Los seis implicados en el tiroteo de Huétor Tájar, ante el juez

La Guardia Civil recuperó 14 casquillos de bala de 9 mm. parabellum en el lugar de los hechos

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La Guardia Civil ha concluido la investigación del tiroteo que se produjo en la localidad de Huétor Tájar el pasado día 20 de mayo con la detención de cuatro personas y la investigación de otras dos, como presuntos autores de un delito de tentativa de homicidio, de un delito de tenencia ilícita de armas y de otro de alteración del orden público.

Según un comunicado, las dos primeras detenciones se produjeron el mismo día de los hechos, cuando fueron detenidos dos individuos, un joven de 25 años de edad sin antecedentes policiales, y otro de 36, con antecedentes policiales, ambos vecinos de Loja, tras el rápido despliegue que hizo la Guardia Civil inmediatamente después del tiroteo, que contó además con la colaboración de la Policía Local de Huétor Tájar. Tres horas después estos dos jóvenes eran detenidos y una de las armas utilizadas era recuperada.

Los otros cuatro implicados en el tiroteo fueron: un joven de 22 años de edad, con antecedentes policiales, y otro joven de 24 años de edad, también con antecedentes policiales, ambos vecinos de Huétor Tájar, que han sido detenidos el pasado día 13 de junio; y un hombre de 34, con antecedentes policiales, y un joven de 21 años de edad, sin antecedentes, vecinos de Loja, que han sido investigados también el día 13 de junio.

Los hechos sucedieron sobre las 16:50 horas del pasado día 20 de mayo de 2019. Un grupo de personas estaban en la terraza de un restaurante de Huétor Tájar cuando desde un vehículo en marcha comenzaron a dispararles, y éstas repelieron la agresión disparando también. Afortunadamente nadie resultó herido.

Durante la inspección ocular en el lugar del tiroteo la Guardia Civil recuperó 14 casquillos de bala de 9 mm. parabellum.

La Guardia Civil se desplegó inmediatamente en torno al restaurante y los agentes averiguaron desde qué vehículo habían disparado y quiénes eran las personas que presuntamente lo habían hecho; y quiénes eran los que habían sido agredidos y los que, a su vez, habían repelido la agresión disparando también.

La Guardia Civil supo que una de las familias implicadas en el tiroteo era de la vecina localidad de Loja, por lo que guardias civiles de ese puesto y del Equipo Territorial de Policía Judicial se desplegaron en torno a una conocida barriada de esa localidad y consiguieron interceptar el vehículo en el que habían huido los que efectuaron los disparos y detener a los dos primeros implicados.

En el interior del vehículo, en un doble fondo, la Guardia Civil localizó una pistola Glock de calibre 9 mm. parabellum. El arma fue enviada al laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil para dilucidar si algunos de los casquillos encontrados en el lugar de los hechos fueron disparados con esta pistola.