Juan García Montero: “Estoy firmemente seguro de la inocencia de Torres Hurtado e Isabel Nieto”

A punto de cumplir 48 años, Juan García Montero (Granada, 1969) quiere revolucionar la política en la capital y en la provincia. Anuncia su candidatura para presidir el PP en Granada y, de fondo, subyace su ilusión de encabezar la lista popular en las próximas elecciones municipales con el fin de convertirse en alcalde de la ciudad. No lo tendrá fácil, porque para ello tendrá que desbancar en primavera a Sebastián Pérez, quien acumula 12 años en el cargo y suma las mismas aspiraciones que su opositor. Ambos lideran los dos claros bandos que hoy día parten por la mitad una formación que ambiciona recuperar la alcaldía de la capital, el gobierno en la Diputación y ayudar en todo lo posible a que Juanma Moreno alcance la presidencia de la Junta de Andalucía

Juan García Montero mientras es entrevistado | Foto: Asun Rodriguez

García Montero ha sido concejal de Cultura del Ayuntamiento de Granada desde 2003, siempre con José Torres Hurtado y, además, portavoz del equipo de gobierno municipal desde 2011. Desde la salida de su mentor, a raíz de la ‘Operación Nazarí’, se ha visto arrinconado por Sebastián Pérez y sus partidarios, tras muchos años en primera línea como cara visible de la gestión municipal. Pero él está convencido de que le queda mucho por aportar a la política y no se resigna a este castigo al que considera que está siendo sometido por ser amigo del exalcalde y de Isabel Nieto, de los que defiende firmemente su honestidad mientras la Justicia no dicte lo contrario. En su visita a Granada Digital, ha tiempo suficiente para explicar sus planes de futuro y dar un amplio repaso a la actualidad en estas veinticinco preguntas.

P. ¿Por qué ha dado el paso adelante para presentar su candidatura a la presidencia del PP de Granada?

R. Esta candidatura es un derroche de honestidad. Quiero ser presidente porque, en conciencia, creo que hay que dar este complicado paso adelante. Es difícil, porque es pelearse con una persona al que uno le tiene afecto y que es compañero de partido. Pero merece la pena defender mis ideas e intentar cambiar el PP, que necesita un impulso y una renovación estructural, revisar aquellas cosas que hay que mejorar y fortalecer lo bueno que se ha hecho. Agradezco a todos los compañeros de partido que me han animado a dar este paso, no les voy a defraudar y voy a llegar hasta el final.

"He recibido el apoyo de numerosos afiliados"

P. Le quedan meses de dura lucha por delante

R. Sí. Ahora se abre un periodo de congresos en el PP. Primero será el congreso nacional, donde se consolida el liderazgo de Mariano Rajoy. Después, será el regional, que va a consolidar también la apuesta de todo el partido para que Juanma Moreno siga liderando nuestra estructura y sea el próximo presidente de la Junta de Andalucía. Es una persona muy válida, que está haciendo un trabajo sensacional y estoy convencido de que es el hombre idóneo para liderar el profundo cambio que necesita nuestra Comunidad. Y, después, llegarán los congresos provinciales, que es desde donde el PP debe evolucionar. Es necesario que las bases adquieran un papel más predominante, que se implante la filosofía de ‘un afiliado, un voto’ y limitar el número de años en los puestos de representación. Incluso que se planteen las primarias para determinadas responsabilidades.

P. ¿Cree que cuenta con los apoyos suficientes para ser elegido?

R. Como sabe, soy muy futbolero y me gusta poner ejemplos de fútbol porque se entienden muy bien. Cuando el Real Madrid y el Barcelona se enfrentan puede ganar cualquiera. El que asegure tajantemente que va a ganar uno u otro, se equivoca. Muchas veces, uno va de 'gallito' y piensa que va a ganar fácil porque cree que el otro equipo está medio muerto, y de pronto le meten cuatro a cero. Pues esto es parecido. La elección de presidente provincial será como un Madrid-Barça, puede pasar de todo. Lo que sé es que tengo muy buena plantilla, mejor de lo que algunos se creen, y que el partido va a ser muy disputado y reñido.

