La llegada de nuevas generaciones sanitarias: un futuro que no está garantizado
Tres profesionales hablan sobre la importancia de retener a los trabajadores jóvenes para asegurar los relevos en todas las especialidades
La pandemia del coronavirus ha demostrado con creces la importancia de disponer de una sanidad pública fuerte. Entre el 2020 y el 2030 se van a producir muchas jubilaciones en el Sistema Nacional de Salud, un proceso que requiere de relevos por parte de las nuevas generaciones. La realidad es que el reemplazo no está garantizado, algo que ya se nota en la actualidad. El Gobierno, ha permitido la contratación de médicos jubilados y de profesionales formados en países de la UE, un hecho que dice mucho. Tres profesionales que desempeñan su actividad en Granada hablan sobre estas circunstancias y aportan su punto de vista personal desde la experiencia.
Lola Carmona, técnica de laboratorio, tiene 63 años y se ha jubilado recientemente después de 45 años de trayectoria profesional. Su etapa final ha sido más que intensa debido a la pandemia, pues declara que ella y sus compañeros han estado "saturados de trabajo", una situación que se ha visto ahora potenciada debido a la gran cantidad de contagios, con sus respectivos contactos, de la sexta ola. "Se han hecho contratos, pero al principio se es inexperto porque la práctica es fundamental", explica Lola, que admite que "lo hemos pasado mal".
El sueldo afecta más que la fatiga
Preguntada por la posibilidad de que un trabajador sanitario decida prejubilarse por la fatiga provocada por la pandemia, afirma que "influye más que te toquen el sueldo". "Si por las cotizaciones te descuentan un montón de dinero piensas que 'si me lo quitan ahora pues gozo dos o tres años'", agrega.
Lola detalla que ahora las carreras son más cortas porque "hay gente empezando con más de 30 años e incluso 40". También comenta que "ha habido años con menos trabajo", pero "desde septiembre se ha jubilado una barbaridad de gente", lo que ha dejado vacantes. La técnica de laboratorio señala que los bajos sueldos que se ofrecen en Andalucía es otro factor que juega en contra a la hora de conservar a profesionales en el sistema.
Rafael Olivencia tiene 59 años y es ginecólogo en el Hospital Comarcal Santa Ana de Motril. La jubilación no está lejos, pero todavía tiene por delante años de trabajo junto a unos compañeros jóvenes que garantizan el relevo en su especialidad. Únicamente él y otros dos ginecólogos están por encima de los 40 años.
Este médico granadino pertenece a una promoción en la que se graduaron entre 200 y 250 profesionales. "Hubo unas promociones limitadas", explica. Desde el curso 1977-1978 se dio esta circunstancia y con el paso de los años se ha notado. "Se debe aumentar el número de personas que entrar a estudiar medicina", asegura Rafael, que señala que "hay que mirar las necesidades".
Contrataciones de jubilados y profesionales titulados fuera de la UE
Una de las decisiones tomadas por el Gobierno para hacer frente a la sexta ola del Covid-19 ha sido permitir la contratación de profesionales jubilados o de titulados fuera de la UE. Rafael declara que "contratar jubilados en este momento me parece fatal". "Es indigno", apostilla el ginecólogo granadino, que opina que "no creo que muchos quieran volver atrás". Por otro lado, no tiene problema en la incorporación de extranjeros "si cumplen los requisitos".
Félix Alonso, médico de familia y secretario del sindicato de sanidad y sectores sociosanitarios de CCOO Granada, advierte de que la atención primaria es "complicada" porque "la gente está muy machacada". La especialidad de medicina de familia está necesitada de nuevas generaciones, algo que también ocurre en otras como urología o cardiología según explica Félix, que agrega que municipios como Armilla o Las Gabias tienen cupos de población más que notables.
También hay problema a la hora de contratar enfermeras, ya que "ahora mismo no se encuentran". El integrante de CCOO cuenta que "la hija de una compañera se ha marchado a Cataluña con un contrato de tres años". La fuga de trabajadores sanitarios no se limita únicamente a otros territorios de España, pues Félix asegura que en algunos países europeos se marchan "con contratos indefinidos y sueldos hasta triplicados", lo que supone una oferta que seduce mucho. Algunos trabajadores viven años enganchando contratos de seis meses, lo que se traduce en una incertidumbre que no suma estabilidad.
Una de las peticiones de CCOO es que exista la posibilidad de que exista la opción de jubilarse a los 60 años sin pérdidas, algo que pueden hacer colectivos como bomberos, militares o policías. Félix Alonso aporta un dato tremendo: Granada retuvo en el verano de 2021 al 10% de médicos de familia que habían completado la especialidad. El secretario del sindicato de sanidad y sectores sociosanitarios de CCOO Granada denuncia que no se ha hecho "nada" por garantizar el relevo. El futuro será el que esclarezca si este panorama es mejor de lo que los propios profesionales pintan.