"La palabra que más escuchamos estos días en el economato es gracias"

La asociación Almanjáyar en Familia sigue, en estos días de cuarentena, ayudando a las familias que más lo necesitan del barrio en el que centran su actividad. Una de las acciones que más actividad está recogiendo estos días es la que tiene que ver con la alimentación. Esta asociación, conocida por los vecinos como ALFA, centra sus esfuerzos durante el estado de alarma en el economato que regentan en beneficios de distintas familias de la zona.

Ahora es cuando la solidaridad aflora, incluso, entre los que menos tienen. "La palabra que más escuchamos estos días en el economato es gracias", subraya con emoción Juan Carlos Carrión, presidente de Alfa, sacerdote y apasionado de ayudar a los que están a su vera.

En esta acción solidaria se ayuda con el carrito de la compra a 50 familias de la zona Norte de Granada. Son momentos en los que los necesitados siguen prescindiendo de ayuda. Días en los que la hermandad de ciudadanos se hace más grande. “Nos estamos encontrando la solidaridad de mucha gente que nos llama y nos ofrece su apoyo. Hoy, por ejemplo, tenemos pan que han donado y se está repartiendo”, comenta Carrión, con la cara del que se siente orgulloso de que todas las personas que pasaban estos días por el economato podían llevarse una bolsa llena de pan.

Estas tareas de humanidad se llevan a cabo con las medidas higiénicas y de seguridad que precisan las autoridades en el decretado estado de alarma. “Todas las personas tienen su cita y vienen en turnos de diez minutos. Se echa gel para las manos, se toma la temperatura y es una educadora la que coge los productos que se va a llevar el usuario para evitar cualquier tipo de contagio. El comportamiento de la gente es para quitarse el sombrero”, afirma el sacerdote del barrio.

Solidaridad como moneda de cambio

El economato de Almanjáyar en Familia es socioeducativo. La moneda cambio para acceder a él es el compromiso y la solidaridad. Por ello, las personas que reciben estos productos por una pequeña cantidad de dinero se implican en la búsqueda activa de empleo o no fallan en el compromiso escolar con sus hijos. Todo ello para construir una sociedad mejor y más fuerte que no deje que la necesidad se imponga.

“Ellos aportan una cantidad de la compra que retiran aquí. Ahora están retirando entre 30 y 35 euros y aportan 6 euros en cada compra. Ese dinero lo volvemos a invertir en alimentos. Pero, solo con su compromiso pueden acceder al economato”, subraya Juan Carlos Carrión.

Otras acciones

Almanjáyar en Familia realiza muchas otras acciones en beneficio de la comunidad del barrio. Apoyo psicológico, educativo e implicación con los servicios sociales de las instituciones son algunos puntos de su día a día.

“Hay otro grupo de personas a las que se llama a diario. Las personas mayores nos cuentan sus problemas. Ahora, por ejemplo, ha venido una persona de avanzada edad que necesitaba alimentos y se les ha llevado a su casa”, dice Carrión.

Pero, también hay espacio para los más jóvenes. Eli Castillo es educadora, ayuda a colocar la compra a los distintos usuarios del economato, y se dedica a estar en contacto permanente con los más pequeños de la familia.

“Hablamos con ellos a través de un grupo de whatsapp. Ahí mandamos retos mentales o deportivos para hacer poco a poco un seguimiento de cómo se sienten los jóvenes del barrio. Lo esencial es animarlos, porque ya son muchos días”, explica Eli Castillo

Una acción que se hace invisible en estos días de cuarentena en los que no podemos salir a la calle, pero que se hace mucho más importantes en todos esos hogares en los que la ayuda es esencial para salir adelante.

La asociación Almanjáyar en Familia realiza estas acciones gracias a la ayuda de instituciones y socios.  Un apoyo clave en la lucha contra la exclusión social en la que se puede colaborar a través de su página web.