La organización, el secreto de una boda de éxito (vídeo)

Cientos de parejas de novios andan ajetreados en este mes de septiembre. Han decidido unir sus vidas el próximo año y por ello deben planificar desde ahora todas las fases, todos los detalles. Dónde casarse, dónde celebrarlo, vestido ella, chaqué él, decoración, catering o banquete, menú, protocolo, regalos para los invitados, transporte, alojamiento, orquesta o dj, animador para los niños, las flores...

La lista es interminable y agotadora, una carrera de fondo que dura meses y que debe compaginarse con las preocupaciones del día a día. Fruto de ello, cada vez más parejas depositan su confianza en una organizadora de bodas o wedding planner. 

CARIÑO Y DEDICACIÓN

Para conocer en qué consiste ser wedding planner, lo consultamos con Abades Catering, empresa especializada en organización de bodas y eventos y una de las ocho más importantes de España según una información de El País.

Según Ana, responsable de catering y organización de eventos de Grupo Abades, el secreto está en "descubrir qué sueñan los novios. Guiarles, acompañarles y aconsejarles en todo el proceso". El tiempo también es clave: no es lo mismo un banquete al uso que un evento personalizado, algo que además de tiempo "lleva mucho cariño y dedicación". Un trabajo que busca el mejor resultado, como muestra el siguiente vídeo.

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Si no puedes ver el vídeo, pincha aquí.

Como todo proyecto de envergadura, se establecen reuniones previas donde transmitir y comentar todos los detalles, además de entregar un resumen del servicio. De esta forma se asegura que"el gran día de la boda funciona como una perfecta orquesta, una máquina en la cada pieza es importante".

LAS BODAS, CUESTIÓN DE GUSTOS

Como sobre gustos no hay nada escrito, la función de una wedding planner se adapta a los de cada pareja, casi nada les sorprende. Y en cuanto a los granadinos, Ana confiesa que "nos gusta los sitios con encanto para sorprender a nuestros invitados" y desvela el Pabellón de las Artes como un lugar "donde arte y gastronomía se unen para dar lugar a una celebración inolvidable". Junto a él, los tradicionales palacetes granadinos, con vistas a la Alhambra, Albaicin y Sierra Nevada.

En cuanto al menú, hay dos tendencias, un menú más tradicional para asegurarse de que gusta a todo el mundo, y las parejas que deciden arriesgar y  piden un menú más original con platos más atipicos o de otras cocinas. El protocolo se ha suavizado y los novios desean ceremonias cada vez más divertidas y flexibles, copas de bienvenida amplias y menús servidos con rapidez, buscando que los invitados interactúen más entre ellos durante la celebración.

En definitiva, una ardua labor que puede ser liviana si se deja en manos de profesionales consagrados a que nada falle, dedicándose los novios a disfrutar de la ceremonia junto a sus familiares y amigos.