José Manuel Garrido: "Contar con cirugía cardiaca eleva la cualidad del Hospital HLA Inmaculada"

El responsable de la Unidad Cardiovascular del centro sanitario granadino destaca las más de 50 operaciones acometidas desde su llegada

Entrevista al medico Jose Manuel Garrido
José Manuel Garrido, responsable de la Unidad Cardiovascular del Hospital HLA Inmaculada | Foto: Antonio L. Juárez
Sergio Rodríguez Acosta
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"Lo que no mejora, empeora, y el conformismo es algo realmente malo”. Así define su forma de ser José Manuel Garrido Jiménez, responsable de la Unidad Cardiovascular del Hospital HLA Inmaculada de Granada. Su llegada hace poco más de un año a este centro sanitario fue un paso sobresaliente, pues incorporó una cirugía cardiaca de máximo nivel. Durante este tiempo, el doctor Garrido Jiménez y su equipo han acometido más de 50 operaciones. El prestigioso profesional es consciente del nivel de exigencia que afronta el equipo de HLA, pero destaca que ha "elevado su calidad".

José Manuel define la cirugía cardiovascular como "la faceta de la Medicina que versa sobre la prevención, estudio, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades que afectan al corazón, el pericardio, los grandes vasos y el sistema vascular periférico”. La complejidad de este campo es solo superada por su importancia, pues permite el movimiento de los nutrientes y el oxígeno por el organismo.

Atención global

El cirujano, Doctor por la Universidad de Granada, explica que las patologías cardioquirúrgicas eran un techo para la sanidad privada en Andalucía oriental, una situación que generaba el traslado de pacientes a "otras ciudades u otros hospitales". Esa circunstancia ya es pasado para el Hospital HLA Inmaculada de Granada, que "tiene la capacidad de atender a los pacientes de una manera global", según apunta el responsable de su Unidad Cardiovascular.

El doctor Garrido Jiménez, conocido en toda la provincia por su gran prestigio como médico y cirujano, hace especial hincapié en que sus compañeros y compañeras de quirófano son fundamentales: "Somos un equipo muy compenetrado. Trabajo con dos cirujanas que son brillantes y que abarcan procedimientos como la cirugía transcatéter o la compleja cirugía de las cardiopatías congénitas”. José Manuel sabe que ampliar horizontes siempre implica un punto más de exigencia para todas las áreas del hospital, pero asegura que este cuenta “con una infraestructura tecnológica que lo hace claramente competitivo”.

La Unidad Cardiovascular del Hospital HLA Inmaculada practica desde la cirugía cardiaca más convencional hasta las actuales técnicas de vanguardia de cirugía transcatéter como implantar una prótesis aórtica a través de la arteria femoral sin necesidad de parar el corazón. Una de sus máximas es apostar por la cirugía reparadora antes que por la protésica. José Manuel es conocedor de que todas estas posibilidades, "costosas" y destinadas a "un número reducido de pacientes" son reales gracias a una apuesta del centro. “La visión que tengo de la medicina actual es que tenemos que ser transversales. La multidisciplinariedad nos obliga a trabajar juntos. Un superespecialista es el que sabe cada vez más de cada vez menos y necesita rodearse de los mejores que completen su actividad", desgrana el doctor.

Calidad, seguridad y cuidado del plano emocional

La aspiración del cirujano granadino es "crear una gran unidad" en la que trabajen en armonía numerosas especialidades con el objetivo de "dar cualidad al proyecto”, algo que se traduce en "calidad y seguridad" para los pacientes. Más allá de los procesos y los tratamientos que cada corazón necesita, siempre hay una persona que debe afrontar situaciones que pueden ser delicadas, como puede ser entrar en un quirófano para una operación importante. “Yo establezco con los pacientes una dinámica emocional importante. En este ámbito, la única elección que pueden hacer es elegirte como médico. A mí, para bien o para mal, me eligen muchos pacientes", declara José Manuel. Quienes pasan por sus manos acostumbran a tener su teléfono. Él se lo facilita con toda la confianza del mundo y sostiene que "nadie abusa o llama constantemente''.

La implicación del doctor Garrido Jiménez es un apoyo para "generar confianza y una mayor adherencia al tratamiento". La cercanía con el paciente también es clave para hacerle entender "las vicisitudes" de la cirugía, en la que se juega siempre con probabilidades de éxito.

La impronta del responsable de la Unidad Cardiovascular del Hospital HLA Inmaculada de Granada está presente en sus métodos de trabajo y en su forma de ser. “Siempre he sido una persona curiosa e inquieta, y eso hace que explore permanentemente los límites de la realidad que me rodea”, explica el profesional, quien desde su inquietud buscará seguir elevando el techo del Hospital HLA Inmaculada.