La Fiscalía mantiene su petición de 14 años al acusado de matar a un joven en la puerta de una discoteca
El acusado se enfrenta a un jurado popular por un presunto delito de homicidio como autor de un apuñalamiento a un joven de 21 años en la zona de calle Elvira
La Fiscalía ha mantenido este jueves su petición de 14 años de prisión para el acusado de 26 años al que un jurado popular enjuicia desde el pasado lunes por la presunta comisión de un delito de homicidio como supuesto autor de la muerte a puñaladas con una navaja de unos 20 centímetros de hoja de un joven de 21 años, y de otro de supuestas lesiones a otro varón, en el transcurso de una pelea a la salida de una discoteca de la zona de la calle Elvira de Granada.
Fuentes del caso han detallado a Europa Press que, tras cuatro sesiones de juicio, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha celebrado en el edificio judicial de Caleta, este jueves las partes han elevado a definitivas sus conclusiones, de tal modo que el ministerio público también mantiene su petición de un año y medio de prisión para cada uno de los otros cuatro acusados en el mismo proceso, ellos solo del supuesto delito de lesiones al segundo joven.
Las defensas de los cinco jóvenes piden la libre absolución para ellos. Este viernes, está previsto que el magistrado presidente del tribunal entregue el objeto del veredicto con el que se retirará a deliberar el jurado, que ha sido convocado, con las partes del juicio, en el edificio de la Real Chancillería de Granada por la mañana.
En la primera sesión del juicio, el pasado lunes, el principal acusado negó los hechos. "Yo cogí y me fui", ha apostillado en relación con el momento en que vio la discusión a la salida de la discoteca, donde indicó que fue con uno de los otros cuatro, mientras que que con el resto se habían saludado en la discoteca. A la salida de la misma, sobre las 7,15 horas del domingo 27 de noviembre de 2016, vio que uno de ellos estaba supuestamente "discutiendo" con "los magrebíes", en alusión a los agredidos.
Su amigo "quiso cogerle" pero "no se entendieron" por lo que le dijo que se fueran de allí "porque no iba" con ellos el asunto. "Yo me fui a mi casa" y el joven procesado con el que había salido "para la suya", ha agregado, negando asimismo que llevara navaja o arma blanca alguna consigo. Habría llegado a su casa pasadas las 8,00 horas y, al levantarse y bajar a la calle, sobre las 11,00 horas, algunos vecinos hablaban de la pelea.
Al ir a casa de su amigo en compañía de un hermano, supo que el primero había recibido un mensaje por parte de otro de los procesados, en que les afeaban que les hubieran "dejado tirados" y que "habían reventado" a los jóvenes, siempre según la versión que ha dado ante el tribunal el principal acusado.
Sin embargo, "con ánimo de acabar con su vida" le habría asestado al joven "hasta tres puñaladas", mantiene la fiscal en su escrito de conclusiones. Los acusados tienen entre 38 y 24 años y se enfrentan también a una petición de orden de prohibición por tres años de comunicación y de aproximación a menos de 200 metros a la supuesta víctima de las lesiones.
El fallecido, de nacionalidad holandesa y residencia en España, murió entre las 9,30 y las 10,00 horas, según hace constar la fiscal, que detalla que, sobre las 7,30 horas, los cinco procesados salieron de la discoteca y se dirigieron hacia las inmediaciones de un establecimiento de comida, donde supuestamente el luego lesionado "entabló conversación" con ellos, lo que luego se transformó en un "enfrentamiento verbal".
Así, "con ánimo de menoscabar" su "integridad física", los procesados supuestamente empezaron a propinarle "numerosos golpes con las manos y los pies", mientras que el acusado de supuesto homicidio habría atacado con la navaja al joven que acompañaba al presuntamente lesionado. Sufrió heridas en tórax y abdomen que le provocaron la muerte, y su cuerpo presentó "signos de lucha y defensa".
El supuesto autor de las puñaladas se habría dado entonces a la fuga, "consciente de la gravedad de los hechos", gritando "os tengo que matar", momento en que los otros cuatro procesados salieron también corriendo al grito de "vámonos".