La Guardia Civil se incauta de más de 5.900 plantas de cannabis en la segunda quincena de mayo

En Iznalloz los agentes descubrieron el acceso al zulo donde el investigado cultivaba cannabis disimulado en el suelo de la cocina

centro produccion marihuana
Imagen de archivo de la Guardia Civil
Gabinete
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La Guardia Civil ha continuado trabajando contra el cultivo y el tráfico de marihuana en la provincia de Granada en, lo que se ha traducido en la incautación de 5.909 plantas de cannabis sativa durante la segunda quincena del mes de mayo, con lo que el mes se ha cerrado con el decomiso de 10.351 plantas.

El Área Metropolitana de Granada sigue siendo el epicentro del cultivo de cannabis sativa en la provincia. En Santa Fe, Pinos Puente, Moclín, Valderrubio, Padul, Peligros, Las Gabias o Vegas del Genil, la Guardia Civil ha intervenido 4480 plantas. Mientras que las 1.429 plantas restantes se han intervenido en Melegís, Órgiva, Benalúa, Iznalloz, Píñar y Huétor Tájar.

La Guardia Civil ha realizado 21 operaciones contra el cultivo de droga y la defraudación de fluido eléctrico en la provincia de Granada, lo que se ha traducido en que 30 personas han sido puestas a disposición judicial por ambos delitos.

La colaboración ciudadana sigue siendo fundamental para descubrir donde se está cultivando cannabis sativa de manera intensiva. Aunque fue la investigación de un intento de robo en un edificio de oficinas de Santa Fe el desencadenante de la operación más importante contra el cultivo ilegal de droga realizada en la provincia de Granada en los últimos quince días, operación que finalmente se ha resuelto con el decomiso de 1540 plantas y la detención de dos personas.

En Iznalloz, el pasado día 20 de mayo, la Guardia Civil tuvo una actuación que merece ser destacada. Los agentes encargados de la investigación habían averiguado que en un domicilio de esa localidad estaban cultivando cannabis de manera intensiva. Los técnicos de Endesa corroboraron a los agentes que en dicha vivienda había un consumo excesivo de electricidad y que esa electricidad no pasaba por el contador. Pero, al realizar el registro de la vivienda, los guardias civiles, en un primer momento no encontraron las plantas. Tuvieron que insistir en la búsqueda y al pasar por la cocina los agentes vieron dos azulejos en el suelo de diferente color y que, además, estaban sueltos. Al levantarlos descubrieron el agujero por el que se accedía a la plantación en el sótano y que para bajar hasta ella había que utilizar una escalera improvisada con una reja de balcón. La Guardia Civil intervino 179 plantas de cannabis e investigó a un hombre por un delito contra la salud pública.

La última operación tuvo lugar el pasado día 29 de mayo en una urbanización de la localidad de Peligros. La Guardia Civil de Maracena descubrió que los arrendatarios de la vivienda, una pareja que ha sido investigada, habían habilitado las cinco habitaciones de las que constaba la casa para cultivar 841 plantas de cannabis sativa.