Los “emoticonos” suben a la Sala Ático de Granada
La exposición “No Vanishing point” de José A. Soriano cierra el ciclo de proyectos de la convocatoria para jóvenes artistas plásticos
“Emoticón” es un neologismo que proviene de la suma de los términos emoción e icono. Se trata de una serie de imágenes propias de las redes sociales que se caracterizan por su estética infantil y su banalidad, pero que integradas en el discurso artístico pueden aportar un sentido irónico y crear nuevos significados a partir de diversas composiciones. Es el objetivo principal del joven artista José Antonio Soriano en su primera exposición individual, que se inaugura hoy en la Sala Ático del Palacio de los Condes de Gabia.
“No Vanishing Point” (“Sin punto de fuga”) está compuesta por seis pinturas sobre lienzo, una pintura mural anamórfica y la proyección de una pieza de videoarte. El proyecto gira en torno al concepto de “frontera” como metáfora de la barrera que los medios audiovisuales imponen en el pensamiento de los ciudadanos, mediante la sobreinformación y el bombardeo diario de imágenes. Para generar estas composiciones planas, sin perspectiva, ni punto de fuga, el artista ha partido de fotogramas captados en los informativos sobre saltos masivos de migrantes en las fronteras de Ceuta y Melilla, que han sido sustituidos por mapas y reducidos a siluetas.
Los “emoticonos” son otro elemento fundamental de las piezas expuestas. Se trata de una serie de imágenes propias de las redes sociales que suelen aportar superficialidad a los contenidos, gracias a su estética infantil. Estos ideogramas han sido distorsionados por Soriano, que pretende integrarlos en su discurso artístico con un sentido irónico y crear nuevos significados a partir de diversas composiciones.
El propio artista se siente muy orgulloso de esta primera exposición individual y ha manifestado que su proyecto “intenta representar cómo percibimos la realidad hoy en día, por ejemplo, cuando estamos en casa mirando el móvil o la tableta y oímos noticias muy importantes que nos pasan totalmente inadvertidas y a las que no le hacemos el caso que realmente se merecen”. Soriano pretende “generar un contraste entre las imágenes importantes y otras banales, como los “emoticonos”, para representar a la sociedad contemporánea, que usa a diario estos dibujos en lugar de las palabras para comunicarse”.
José Antonio Soriano (Alcalá del Valle, Cádiz, 1991), graduado en Bellas Artes por la Universidad de Granada con el Premio Extraordinario Fin de Grado, ha completado sus estudios con el Máster de Producción e Investigación en Arte en la UGR. Ha obtenido varias becas, entre ellas una FPU en el Departamento de Dibujo, la de Pintores Pensionados en Segovia, y una Erasmus + para estudiantes de doctorado en la Universidad de Roma La Sapienza. Ha participado en varias exposiciones colectivas en La Madraza de Granada, la Alhóndiga de Segovia, la Fundación Valentín de Madariaga en Sevilla, o el CAC de Málaga.
La muestra de José Antonio Soriano puede visitarse hasta el próximo 24 de marzo y cierra el ciclo de proyectos de la convocatoria 2018 para Jóvenes Artistas Plásticos. La Sala Ático del Palacio de los Condes de Gabia acogió anteriormente “Nacer del magma, morir en el mar” de Manuel Rosa y “En tiempo seco” de Lucía Díaz.