La galería de arte que se rebeló contra los convencionalismos
Azul. Su iris azul nos contempla al entrar, nos invita a abrir bien los ojos para empaparnos de todo lo que nos rodea. Es el arte de los que difícilmente podrían exponer en otro sitio. A ellos, a los artistas que caminan con el resto de mortales, que pagan sus facturas con la dificultad del asalariado, no se les suele dar muchas oportunidades para que el público granadino los llegue a conocer, a conmoverse con su trabajo. Con esa idea nació hace escasas semanas la galería ‘Artexpontáneo’ de la mano de su promotor, Juan Pedro Linares.
“UN LUGAR PARA EXPERIMENTAR”
Emprender en arte es, ya de por sí, una tarea valiente, comprometida; hacerlo apostando por los creadores que están empezando supone todo un acto de rebeldía contra ese circuito no escrito de artistas consagrados que suelen acaparar la atención de público y medios. “Faltaba en Granada un lugar en el que la pintura sea más libre, en el que se pueda experimentar”. Nos lo cuenta Juan Pedro Linares, otrora diseñador de interiores y ahora emprendedor del mundo del arte y pintor. Su apuesta, ‘Artexpontaneo’, se emplaza en la calle General Narváez, un lugar al que ya comienzan a acercarse muchos curiosos.
Damos un paseo por la sala y me parece escuchar una de las fuentes de la Alhambra, me acerco y cuando me quiero dar cuenta estoy perdido en un camino a ninguna parte. Me rescatan unas manos amigas y vuelvo a la sala de exposiciones. La obra del pintor granadino Miguel Ángel Rivas me lleva de lo local a lo foráneo. De la belleza de los pueblos andaluces a la crudeza de la realidad social que nos han impuesto. “Ya tenemos casi todas las fechas del año reservadas para exposiciones”, me explica Linares. La próxima muestra estará centrada en su propia obra, una serie de cuadros en los que la mirada tiene mucho que contar.
MÁS ALLÁ DE LAS PAREDES
Juan Pedro Linares me cuenta que lo de la galería es casi una excusa, un gancho para imprimar al granadino la pasión por el arte. Por eso, tras las paredes y sus ventanas a otras realidades se encuentra el taller de ‘Artexpontáneo’; aquí se dan clases de pintura a todos los niveles, para todos los públicos y con diferentes materiales.
Bocetos, rostros a medio acabar y varias mesas desnudas me indican que aquí ya se ha pintado y Linares me confirma que en pocos días, un nuevo taller de pintura comenzará a funcionar. “Aquí puede venir todo el mundo”, el arte no tiene edad, apuntillo yo.
Completando la galería se encuentra una pequeña tienda de útiles de pintura. Una vez en el anzuelo, más de uno se animará a pintar, le digo a Linares, “esa es la idea, queremos crear una red de gente interesada en la pintura”.
Esa red también dependerá de los acuerdos a los que Juan Pedro Linares llegue con instituciones privadas y públicas: la intención es ofrecer el espacio para organizar concurso de pintura, muestra de fotografía… en definitiva, todo tipo de eventos relacionados con el mundo del arte.
Y así nos vamos, con la agradable sensación de que en Granada se hacen cosas diferentes, se arriesga por el arte y por los que quieren empezar, como Juan Pedro Linares. El iris azul nos acompaña a la salida. Es la especialidad del artista, que a cada rincón que encuentra cuelga una de sus miradas, “es lo que más expresa del cuerpo”.
Comentarios
2 comentarios en “La galería de arte que se rebeló contra los convencionalismos”
juanpe
18 de febrero de 2014 at 18:45
Gracias por vuestro apoyo, Granadadigital, ya que entre todos empujando saldremos adelante con fuerzas renovadas, y con el valor de la sabiduría adquirida.
ESTRELLA MEGIAS MORENTE
5 de marzo de 2014 at 15:36
me gusta hacia falta una