Luces y sombras en el regreso de Rui Silva
El portero del Granada CF volvió a la titularidad ante la ausencia de Javi Varas | El portugués ha jugado su cuarto encuentro desde que pertenece al conjunto nazarí
El pasado domingo, ante el Sporting de Gijón, Rui Silva volvió a jugar con el Granada CF después de cuatro encuentros sin hacerlo. El guardameta portugués jugó su tercer partido en Liga, el cuarto oficial desde que pertenece a la entidad nazarí, debido a la ausencia de Javi Varas en la convocatoria de Miguel Ángel Portugal, y lo hizo dejando luces y sombras.
La inseguridad marcó el comienzo del choque del luso. Quizás por su inactividad, el portero nazarí mostró cierto nerviosismo que le llevó a cometer errores, sobre todo con el balón en los pies, que pudieron costarle caro a su equipo. En el primer tanto, pudo hacer más por atajar el disparo de Lora, si bien esta acción viene precedida por un error de Chico Flores que descuadró a toda la zaga nazarí, y en el segundo se encuentra mal colocado cuando Barba, que pudo hacer falta sobre Chico, remata el balón al fondo de la red.
Sin embargo, a raíz del segundo tanto sportinguista, el portero luso realizó varias acciones que impidieron que la renta del conjunto asturiano aumentase. Pablo Pérez y, sobre todo, Carmona, que lo intentó en varias ocasiones, obligaron al portugués a realizar paradas de mérito que salvaron su actuación y reabren el debate sobre la portería granadinista.
Cuatro partidos, ocho goles
En los cuatro encuentros que ha disputado el guardameta portugués, incluyendo el de Copa ante el Real Zaragoza, Rui Silva ha encajado ocho tantos. Precisamente, fue este duelo copero el que se saldó con peor resultado para el luso, que encajó tres goles. Ante el Sporting y ante el Huesca, fueron dos los tantos que recibió el portero rojiblanco, mientras que ante el Rayo Vallecano solo encajó un gol.
Resulta destacable que, de los ocho tantos que ha encajado, dos han llegado en una jugada a balón parado (ante el Huesca y ante el Sporting) y otros tres los ha recibido desde el punto de penalti (dos ante el Zaragoza y otro ante el Huesca).