La defensa de Roca denuncia ante el TS la "demonización" del caso 'Malaya'
La defensa del principal acusado y presunto cerebro de la trama de corrupción en Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, ha presentado recurso de casación contra la sentencia del caso 'Malaya', en el que pide la absolución, denuncia la "demonización" del proceso e insta a su nulidad, cuestionando desde el inicio de la instrucción hasta el último apartado de la resolución dictada por la Audiencia el pasado mes de octubre, incluido el desarrollo del juicio, del que dice que no ha sido justo.
Roca fue condenado en total a 11 años de cárcel por un delito continuado de cohecho pasivo para acto injusto no realizado, por blanqueo continuado cometido como jefe de una organización, con la atenuante de confesión; por dos delitos de fraude por dos operaciones y por prevaricación, al quedar la condena de un año por un delito de cohecho incluida en la del continuado. Además, se le impuso la multa de 240 millones de euros.
En un escrito de más de 750 páginas, al que ha tenido acceso Europa Press, la defensa examina todo el procedimiento, solicitando también la nulidad del juicio y de la sentencia, para dictarse otra "motivada y sin contradicciones" y en la que no haya "predeterminación condenatoria". También pide la eliminación de hechos por los que no fue acusado.
La letrada solicita la nulidad, por vulneraciones durante la instrucción, de las intervenciones telefónicas y de los registros --algo ya planteado en cuestiones previas--; y cuestiona cómo se ha conducido el plenario, instando a que haya nuevo juicio con otro tribunal. Además, pide la devolución de la causa al tribunal de instancia para que se pronuncie de aspecto sobre los que no lo hizo.
Sobre la instrucción, se indica que parece que el fiscal "había escogido al instructor de su elección" para esta investigación y que "éste se había dejado escoger", reiterando las irregularidades ya denunciadas.
También considera que Roca "no ha tenido un juicio justo" y que la actuación del Tribunal "ha causado indefensión", al verse "limitado su derecho de defensa". Además, señala que la Sala "ha rebasado frontalmente sus márgenes tanto fáctica como subjetivamente", añadiendo que ha faltado "a su deber de imparcialidad, se ha convertido en juez y parte, al condenar por hechos ajenos a la acusación formulada contra mi mandante".
A su juicio, "durante el plenario el Tribunal adoptó una postura tendente a tratar de validar la tesis acusatoria supliendo para ello su iniciativa probatoria, acordando de oficio la práctica de pruebas ex novo, excediendo por completo el contenido de las prerrogativas que otorga la ley, lo que evidencia un postura contraria a la debida imparcialidad, cuyo resultado ha de concluir con la declaración de nulidad de lo actuado".