La comunidad internacional contribuirá con 80 millones al desminado de Colombia

Casi 11.500 colombianos han resultado heridos o muertos por la explosión de minas terrestres desde 1990

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E.P.
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Colombia recibirá más de 80 millones de dólares en aportes de la comunidad internacional para destruir en los próximos cinco años las minas antipersona sembradas por la guerrilla en las montañas y selvas, ha anunciado el presidente colombiano, Juan Manuel Santos.

Colombia es uno de los países del mundo más afectados por las minas terrestres como consecuencia del conflicto armado de 52 años que ha dejado 220.000 muertos y millones de desplazados.

"Es una cifra que nos confirma el apoyo que está teniendo Colombia y algo que nos estimula a seguir adelante porque uno de los grandes retos es desminar nuestro país", ha declarado a la prensa Santos, quien asiste a la Asamblea General de Naciones Unidas. "Va a ser un proceso difícil, costoso", ha reconocido.

Casi 11.500 colombianos han resultado heridos o muertos por la explosión de minas terrestres desde 1990, incluyendo 7.025 efectivos de las Fuerzas Armadas y 4.433 civiles, de acuerdo con cifras del Gobierno que estimó en 327 millones de dólares el costo total del plan de desminado.

Además de las ayudas internacionales de países como Estados Unidos, Noruega, Canadá y Suiza, la financiación del plan de desminado, que se extenderá a 28 de los 32 departamentos de Colombia, se hará con recursos del Gobierno colombiano.

El desminado es uno de los temas incluidos en el acuerdo de paz que cerró en agosto el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Cuba para poner fin a la confrontación de más de medio siglo.

Los combatientes de esa guerrilla, que se convertirá en un partido político, suministrarán información detallada de los sitios en donde sembraron minas y otros artefactos, lo que facilitará las actividades de destrucción.

El acuerdo de paz será firmado el próximo 26 de septiembre en Cartagena y el 2 de octubre los colombianos irán a las urnas para avalarlo o rechazarlo en un plebiscito.