los edificios, han vuelto a aparecer grúas, ahora promovidas por iniciativa privada. Se están construyendo viviendas, se están abriendo negocios de todo tipo, como cafeterías, ortopedias, clínicas dentales, farmacias, panaderías... Aquello está se está completando con todos los servicios necesarios para atender a una población que, en horarios de mañana, oscila en torno a las 10.000 personas.
Han aprobado un presupuesto para la Fundación en 2017 de 830.000 euros. ¿Con qué fin?
Es el presupuesto ordinario de la Fundación y es para afrontar sus gastos. Es una entidad minúscula en la que trabajan solo diez personas. Cubre nóminas, costes financieros de avales, préstamos, pólizas de crédito y también sirve para las acciones de transferencias de conocimiento que realizamos desde la propia Fundación, como encuentros, jornadas, encuentros empresariales, promoción del Parque, asistencia a ferias, comunicación...
¿Y qué objetivos se marcan para 2017?
El objetivo se resume en una sola frase: el 2017 va a ser el año de la finalización completa de la actual etapa del Parque. Cuando antes hablaba de que están cubiertos los objetivos en un 90 por ciento, en el 2017 será del 100 por 100. Este año se abrirá el Centro de Empresas, el Centro Médico y se terminará la construcción del Instituto Internacional de Flebología, así como la urbanización de todos los espacios libres y zonas verdes, que está ya muy avanzada. El PTS será un gran pulmón verde para la ciudad. Y, por supuesto, llegará el Metro, que lo estamos esperando como agua de mayo. Así que 2017 será el año de finalización de esta etapa y, con un poco de suerte, se avistará la luz para la segunda etapa. Esperamos la aprobación definitiva del nuevo PGOU de Ogíjares y suponga el pistoletazo de salida de la segunda fase del PTS.
“La ampliación del PTS en Ogíjares supondrá 325.000 metros cuadrados más”
¿Cuántos metros cuadrados se esperan ampliar?
El PTS actual tiene 625.000 metros cuadrados y la ampliación supondría unos 325.000 metros cuadrados más. Supondría un aumento en torno al cincuenta por ciento. Y todo sería en el término municipal de Ogíjares, aunque está muy cerca, a 300 metros en línea recta de lo que hoy es el PTS.
¿En qué consisten los tres nuevos edificios que se van a abrir este año?
El Centro de Empresas será un contenedor de empresas. Para mí, el verdadero objetivo del Parque ha sido su actividad empresarial y esta se ha venido realizando estos años atrás en el vivero de empresas, conocido como BIC. Durante ese tiempo, una minoría ínfima de empresas han desaparecido, pero otras han crecido de manera meteórica. Por ejemplo, Neuron Biopharma nació hace seis años en un laboratorio de 70 metros cuadrados en el BIC y hoy cotiza en el mercado alternativo bursátil. Se ha escindido en dos sociedades y ha construido un edificio para sí misma que vale diez millones de euros. Y entre medias, está lo normal, que es que ni desaparezca la empresa ni que tenga un desarrollo tan meteórico. Así, las empresas que empezaron en el BIC con una oficina de dos mesas, dos ordenadores y 25 metros cuadrados, y que le han ido bien las cosas, ahora necesitan más espacio. En el Centro de Empresas podrán albergarse aquellas que tengan que ver con los objetivos del Parque o presten servicio al mismo. Existe ya un catálogo de empresas interesadas en instalarse allí. Si se abriera hoy, estaríamos en unos índices de ocupación en los primeros seis meses de entre el 70 y el 80 por ciento en la parte de oficinas y un 60 o 65 en la de laboratorios. Todo ello previo pago de una renta, cuyos precios están dentro de mercado, y que se han fijado en 10 euros por metro cuadrado al mes. Será de forma escalonada, ya que si se alquilan más de 200 metros se reduce, y si son más de 500 se vuelve a reducir. Así hasta el que alquila más de 1.000 metros cuadrados, que pagaría 6,60 euros por metro cuadrado al mes, más IVA y gastos generales. Creo que es un alquiler razonable.
El segundo edificio es el Centro Médico, que es lo mismo que el Centro de Empresa, pero solo para servicios médicos.
