La Guardia Civil realiza cuatro rescates en montaña durante la primera quincena de junio
El desconfinamiento ha llevado a la gente, otra vez, a las sierras granadinas y con ello han vuelto los accidentes
Durante la primera quincena del mes de junio la Guardia Civil ha tenido que acudir en auxilio de cuatro personas que sufrieron un accidente en la montaña, los dos últimos este pasado fin de semana.
El primer rescate tuvo lugar el pasado día 7 de junio. Sobre las 20:00 horas el Servicio de Emergencias 112 de la Junta de Andalucía alertó al Servicio de Montaña de la Guardia Civil que un hombre había sufrido una fuerte caída en la Sierra de Huétor, en la subida al Cerro del Corzo, y que a consecuencia del golpe tenía dificultad para respirar, un dedo de la mano roto y posiblemente también una pierna rota. Inmediatamente dos especialistas se dirigieron al lugar del accidente en un vehículo todoterreno oficial y llegaron hasta el herido una hora después. Le inmovilizaron la pierna y lo introdujeron en una camilla. Lo evacuaron a hombros hasta el vehículo oficial y lo trasladaron hasta donde esperaba una ambulancia, junto a la caseta forestal de los Peñoncillos.
Tres días después, sobre las 20:30 horas del día 10 de junio, la Guardia Civil recibió una nueva llamada solicitando auxilio porque una mujer había sufrido una torcedura de tobillo en el barranco de la Cuesta Lola en Quéntar. Poco después tres especialistas del Servicio de Montaña salieron hacia el lugar del accidente con el material necesario para el rescate. Sobre las 21:45 horas localizaron a la accidentada, le inmovilizaron el tobillo y la trasladaron en camilla hasta el vehículo oficial, y posteriormente hasta una ambulancia que la trasladó hasta un hospital granadino.
Los dos últimos rescates tuvieron lugar este pasado domingo día 14 de junio. Nuevamente fue el Servicio de Emergencias 112 el que solicitó auxilio para dos accidentados.
El primero sobre las 8:30 horas, después de que un ciclista sufriera una aparatosa caída en un lugar de muy difícil acceso en el barranco de la Rambla Seca de la localidad de Hernán Valle-Guadix y se fracturara el fémur. Dos especialistas del Servicio de Montaña y dos pilotos de la Unidad Aérea de la Guardia Civil de Granada se dirigieron en helicóptero hasta dicha rambla y rescataron al herido tras inmovilizarle la pierna.
Y el segundo sobre las 13:15 horas, en el que hubo que rescatar a un senderista que había sufrido un accidente en las inmediaciones del Refugio Rosales, en el término municipal de Dílar. Los agentes del Servicio de Montaña acudieron en coche hasta las inmediaciones del refugio, localizaron a la víctima, limpiaron las heridas que había sufrido en la cabeza y la trasladaron por la pista forestal hasta la Fuente Del Hervidero, donde fue trasferida a una ambulancia.
El desconfinamiento ha llevado a la gente, otra vez, a las sierras granadinas y con ello han vuelto los accidentes, por lo que la participación de los agentes del Servicio de Montaña y de los de la Unidad Aérea de la Guardia Civil de Granada ha vuelto a ser necesaria para resolver situaciones que de otra manera hubiera sido imposible o de muy difícil resolución para el auxilio de estas personas.
El Servicio de Montaña y la Unidad Aérea de la Guardia Civil forman un tándem de excepcional valía para la suerte de los accidentados en la montaña, especialmente para los heridos más graves, para los que las maniobras de inmovilización y la rapidez en la evacuación son claves para salvar sus vidas. Y de eso se encargan estos agentes altamente especializados. Son, nunca mejor dicho, “un pronóstico feliz para el afligido”.