P. ¿De dónde salen esos apoyos?

R. Desde toda la provincia. He tenido la suerte de conseguir el apoyo, el entusiasmo y la ilusión de numerosos afiliados, muchos de los cuales ostentan cargos en la provincia, bien como alcaldes o como presidentes locales. Debo confesar que mi voluntad no era ser candidato, pero ha sido la llamada de todos ellos alentándome a que diera ese paso lo que me ha hecho tomar esta decisión.

P. Cuenta, por ejemplo, con el apoyo de José Torrente, exvicepresidente de la ejecutiva de Sebastián Pérez.

R. Sí, es una persona que ha sido defenestrada por Sebastián Pérez por haber mostrado el apoyo a esta candidatura que voy a representar. No entiendo que la política deba ser así. Yo formo parte de un equipo de gobierno en el que se decidió que la candidata a la alcaldía tenía que ser Rocío Díaz y ese mismo día le di un abrazo y le ofrecí mi apoyo. No hice ni una sola declaración ni un solo gesto en contra de Rocío Díaz. Esa debe ser la dinámica en un partido en el que todos debemos ser amigos y defendemos las mismas siglas. El que haga otra cosa se equivoca y todos los pasos que dé en ese sentido solo sirve para llenar mis alforjas de más apoyos.

P. Hay quien piensa que ha dado este paso adelante porque o sale de presidente o se cava su fosa política. Ya no iban a contar con usted para ninguna lista electoral.

R. Es posible. Si fuera al revés, estoy convencido de que no sería así. Si soy el presidente contaré con todo el mundo porque el partido somos todos. Pudiera ser que si gana la candidatura de Sebastián Pérez me pasara lo mismo que a José Torrente y estaría defenestrado. Pero ese no es el camino. La vida te lleva a veces a una encrucijada en la que hay que tomar decisiones y en política hay que ganarse los apoyos, con un discurso propio, y defender lo que uno cree.

"Me supondría una gran ilusión ser alcalde de Granada" 

P. ¿Le gustaría ser alcalde de Granada? ¿Aspiraría a ello si fuera presidente del PP provincial?

R. He tenido la gran suerte, aunque fuera de forma accidental durante mes y medio, de ser alcalde de Granada y eso ya lo tengo en mi modesto currículo político. Y eso me hace ilusión, aunque fuera de forma desgraciada por la 'Operación Nazarí'. Fue un gran honor. Y sí, reconozco que como para cualquier granadino, me supondría una gran ilusión ser alcalde de su ciudad. Así lo han reconocido el propio Sebastián Pérez o Rocío Díaz, que han manifestado ese deseo. Para cualquier militante del PP y, sobre todo, para aquellos que hemos estado rondando la Plaza del Carmen durante mucho tiempo, y aún seguimos ahí, supone una gran ilusión. Pero será el partido el que designe al candidato.

P. Lo que sí habrá visto es que desde el aparato oficial no se lo van a poner fácil. Ya han salido a mostrar su apoyo a Sebastián Pérez el nuevo secretario general, la portavoz del grupo municipal del PP y el portavoz en la Diputación.

R. El aparato oficial, tanto nacional como regional, es el garante de que todo se haga bien y no existan manipulaciones, para que nadie pueda aprovechar el poder estructural y orgánico del partido en beneficio de su candidatura. Tengo total confianza en que así será. En cuanto al resto de apoyos, pues si Sebastián Pérez me retiró a mí de portavoz del grupo municipal y puso a Rocío Díaz es lógico que ella se lo agradezca con su apoyo. Yo también apoyaré a Sebastián Pérez como actual presidente hasta el día del congreso provincial. Espero que a partir de ese día sea Sebastián Pérez el que manifieste esa misma lealtad y me apoye a mí si los afiliados estiman que sea el próximo presidente.

P. Declaraciones a favor de Sebastián Pérez de Pablo García, Rocío Díaz, Fuentes, Robles... El enemigo lo tiene en casa.

R. No somos enemigos, aunque me apena que estas cuestiones se lleven de esta forma porque no aportan mucho. Lo que más me apena es que se vean forzados por parte de alguien a dar una cascada de ruedas de prensa. Eso denota el miedo por parte de Sebastián Pérez. Eso sí, les tengo que agradecer de que, cada vez que un medio de comunicación da cuenta de sus declaraciones, aumentan los apoyos hacia mi candidatura y eso lo demuestra la gran cantidad de llamadas que estoy recibiendo.

