El jurado declara culpable de asesinato al legionario que degolló a su expareja en el Zaidín

El veredicto se dio a conocer en torno a las 23:00 horas y la decisión fue unánime por parte de los integrantes

Granada.- Tribunales.- El jurado declara culpable de asesinato al legionario que degolló a su expareja en el Zaidín
Primera sesión del juicio en la Audiencia de Granada contra el legionario, ya culpable | Foto: Álex Cámara/EP
Europa Press
0

El jurado popular ha declarado por unanimidad culpable de asesinato al legionario que ha sido juzgado esta semana en la Audiencia de Granada acusado de degollar, el 8 de febrero de 2020 a su expareja sentimental, Ana María M.M., de 38 años, en su vivienda del barrio granadino del Zaidín, según han informado a Europa Press fuentes del caso.

Los miembros del jurado recibieron el objeto del veredicto este pasado jueves, después de que la Fiscalía mantuviera su petición de 25 años de prisión por un delito de asesinato con la agravante de parentesco y de género para este joven de 26 años que en el momento de los hechos era legionario destinado en Viator.

Tras deliberar durante toda la jornada, el jurado dio a conocer su veredicto en torno a las 23:00 horas, y, por unanimidad, le consideró culpable de asesinato y declaró probados todos los hechos que se le imputan en la causa, de lo que se desprende que actuó con alevosía, tal y como mantienen las cinco acusaciones.

Durante la última sesión del juicio, el resto de las acusaciones también mantuvieron los cargos contra el acusado, tanto las particulares ejercidas por la hija y el padre de la víctima, como las acusaciones populares que ejercen el Ayuntamiento de Íllora y la Junta de Andalucía, aunque esta última eliminó la agravante de abuso de superioridad.

El acusado declaró durante la primera sesión del juicio que mató a su expareja después de que ella intentara agredirle primero con un cuchillo tras una discusión. "Como legionario mi mejor defensa era luchar, no salir huyendo; no soy un cobarde", llegó a sostener cuando se le preguntó por qué no optó por marcharse o por manejar de otro modo la situación tras ese supuesto forcejeo con la víctima en el que, según reconoció, él no sufrió ninguna lesión. La víctima, Ana María M.M, de 38 años, trabajaba como profesora de Educación Infantil en el Colegio Isabel La Católica de la Zubia y tenía una niña de once años de una relación anterior.