Denuncian la agresión de un preso a un funcionario en el módulo de aislamiento de la cárcel de Albolote
El incidente se produjo cuando el trabajador se disponía a sacar al preso a la actividad de gimnasia de este módulo, en el que se alojan "un gran número de internos muy peligrosos, yihadistas e internos inadaptados al régimen penitenciario".
La Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) ha condenado la agresión de un interno de la cárcel de Albolote (Granada) a un funcionario en el departamento de aislamiento, donde le propinó un puñetazo y una patada en el costado.
El colectivo explica en una nota que el incidente se produjo el 4 de octubre, cuando el trabajador se disponía a sacar al preso a la actividad de gimnasia de este módulo, en el que se alojan "un gran número de internos muy peligrosos, yihadistas e internos inadaptados al régimen penitenciario".
El resto de compañeros presentes en el lugar lograron reducir al interno, si bien el funcionario tuvo que ser atendido por los servicios médicos del centro debido a los golpes recibidos.
La APFP vincula esta nueva agresión con la masificación en este centro penitenciario, que mantiene "uno de los primeros puestos en número de internos de todo el país, teniendo en la actualidad una población de casi 1.300 internos".
Censuran asimismo que la dirección del centro no ataje "los graves altercados de seguridad" que se producen "casi a diario" ni haga las gestiones oportunas para que disminuya la población reclusa en Albolote, por lo que reclaman el cese inmediato del director de la prisión.
"A diario, los funcionarios de prisiones arriesgan su vida e integridad física sin ningún tipo de reconocimiento por parte de la administración penitenciaria en cuanto a sus peticiones de mejoras salariales, laborales y de personal; todo lo contrario, una insultante persecución y desconsideración hacia nuestro trabajo, todo orquestado desde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias", agregan desde la APFP.
Reclaman así que los funcionarios de prisiones sean considerados agentes de la autoridad, al igual que otros colectivos como los maestros, y más medios materiales y humanos.