Lope de Vega con las personas bipolares en Granada
La compañía 'En la Luna Teatro' interpreta, el próximo día 8 de octurbe, en el Teatro Isable la Católica, la obra 'El Perro del Hortelano' a beneficio de las Granabip, una asociación que ayuda y orienta a personas que sufren trastorno bipolar
El próximo miércoles, el teatro Isabel la Católica de la capital, acogerá la representación de la obra 'El Perro del Hortelano' de Lope de Vega, a cargo de la compañía 'En la Luna Teatro'. Una puesta en escena cuyos beneficios se destinarán a la Asociación Granabip, que atiende a personas con trastorno bipolar.
La directora de la compañía, Laura López, ha asegurado que que todo el reparto y equipo de la compañía está muy emocionado por poder participar en esta iniciativa solidaria. "La posibilidad de hacer este proyecto, colaborando con Granabip, nos llegó de la mano de uno de nuestros actores, Nacho Madejón, que conocía a Cuca, la presidenta de la asociación, y nos dijo que necesitaba que una compañía de teatro la ayudase para conseguir fondos con los que seguir ayudando a sus asociados. No nos lo pensamos ni dos veces". 'La Luna Teatro' está muy comprometida con las causas sociales, y además colaboran con más colectivos, como Proyecto Hombre.
Se ha elegido El Perro del Hortelano, porque hace tres años la compañía participó en un curso de teatro de verso, y se decidió escoger esta obra de la literatura clásica española. "Un grupo de actores pusimos en marcha esta obra como proyecto final. Hice la adaptación porque es una obra muy compleja y la reduje a 10 personajes. La montamos y la movimos por certámenes, donde llevamos muy a gala haber sido premiada, en diferentes categorías, en la mayoría de ellos", comenta la directora López, después de un pequeño parón, la obra se llevó al ámbito educativo, donde "detectamos una necesidad de clásicos españoles. Y la obra se retoma con 6 personajes. Ahora la reestrenamos con Granabip, y es un auténtico lujo".
Una de las actrices, que en esta representación dobla personajes, es Marí Carmen Díaz, que interpretará a Dorotea, una criada al servicio de Diana, y a la Condesa Ludovica, aunque asegura que durante el último mes los ensayos se han intensificado, "la ilusión nos mueve y estamos muy contentos. No nos importan los esfuerzos, ni las horas". Las dos han explicado Cuca les mandó un mensaje para decirles que había afectados que llevaban cuatro años en la cama, y que para esta ocasión iban a salir de sus casas. "Cuando compartimos este mensaje entre todos los miembros de esta compañía fue un estímulo impresionante. A pesar de haber representado este clásico en multitud de ocasiones estamos nerviosos, tenemos un gusanillo muy especial", ha explicado, por su parte Laura, "eso nos compensa todo". También han resaltado el orgullo de tener un equipo detrás que responda a este tipo de iniciativas, "donde se han volcado de forma total y absoluta, haciendo que el trabajo sea mucho más gratificante".
La obra que está escrita en castellano antiguo, y que en un primer momento puede ser un poco más árido, es apta para todas las personas. "Es cierto que se ha recortado, pero el lenguaje no se ha cambiado. El texto que hay es el original, aunque lo que sí vamos a hacer es darle una entonación al tono del verso, de manera que se haga más abierto al público, y pronunciando la expresión corporal para que llegue mejor", ha añadido Díaz.
Ahora mismo están en la recta final, y esperan que todo salga bien. "Especialmente lo que queremos es que el teatro se llene, para que este tipo de asociaciones puedan tener más infraestructuras y hacer una labor encomiable". Por supuesto, el mismo deseo se comparte desde Granabip, "si la gente ve que el teatro está lleno se darán cuenta de que la gente los apoya y está con ellos, y eso es muy importante para su autoestima".
PUESTA EN ESCENA MUY CUIDADA
Para llevar a las tablas El Perro del Hortelano, se ha cuidado especialmente el vestuario y el decorado. Elaborado por una modista, los trajes son de época, y además, en el caso de esta obra se ha hecho una inversión muy costosa. "Una pieza de alguno de los trajes puede llegar a costar 400 euros". En el caso de la Condesa, sus vestidos se han llevado una parte importante del presupuesto, "porque son diseños que emulan la época, pero queríamos que no fueran rígidos, y que aportasen un toque de color".
En cuanto al decorado se trabaja con un gobelino, una gasa que va a cubrir el fondo del escenario. "Se han tratado de emular los tapices porque en la obra son elementos que tienen mucha importancia". También se lleva una arcada hecha de corcho negro, y un trono.
Ahora todo está listo para el próximo miércoles, a las 21.00 horas, en el Teatro Isabel la Católica de la ciudad, con una finalidad totalmente solidaria, para ayudar a las personas bipolares.