Y tercero es el Instituto Internacional de Flebología, una compañía nacida en Granada que patentó un tratamiento de las patologías vasculares, básicamente de las varices, y se realiza sin cirugía, en base a una microespuma esclerosante que deseca las varices. Ese medicamento lo vendieron a una compañía inglesa y hoy es el primer inyectable que ha sido autorizado por la FDA americana, la agencia del medicamento americana.
También se han buscado subvenciones dentro de programas europeos.
Tenemos dos programas, que trabajamos en 2016. Para nosotros ha sido un enorme estímulo y una gran satisfacción. Estamos trabajando en el ACTTiVA y en el ONCONET SUDOE. En uno la participación de la Fundación supera los 500.000 euros y en el otro alrededor de 300.000. Aparte de la inyección económica que supone para nosotros, es una posibilidad de colaborar con partners a nivel europeo que eran impensables para nosotros hace tan solo tres o cuatro años. Nos han venido a buscar para ser socios de estos programas y eso lo podemos decir con legítimo orgullo. De todas formas, no es solo la Fundación, sino el Parque el que se incorpora a estos proyectos.
“Sigo teniendo la misma ilusión que cuando fui alcalde de Granada”
Lleva catorce años ya como director de la Fundación PTS. Cuando mira atrás, ¿qué ve del Jesús Quero que fue alcalde de Granada?
Eso ya casi se me ha olvidado (ríe). Han cambiado mucho los tiempos. Yo fui el alcalde de capital más joven de España en mi época. Tenía entonces 35 añitos. Y cuando me reuní en noviembre con los directivos de Parques, en una conferencia internacional que tuvo lugar en Granada, era de los más veteranos, por llamarlo de alguna manera. Pero sigo teniendo la misma ilusión que tenía en aquel momento. Y se la aplico al trabajo. Es verdad que tengo mucha más experiencia, para lo bueno y para lo malo. Y en el camino he dejado muchísimas horas de trabajo, algunos aciertos y algunos errores, que nadie mejor que yo sabe los que he cometido. Ahora las cosas se ven con cierta retrospectiva. La sensación es que he ido pasando páginas de un libro y ya estoy en los últimos capítulos. Esa es la realidad.
Como exalcalde, ¿sigue interesado en la política? ¿Qué le ha parecido la salida forzada de José Torres Hurtado y la entrada en la alcaldía de un buen amigo suyo, Paco Cuenca?
Sigo interesado en la política, pero no participo activamente. Siempre he dicho que lo más difícil es saber irse de los sitios. El día que salí del Ayuntamiento dejé de opinar de política municipal en público, aunque en privado sí lo hago. Ahora, para mí es una satisfacción ver como alcalde no ya a un compañero de partido, sino a un amigo personal como Paco Cuenca, y que ocupa el mismo sillón que yo ocupé hace 25 años. Es un buen tipo, fui el coordinador de su primera campaña a la alcaldía de Granada, en lo que fue mi última incursión en política activa. Aposté por él y el tiempo ha venido a darme la razón. Tiene muchas dificultades, pero es un tipo muy entusiasta, honrado a carta cabal y acertará o se equivocará, pero de momento en los ocho meses que lleva como alcalde nadie puede señalar un error suyo con mayúsculas.
“En la Operación Nazarí hay sinvergüenzas, pero no creo que Torres Hurtado sea uno de ellos”
¿Y lo de Torres Hurtado?
La salida de Pepe Torres la he visto con pena. Lo conozco de toda la vida y siento un afecto personal por él, aunque la afinidad política entre ambos es nula. Pero confío, y lo digo de verdad, en que los tribunales demuestren su inocencia. Para mí, y se lo he dicho a él, si fuera culpable sería una sorpresa muy desagradable y él me contestó que no me la iba a llevar. En la trama nazarí hay sinvergüenzas y creo saber quiénes son, pero no creo que Pepe Torres sea uno de ellos.
Está retirado de la política. ¿Ha pensado en volver?
A finales de 2002, cuando dejé la delegación de Gobierno de la Junta a petición propia, me preguntaron si me planteaba volver. Y respondí: "Nunca, jamás, tampoco". Son los adverbios de negación. Y me mantengo en eso, y más a estas alturas. Para mí ya es una sorpresa que el país más importante del mundo, como EE.UU., dirima la presidencia entre dos abuelitos de 70 años. Para mí es impensable y ya es otra la gente que tiene que dar el paso adelante.