La depuradora Oeste-Los Vados triplicará su capacidad y beneficiará a 285.000 granadinos
La Junta de Andalucía prevé invertir este año 150 millones para una obra que está previsto que finalice en el año 2022
La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo, ha presidido en la sede de la Delegación del Gobierno de la Junta en Granada la firma del contrato de la obra de ampliación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Oeste-Los Vados. "Se va a triplicar su capacidad", ha comentado Crespo, pues con el incremento podrá acoger la depuración relativa a 285.000 habitantes de Granada.
Acompañada por el alcalde de la capital, Luis Salvador; el director general de Infraestructuras del Agua, Sergio Arjona; el gerente de la UTE Ferrovial Agroman-Cadagua-Sistem Infraestructuras y Operaciones EPC, Carlos Cordón Ureña; el delegado de la Junta en Granada, Pablo García; y la delegada territorial de Agricultura, María José Martín, la consejera ha explicado que las obras permitirán aumentar la capacidad de tratamiento de aguas de 24.000 a 72.000 metros cúbicos diarios para dar servicio a los municipios incluidos en la Aglomeración Granada-Los Vados asociada a esta EDAR, y se espera que concluyan en 2022.
Aprobada el pasado mes de junio en Consejo de Gobierno, esta actuación cuenta con un presupuesto de 30,2 millones de euros para la contratación conjunta de la redacción del proyecto y las obras de crecimiento. Y en cuanto a los plazos, la titular de Desarrollo Sostenible ha puesto en valor el trabajo de los técnicos de la Consejería y la Delegación de Granada para dar "una agilidad especial" a este proyecto que, a pesar de haber salido a licitación hace un año, aún no se había cerrado el contrato. "Queremos que la depuración de aguas en Andalucía sea una realidad", ha apuntado Crespo.
La consejera se ha referido también en su intervención al proyecto de los presupuestos de 2019, donde queda patente que el agua es un "tema fundamental" para la Junta, y ha recordado que la Consejería tiene previsto sacar a licitación más de 150 millones de euros en 2019 para actuaciones en materia de depuración de aguas en la comunidad autónoma.
"Andalucía se pone a la cabeza en cuestión de depuración", ha resaltado Carmen Crespo, apuntando que desde esta tierra "queremos demostrarle al resto de España y Europa que podemos hacer las cosas bien, que no hay nada más ecológico que depurar las aguas residuales y que los vecinos van a ver que los recursos económicos que pagan en sus recibos se ven rápidamente invertidos en obras que necesitan".
Previamente a este acto, la consejera ha visitado las obras de encauzamiento de la Rambla de Alcárceles a su paso por Padul, labores dirigidas a terminar con los daños que se producen en el núcleo urbano de forma periódica por la subida del cauce. Actualmente está acometida la mitad de la actuación, cuyo presupuesto asciende a 6,3 millones financiados por Feder y que, si se cumplen las previsiones, estará acabada dentro de un año, en julio de 2020.
Las aguas de este cauce de la Cuenca Mediterránea Andaluza llegan a la laguna de El Padul, ubicada en el Parque Natural de Sierra Nevada y, tras pasar por la presa de Béznar, acaban en el río Guadalfeo.
Coincidiendo con la visita, Crespo ha anunciado la salida a licitación de las obras del proyecto de prevención y gestión de catástrofes de las presas de Béznar y Rules. El presupuesto base de esta actuación asciende a 5,3 millones de euros cofinanciados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).
Según las previsiones, la ejecución se llevará a cabo en once meses una vez adjudicadas las labores y se beneficiará a más de 85.000 habitantes de un total de nueve municipios de la provincia de Granada que se verían afectados en la primera hora y media tras producirse una inundación o rotura de servicios esenciales en caso de catástrofe: concretamente, Ízbor, Acebuches, Vélez Benaudalla, Lobres, Salobreña, El Varadero, El Pinar-Pinos del Valle, Lanjarón y Motril.
El proyecto contempla la mejora y renovación de la red de drenaje, el refuerzo de la prevención de catástrofes (auscultación) y su automatización, así como el sistema de gestión de estas situaciones. De esta forma, se definirán las soluciones para que estas presas se adapten a la normativa.