Jorge Molina, el goleador incansable
El delantero, máximo artillero del Granada, sumó un doblete histórico que le permite alcanzar los doce tantos este curso, diez de ellos en Liga
Escudero acababa de poner por delante al Granada cuando Jorge Molina entró al campo, para reemplazar a Luis Suárez, que sintió molestias. Aitor Karanka reconoció después que dudó si introducirle en el partido porque pensaba que se vería "desprotegido" entre los defensas del Mallorca. Pero a Jorge Molina no le preocupa contender con cuantos zagueros se le pongan delante. Forma parte de su trabajo, ese que desempeña como pocos al pisar el área. Cuarenta años no son nada para el alcoyano, goleador incansable, que dio un recital en Son Moix. Dejó dos muescas y asistió en otras dos, para cerrar un resultado escandaloso, hacer historia en LaLiga y aupar a su equipo fuera de los puestos del descenso.
Un desmarque, apenas cuatro minutos después de su entrada al terreno de juego, comenzó a desestabilizar el entramado defensivo de Javier Aguirre. El Granada ya era otro tras el descanso, pero fue el ingreso de Molina lo que realmente determinó el duelo. Un desmarque del veteranísimo delantero sorprendió a la retaguardia local, que no detectó el movimiento. Sí lo hizo Machís, que le filtró el balón. El delantero rojiblanco llegó hasta el límite del campo antes de entregar el esférico a Puertas para que anotase el tercero de los nazaríes este sábado.
El Mallorca recortó distancias poco después, pero Jorge Molina ya había olido la sangre. En una jugada aparentemente anodina, condenada a la pérdida cuando el delantero se vio acorralado por camisetas rojas cuando se acercaba al área, el ariete halló una grieta. Desde fuera del hábitat del portero, golpeó con potencia, pero a ras de hierba. Un disparo sutil, bien colocado, inalcanzable pese a la estirada de Sergio Rico. Fue un 'dejà vu' en la retina de los aficionados baleares, que ya vieron un golpeo similar del atacante cuando les hizo tres dianas en la primera vuelta.
Todo eso fue antes de ensañarse con Raíllo. El central fue duramente castigado por Jorge Molina, tal vez como venganza por el gol anterior del Mallorca. Primero, el delantero le aventajó con el cuerpo para hacerse con un balón que iba directo al defensa, tras lo que regaló a Uzuni el gol. Después, le sacó la cadena con un giro de cadera en el área, que concluyó con un disparo a la media vuelta que abrochó el resultado. El trabajo estaba hecho, y su nombre, inscrito en la historia de la competición.
Los dos goles de Jorge Molina en el Visit Mallorca Estadi le convirtieron en el futbolista más veterano en hacer un doblete en Primera, además de ser el segundo que marca después de cumplir 40 años. Además, cerró su cuenta goleadora contra el cuadro bermellón con cinco tantos, algo que nadie había conseguido, sin militar en Barça o Madrid, desde que lo hizo Xabi Prieto en la temporada 2012/2013. Son doce las dianas que ha festejado en este curso, diez en Liga y dos en Copa, que le convierten en el máximo artillero de la plantilla pese a haber sido suplente en la mitad de los partidos que ha jugado.
Unos datos que engrosan los registros del punta rojiblanco. Suma 27 goles desde que llegó al Granada, en el verano de 2020. Mantiene, por ello, un promedio goleador de 0,3 muescas por partido, en los 84 encuentros que ha disputado en los últimos dos cursos. La cifra alcanzada por el alcoyano esta temporada mejora sus registros de otras cuatro de sus campañas en Primera, e iguala los de la temporada 2013/2014.
Más allá de los números, los goles de Jorge Molina se han traducido en puntos para el Granada. El ariete ha anotado en siete encuentros ligueros en lo que va de curso y en ninguno ha visto perder a su equipo. En concreto, sus dianas sirvieron para igualar los encuentros contra Getafe, Athletic de Bilbao, Cádiz y Rayo Vallecano, así como para certificar la victoria contra el Mallorca, en dos ocasiones, y el Atlético de Madrid. En Copa, mantiene el mismo balance, tanto en el ejercicio actual como en el anterior, y todavía se recuerdan sus dianas en Europa League contra el Molde y el PSV Eindhoven.