P. ¿Qué le parecieron las declaraciones de Pablo García, que le acusó de ser el candidato de Torres Hurtado y le incitó a no hacer juego sucio?

R. Me parecieron inapropiadas. Cometió un error de principiante al no tener un discurso propio. En un partido serio como el nuestro hay una regla que no se puede romper nunca y es no faltar al respeto, no insultar y no hacer acusaciones a otro compañero. Espero que ese deseo de que sea un congreso limpio se cumpla y que no sea una amenaza velada porque el que debería estar preocupado soy yo. Desde mi candidatura no van a encontrar juego sucio.

P. ¿Le ofende que le acusen ser la candidatura de Torres Hurtado?

R. No me ofende, pero sí me da pena. Debemos demostrar que somos compañeros. Y si somos capaces de tener un congreso abierto, tranquilo y con diálogo, demostraremos a la ciudadanía que el PP es un partido que no teme a las prácticas democráticas y daremos un ejemplo de que merecemos la confianza de los granadinos para recuperar la alcaldía de Granada, que es el primer reto junto a recuperar el timón de la Diputación Provincial.

"No estoy enfrentado a Sebastián Pérez, él es el que está enfrentado a mi"

 P. ¿Está enfrentado a Sebastián Pérez?

R. Yo diría que es él el que está enfrentado a mí. Desde hace mucho tiempo noto algunas cosas que me entristecen. La amistad y la buena relación tienen que estar por encima de las cuestiones políticas. Yo no quiero estar enfrentado a Sebastián Pérez. Si él quiere estar enfrentado a mí, el que tiene el problema es él. En mí va a encontrar es una persona que no quiere hacerle ningún daño. Confío que é tampoco me hagan daño a mí.

P. ¿Se habla con él?

R. Últimamente menos. Antes teníamos una relación más fluida, pero desde que dejó el Ayuntamiento, las oportunidades han sido menores.

P. Tras tantos años en primera línea, le han apartado de todos los cargos. ¿Está castigado por algún motivo?

R. No creo, aunque esto es la vida. Hay momentos en que uno está más fuerte y otros, débil. Lo importante es saber afrontar las circunstancias. A veces tienes que ser un hacha y otras un leño. El hacha tiene que estar muy afilada para cortar bien los leños. Y el leño tiene que armarse de fuerza para soportar los golpes del hacha. Cuando las cosas se hacen bien, las pruebas que le pone a uno la vida son para fortalecerse.

P. Llevan mucho tiempo diciendo en el PP de Granada que no existe división alguna. La realidad parece muy diferente.

R. En todas las fuerzas políticas hay momentos de debilidad. Recuerdo los congresos de confrontación de Del Ojo y Martínez Soriano. Pero al día siguiente del congreso salía un partido más fuerte y con representantes de cada una de las candidaturas en el nuevo comité ejecutivo. Es bueno que esto pase en los partidos, no hay que verlo como un ataque. Lo que sería malo para la democracia es que no existiera ese debate.

P. Esa división estaba visualizada en dos bandos: el de Torres Hurtado y el de Sebastián Pérez.

R. El distanciamiento se agravó con la 'Operación Nazarí'. Ahora la Justicia pondrá a cada uno en su sitio. En el PP deberíamos defender siempre a las personas que creamos que son inocentes y pasar página de la mejor manera posible para que esto no sea un lastre. Hay que hacerlo con mucha responsabilidad y respeto. Y eso quiero hacer cuando sea presidente del PP.

"Estoy convencido de que Sebastián Pérez retirará su candidatura"

P. Ha abogado por que Sebastián Pérez se retire y no se presente. ¿Cree que su ciclo está agotado?

R. Creo que Sebastián Pérez, por el bien del PP y de todos sus afiliados, reconsiderará su decisión de presentarse de nuevo a la presidencia del partido y, por ende, a la alcaldía de Granada, algo que ya ha afirmado que desea. Y retirará su candidatura por sentido de la responsabilidad, porque creo que quiere al PP. Estoy convencido de lo que estoy diciendo. Lo conozco bien y creo que, además, será la mejor decisión.

