Las ONG alertan de la falta de atención sanitaria en las zonas afectadas por 'Matthew' en Haití
Médicos Sin Fronteras afirma que existe el riesgo de una epidemia de cólera así como brotes de otras enfermedades
Más de dos semanas después de que el huracán 'Matthew' golpeara Haití dejando a su paso un reguero de muerte y destrucción la falta de atención sanitaria en muchas de las zonas devastadas amenaza con convertirse en un grave problema, puesto que existe el riesgo de una epidemia de cólera así como brotes de otras enfermedades.
Según ha explicado Médicos Sin Fronteras (MSF), sus equipos siguen tratando a personas con heridas sufridas por el huracán así como por enfermedades vinculadas a sus consecuencias, por lo que se está dando prioridad a llegar a aquellas zonas que aún siguen aisladas.
Los equipos de la ONG han tenido que recurrir incluso a helicópteros para llegar a algunas zonas en los departamentos de Grande Anse y Sud, los más afectados, donde han podido constatar la necesidad urgente de alimentos, agua y cobijo para los damnificados.
En estos lugares, según ha explicado MSF, se han encontrado con heridas infectadas y fracturas, casos de gastritis y de infecciones en el tracto respiratorio superior. "El acceso a la atención sanitaria es casi inexistente, pero sin atención cualificada y continuada, las heridas infectadas pueden llevar a sepsis y a la muerte mientras que los huesos rotos pueden desencadenar incapacidades", ha advertido MSF.
Hasta la fecha, la ONG ha realizado más de 1.600 consultas médicas en los departamentos de Grande Anse, Sud y Nippes y han tratado 190 casos sospechosos de cólera solo en Port-à-Piment. Sus equipos también están distribuyendo agua potable y pastillas potabilizadoras e instalando sistemas de almacenamiento de agua.
Además del riesgo del cólera, MSF ha advertido de que también hay preocupación por el riesgo de que surjan otras enfermedades como el dengue, la malaria o la neumonía.
El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) también ha mostrado su preocupación por la posibilidad de una epidemia de cólera, toda vez que 34 centros de tratamiento contra la enfermedad quedaron completamente destruidos y el número de casos sospechosos en los dos departamentos más afectados va en aumento.
RIESGO PARA LOS NIÑOS
"La propagación de la enfermedad así como un incremento en las cifras de las enfermedades de transmisión por el agua siguen siendo la mayor amenaza inmediata para los niños y las familias en las zonas afectadas", ha subrayado en una nota. Asimismo, la agencia de la ONU también se ha mostrado preocupada por el aumento continuado en e número de casos de diarrea aguda.
Según ha explicado, "muchos hospitales carecen de suministros básicos y medicinas y son incapaces de tratar a los pacientes". UNICEF estima que más de 13.000 mujeres darán a luz en los tres próximos meses en las zonas afectadas y teme que pueda aumentar el número de muertes en el parto, ya que antes del huracán la tasa ya era de uno de cada 90 casos.
"Las instalaciones sanitarias en muchas localidades del suroeste han resultado dañadas o destruidas y los residentes no han sido capaces de conseguir atención médica desde que golpeó el huracán", ha denunciado por su parte Erwan Cheneval, de la Cruz Roja Canadiense.
Según ha informado la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR), un equipo médico y de respuesta de emergencia de las secciones canadiense y francesa de la Cruz Roja ha llegado a Puerto Príncipe junto con 15 toneladas de suministros para poner en marcha clínicas médicas móviles.
"Ahora que las carreteras bloqueadas e inundadas se están limpiando gradualmente, esperamos llegar a algunas de las áreas más remotas y devastadas fuera de la localidad de Jérémie que aún no han recibido ayuda", ha precisado Cheneval.
En coordinación con el Ministerio de Salud haitiano, el equipo médico móvil espera tratar dolencias como cólera, heridas y traumas sufridos durante la tormenta, malaria y enfermedades crónicas, así como ofrecer atención prenatal e inmunización contra el tétanos.