La reforma parcial de la Ley del aborto arranca en el Congreso pese a la fuga de 5 diputados
El Partido Popular tuvo el apoyo de UPN, FORO y Unió, el resto de fuerzas rechazaron la propuesta
El Pleno del Congreso de los Diputados ha admitido a trámite la proposición de ley del PP para reformar parcialmente la vigente Ley del Aborto, y lo ha hecho con los votos del Grupo Popular, los seis diputados de Unió (UDC), el de Foro de Asturias y el de UPN, y sin el apoyo de media docena de diputados del PP que han optado por el voto en contra, la abstención o no participar en la votación por discrepancias con la iniciativa.
En contra de la reforma se han pronunciado los diputados del PSOE, Izquierda Plural, UPyD, PNV, Esquerra (ERC), Amaiur, BNG y Compromís, mientras que los diputados de Convergencia (CDC) tenían libertad de voto y se han dividido.
Durante la votación han estado presentes la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y los ministros Cristóbal Montoro (Hacienda), Jorge Fernández Díaz (Interior), Ana Pastor (Fomento) y Alfonso Alonso (Sanidad), pero no el presidente Mariano Rajoy.
El PP planteó esta reforma vía proposición de ley en el Congreso, pues si hubiera sido a través de un proyecto de ley del Gobierno tendría que haber pedido informe a los órganos consultivos del Estado (Consejo de Estado y Consejo del Poder Judicial).
Se trata de la modificación de la Ley de Autonomía del Paciente para que la interrupción del embarazo vuelva a ser una de las tres excepciones en que las jóvenes de 16 y 17 años requieren del consentimiento paterno para someterse a un tratamiento, junto a las técnicas de reproducción asistida y los ensayos clínicos. En la actualidad, se les exige que informen a al menos uno de los tutores legales, salvo que demuestren "fundadamente" que existe un conflicto grave, como el maltrato.
YA NO SE DEBATE HASTA DESPUÉS DE LAS ELECCIONES
Como toda iniciativa legislativa que pasa a tramitarse en el Congreso, ahora se abrirá un primer plazo de 15 días prorrogables para que los grupos de la oposición presenten enmiendas de totalidad al texto, que requieren la presentación de un texto alternativo.
Tanto el PSOE como Izquierda Plural piensan utilizar esta vía, que exigirá un nuevo debate en sesión plenaria de la reforma. Eso sí, según los cálculos del PP, esa cita ya no será antes de las elecciones locales, pues los plazos de enmiendas se irán prorrogando hasta el 27 de mayo.
Después será el turno de las enmiendas al articulado, que habrán de ser debatidas en ponencia, comisión y de nuevo en el Pleno del Congreso, donde para su aprobación se precisa de un mínimo de 176 votos (mayoría absoluta), ya que tiene rango orgánico.
Después, pasará a tramitarse en el Senado y sólo volverá a debatirse en el Congreso si se produce algún cambio en la redacción. El objetivo del PP es que la ley esté en marcha a comienzos de verano.