P. Por su gran trascendencia, volvamos al tema de la 'Operación Nazarí'. Usted ha estado trece años junto a Torres Hurtado, al que el informe policial califica como el cabecilla de una trama de corrupción urbanística organizada. ¿Nunca sospechó nada o es que cree que no existe tal trama?

R. Realmente creo que no existe ninguna trama. He estado muchos años despacho con despacho con Torres Hurtado y nunca he visto una reunión extraña, jamás le he visto ostentación económica alguna, más bien todo lo contrario; siempre le he visto humilde y transparente, muy preocupado siempre por las cuestiones relativas a Granada. Y hablar de Isabel Nieto es como hablar de Santa Teresa. Me cuesta pensar que alguien crea que ella es responsable de algún delito. Defiendo la honestidad de ambos porque creo en ellos. Si sospechara lo más mínimo de su honestidad sería el primero en no defenderlos. Jamás saldría de mí una defensa hacia alguien sobre la que pueda tener alguna sospecha de corrupción política.

P. O sea, que cree en la inocencia de Torres Hurtado y de Isabel Nieto.

R. Sí, creo firmemente en su inocencia. Insisto en que nunca he visto nada raro. La Justicia dirá finalmente si son culpables o inocentes y sabremos la verdad. De momento, todo parece muy contradictorio y parece más una operación mediática que una operación judicial.

"Torres Hurtado está dolido, pero Isabel Nieto lo está pasando aún peor"

P. ¿Ha hablado recientemente con Torres Hurtado o Isabel Nieto? ¿Cómo se encuentran?

R. Tengo la oportunidad de hablar con ellos de vez en cuando y de preguntarles cómo están. Y lo cierto es que él es un hombre más fuerte, a pesar de los años, y con toda la experiencia política que tiene sabe asumir mejor estas circunstancias, aunque le duele muchísimo. Está convencido de su honestidad e inocencia y va a defenderla haciendo reclamaciones muy importantes cuando llegue el momento. Lo tiene muy claro. Isabel Nieto lo está pasando bastante peor. Es una persona íntegra y que se hable así sobre su honestidad no lo lleva nada bien. Confío mucho en la Justicia y deseo que todo se esclarezca en el menor tiempo posible.

P. ¿Cómo se ve la actualidad política, arrinconado en la oposición, tras tantos años gobernando?

R. Se ve de una manera muy especial. Desde que llegué al Ayuntamiento en 2003 siempre he estado en el gobierno y como concejal de Cultura. Y he llegado a asumir tanto el rol de responsabilidad por la ciudad que hasta me compadezco de los compañeros del gobierno del PSOE, porque con ocho concejales es imposible gobernar Granada. No lo están haciendo bien porque es imposible hacerlo bien. Me da mucha pena lo que están haciendo. Por ejemplo, en el área de cultura, no se ha celebrado el concierto de la OCG en la Plaza de Toros este año, el Retroback ha desaparecido del mapa, aunque dicen se lo van a llevar a mayo, y desaparecen actividades de la agenda cultural, como es el caso del Festival de Jóvenes Realizadores. Me apena lo que hacen.

"Granada merece un alcalde de mayor dimensión que Paco Cuenca"

P. ¿Qué nota le pondría a la gestión de Paco Cuenca?

R. Una nota muy mala. Y los del PP tenemos bastante culpa de ello, por cómo se nos escapó el gobierno de la ciudad por errores propios. Paco Cuenca se ha encontrado con la alcaldía de forma accidental y pienso que Granada merece un alcalde de mayor dimensión, de una categoría superior. Estoy convencido de que, sea quien sea el candidato, el PP recuperará la alcaldía en las próximas elecciones municipales. Y lo único que espero es que en el tiempo que le queda a Cuenca como alcalde no meta mucho la pata y que no eche por tierra todo el buen trabajo que se ha realizado, o el que estaba ya planificado como, por ejemplo, el de capital europea de la cultura. Desde que nos fuimos ha desaparecido del mapa. No les importa. Y eso es un proyecto estratégico que sirve no solo para hacer programaciones culturales, sino para transformar urbanísticamente la ciudad y conseguir subvenciones de la Junta, del Gobierno de España, de los fondos europeos y de toda la estructura universitaria mundial, porque coincide con el V centenario de la Universidad de Granada. Sin embargo, ellos no están haciendo nada.