Los sindicatos manifiestan que el déficit de personal bibliotecario en la ciudad está afectando a la plantilla

Los sindicatos integrantes de la Junta de Personal del Ayuntamiento de Granada (CCOO, CGT, CSIF, SIB, SITAG SIPLG y UGT) han registrado un informe, elaborado junto con la plantilla de bibliotecas, que recoge las necesidades de personal del servicio de bibliotecas municipales de Granada dirigido a los concejales de Cultura y Recursos Humanos para que lo estudien y han solicitado una reunión con el fin de buscar soluciones a un problema que repercute en la calidad del servicio que se da a la ciudadanía.

En una primera reunión celebrada en junio con el concejal de Cultura, el coordinador general y la directora, las secciones sindicales trasladaron la difícil situación de las bibliotecas públicas y las dificultades a las que se enfrenta la mermada plantilla para mantener los horarios y los servicios en la actualidad. En esta reunión se les solicitó a los distintos sindicatos la elaboración del informe que hoy presentan y el que se enumera, una por una, la situación de cada biblioteca y sus dificultades para mantenerlas abiertas al público y cubrir todos los servicios actuales.

En los últimos años, la apertura de nuevas bibliotecas y la ampliación de horarios y servicios sin la contratación de nuevo personal de estructura, han provocado una situación insostenible que, además de afectar a la plantilla, repercute en la calidad del servicio a la ciudadanía. Hay bibliotecas que han tenido que cerrar en periodos de vacaciones de verano y Navidad debido a la imposibilidad de cubrir el horario de apertura al público con el personal disponible. La no cobertura de las bajas y la amortización de plazas derivadas de jubilaciones han reducido el número de personas que trabajan en el servicio hasta tal punto que se hace muy difícil mantener los servicios actuales.

Además, desde el pasado mes de abril, se ha suspendido la colaboración del servicio de regencia con las bibliotecas por el que se derivaba personal de este servicio a las distintas bibliotecas para la apertura y cierre de las mismas, el control de las distintas salas y el apoyo al personal bibliotecario (debido también al déficit de personal que sufre este área y a la necesidad de disponer de todos sus activos para realizar sus tareas propias en otros centro municipales), lo que ha hecho que se pierdan tres personas más que trabajaban en dos de las siete bibliotecas, provocando que la situación sea ya insostenible.

Por otro lado, los sindicatos quieren recordar que la biblioteca del Salón lleva cerrada desde mayo de 2023, cuando se llevaron a cabo una serie de reformas destinadas a mejorar la eficiencia energética. Terminadas estas, se advirtió un grave problema en el tejado que aún está pendiente de solucionarse, ya que la Corporación no ha sido capaz de encontrar con rapidez el dinero necesario para acometer las obras necesarias y no se prevé poder abrir la biblioteca antes de primavera del 2025. Cuando llegue este momento y si no se soluciona el déficit de personal actual, será materialmente imposible mantener abiertas las siete bibliotecas que forman el Servicio de Bibliotecas Públicas Municipales de la ciudad.

Las distintas secciones sindicales también quieren hacer hincapié en la candidatura de Granada como Capital Europea de la Cultura 2031 y destacan que no pueden quedarse fuera de esta las bibliotecas públicas municipales, ya que éstas no son un gasto, sino una inversión en la sociedad del presente y del futuro. Ser Capital Europea de la Cultura no es solamente un título conferido por el Parlamento Europeo. En el documento firmado por el Ayuntamiento de Granada dice: "igualdad de oportunidades para el disfrute y la participación en actividades culturales por parte de la ciudadanía", y esto sólo podrá ser posible contando con suficiente personal en el área de Cultura que ahora mismo brilla por su ausencia.

Entregado el informe, la Junta de Personal espera poder reunirse a la mayor brevedad posible con el Concejal de Cultura, Juan Ramón Ferreira y Vito Epíscopo, concejal de Recursos Humanos, para intentar buscar soluciones rápidas a un problema que afecta a un servicio público de vital importancia para la ciudadanía granadina.