La Tarasca procesiona por las calles de Granada con elegancia andaluza
Vestida por el modisto José Ruiz Naranjo es el contrapunto a la fiesta religiosa de estos días
A lomos de un dragón la ya famosa Tarasca procesiona por las céntricas calles de Granada ataviada con el vestido de fiesta que el modisto José Ruiz Naranjo ha elegido para la ocasión. De un llamativo color rojo y un aire de fiesta, la Tarasca saldrá del consistorio granadino con un pantalón ancho y el cabello recogido en un moño bajo obra del estilista Manuel Marfil, que junto a la maquilladora Raquel Nofuentes, apuestan por unos tonos suaves.
Desde el año 60 la Tarasca no luce pantalón, y "he querido que en esta ocasión desfile diferente", explica Ruiz Naranjo, que ha querido aportar un toque de distinción a los tradicionales vestidos largos o cortos. "Lo que tenía claro desde el principio es que el color fuera liso, y no utilizar estampados", ha comentado haciendo alusión al color fucsia que lleva la modelo.
En cuanto al peculiar adorno que luce en la parte superior del mono, "se trata de una rosa, porque aunque me hubiera gustado hacerle una granada, eso supondría añadir diferentes tonalidades, y quería un color único", ha explicado Ruiz Naranjo, que también ha comentado que ha sufrido las dificultades propias de tener que vestir una escultura con unas medidas muy determinadas. "La Tarasca no es un maninquí, sino una escultura que tiene una hechura muy especial, así por ejemplo tuvimos que abrir el pantalón para poder ponérselo".
CRÍTICAS COMO TRADICIÓN
Cuando sale a la calle los comentarios de los granadinos sobre la Tarasca no se hacen esperar. "Es lo normal, y lo asumo, y espero que las críticas sean constructivas", reconoce el modisto, que de todas formas confía en el éxito de su modelo, "los más allegados y conocidos me han comentado que el resultado es muy bonito".
La Tarasca marca el inicio de los días grandes del Corpus Christi, y según la tradición, con este atuendo marca las tendencias de moda de la temporada a través de este vestido.
La Pública de las fiestas, como popularmente se conoce este desfile, irá subida a un dragón que simboliza el triunfo de la belleza sobre los monstruoso e irá acompañada de varias charangas y bandas de música, además de los esperados Gigantes y Cabezudos, que tendrán en su máxima representación a los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, y los últimos reyes de la dinastía nazarí que gobernaron en Granada, Boabdil y Moraima.