La Ópera Nacional de Moldavia presentó con éxito en Almuñécar La Traviata de Verdi

El auditorio sexitano de la Casa de la Cultura se llenó de público y fue testigo del gran espectáculo

DIRECTOR DE LA OPERA SALUDA Y AGRADECE APLAUSOS DEL PUBLICO EN ALMUÑECAR 18
Reparto y director agradecen el aplauso del público | Foto: Gabinete
Gabinete
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Almuñécar volvió a vivir anoche una página destacada en su oferta cultural con la actuación de la Orquesta y el Coro de la Ópera Nacional de Moldavia, que regresó al escenario sexitano para representar la ópera “La Traviata” de Verdi.

El gran espectáculo llenó el auditorio de público ansioso de disfrutar de esta ópera que durante más de dos horas se desarrolló con la adaptación teatral de La dama de las camelias, de Alexandre Dumas. El drama, presentado  en tres actos y cuyo título original era Violetta, giró en torno al romance imposible entre una joven cortesana enferma de tuberculosis y su amante.

La representación de la obra en Almuñécar fue un acontecimiento único con una bella puesta en escena que recibió el reconocimiento a través de numerosos aplausos del público y una prolongada ovación final de cinco minutos que brindaron a todos un amplio elenco de 60 artistas, tanto en la representación de la obra como en la música. La producción llegó de la mano de Leonor Gago Artist Maganement y Concerlirica Internacional contando con la colaboración de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Almuñécar.

Destacar en el amplio repertorio a numerosos artistas internacionales con la soprano española, Helena Gallardo, en el papel de  Violeta; el coreano,  Joung-Hwan Park, como Alfredo y el venezolano, Pedro Carrillo, como Germont, así como  el resto de integrantes que forman la Opera Nacional de Moldavía. Todos ellos bajo la dirección de Nicolae Dohoratu.

Guiseppe Verdi, el más famoso compositor de óperas, dio vida a este drama burgués con fondo romántico que buenamente responde a una historia contemporánea de nuestros días. Fiel a los contrastes de la historia, el canto, la orquestación y la pureza de líneas melódicas están tratados en La Traviata en un clima de intimidad novísimo y sorprendente. Verdi, sensible a los problemas sociales eligió la obra por su crítica a la hipócrita sociedad de su tiempo, se estrenó en 1853 en Venecia. Desde entonces ha sido representada en todos los teatros del mundo.