La estación de los poetas
Aunque para unos grandes almacenes la estación de los poetas suele llegar con antelación a los plazos que marca el calendario, la realidad es que son tres meses. Sí, noventa y dos días, los que van del 20 de marzo al 20 de junio. Por tanto, en sentido estricto, el consejero Felipe López tiene todo ese plazo para hacer válido su compromiso de entrada en servicio del aplazadísimo tranvía metropolitano de Granada "en la próxima primavera".
Ese compromiso que se está poniendo en cuestión desde diversos ámbitos con variadas razones y todas ellas por lo general válidas: la contratación del personal y las correspondientes pruebas, la señalización de seguridad, la adaptación al sistema de autobuses urbanos y metropolitanos... Nada de ello se sabe ni se desmiente aunque cuando se le plantea representantes de la Junta la respuesta es que se cumplirá el compromiso.
El compromiso, repito, es primavera. Hay quien dice que el consejero dijo marzo. Yo no lo recuerdo, la verdad. Si alguien tiene el testimonio o mejor memoria que yo, que lo diga. Sí recuerdo una mayor precisión del consejero Felipe López: para Semana Santa, según una entrevista publicada en Granada Hoy, lo cual estira y a la vez restringe el compromiso al Domingo de Ramos, que este año viene el día 9 de abril, como última fecha para cumplir los plazos.
Así, pues, dos meses y unos cuantos días. ¿De verdad es posible? Podríamos hacer un ejercicio de fe y creérnoslo, pero llueve sobre mojado. Recordemos que este consejero se estrenó en el cargo viniendo a Granada en junio de 2015 para aplazar la fecha que hasta entonces se había barajado, a finales de ese mismo año, hasta un año después y que, más tarde, estiró el plazo hasta la primavera. Que es marzo, pero también abril y mayo... y hasta el 20 de junio, que también es primavera. Hay quien calcula que nos vamos a septiembre y un periodista anota la previsible respuesta del consejero si finalmente el metro entra en servicio en otoño: "Siempre es primavera en nuestros corazones...".
Los párrafos anteriores no hacen otra cosa que dar testimonio de la desconfianza reinante ante los reiterados incumplimientos de la Junta. Una vez se despeje la incógnita, iremos de lleno a por el AVE y esos más de 600 días de desconexión ferroviaria que sufrimos en Granada. Hay otro plazo anunciado, este en otoño, por parte del Ministerio de Fomento, por otra parte incapaz de concretar la fecha. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró en la convención del Palacio de Congresos, hace una semana, que la alta velocidad llegará a Granada "más temprano que tarde". Escasa concreción que arrancó de entre el auditorio una voz tímida y lejana: "¿Cuándo?". El desconocido 'preguntón' tampoco quedaría satisfecho con la respuesta de Rajoy en la entrevista de cuestionario que Ideal publicaba este pasado domingo: "Que nadie tenga dudas..." Como el entrevistador no ejerció la re-pregunta o réplica a la respuesta, los lectores de entrevista tan plana y complaciente nos quedamos más bien en lo contrario: tenemos muchas dudas de que la alta velocidad llegue en otoño.