Macrosad: 25 años como ejemplo en la gestión humana entre mayores y pequeños

La cooperativa andaluza apuesta por la intergeneracionalidad, donde pequeños y mayores conviven y se relacionan en un mismo centro

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Sede de Macrosad en Mengíbar | Foto y vídeo: Javi Gea
Jose Luis Moreno
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Que una empresa cumpla 25 años ya es todo un logro. No se le puede pedir más a la vida si ese camino se recorre con éxito y dedicación. Este es el tiempo que lleva Macrosad contribuyendo al bienestar y la felicidad de las personas. Un periplo que ha llevado a esta cooperativa a ser un referente en el sector sociosanitario en Andalucía.

Una de las claves para llegar a este punto humano y empresarial ha sido la apuesta de Macrosad por un modelo distinto al de otras organizaciones o empresas. El modelo educativo pone la mirada más allá del horizonte, donde pequeños y mayores se relacionan en un claro ejemplo de intergeneracionalidad.

“No hay ninguna entidad ni empresa en el país que tenga la capacidad innovadora que nosotros tenemos. Tampoco que conjugue el elemento de intergeneracionalidad y que lo entronque dentro de una decisión que no solo es de servicios, sino corporativa. No hay ninguna compañía en el país que conecte los polos generacionales como nosotros”, cuenta a GranadaDigital Andrés Rodríguez, director general de Macrosad.

Y es que, esta cooperativa andaluza lleva más de dos décadas identificando las necesidades intergeneracionales de los usuarios. Datos, recabados junto a la Universidad de Granada, en los que se deja claro que las personas que se relacionan se sienten más felices.

“Somos una organización transparente que gestionamos recursos públicos, con los cuales tenemos que hacer un uso corresponsable de los mismos. Somos una organización que mira a las personas a su rostro”, comenta Andrés Rodríguez.

Uno de los resultados de esta filosofía está en Albolote, Granada. Es el primer tubo de ensayo y la primera muestra de un espacio integrado. “No teníamos centros integrados, sino que estaban en distintos municipios. Aun así, hemos desarrollado más de 350 actividades intergeneracionales. Era la primera vez que teníamos que diseñar un prototipo donde estuviesen en el mismo espacio físico conviviendo los dos polos generacionales”, señala el director general de Macrosad.

Este modelo permite que el ambiente, el diseño arquitectónico y el mobiliario fluyan con los programas de intervención de cuidado y de educación. Un componente integrador, con zonas comunes, así como un programa de intervención propio.

Crecimiento

La gestión de las personas ha llevado a la empresa andaluza a crecer en 500 empleos en 2018, con el 70% de las contrataciones indefinidas. Además, cualquier persona con algún tipo de discapacidad que sea contratada por la empresa entra con este tipo de contrato fijo. Un total de 2.160 trabajadores y trabajadoras estables pertenecen a la familia de Macrosad.

“Equipo, un proyecto coherente y capacidad de liderazgo. Estos han sido los elementos tractores de Macrosad en los últimos años. Pero, la clave está en que la empresa ha tenido la capacidad de poder identificar la tendencia y poder proyectar propuestas de valor muy a largo plazo. Una organización sin visión se queda obsoleta”, afirma Andrés Rodríguez a la hora de hacer un análisis de lo que ha sido Macrosad durante este tiempo atrás.

La cooperativa publicó su balance económico del año 2018 en el que ha alcanzado una facturación de 33 millones de euros, un 28% más que en el ejercicio anterior.

Interior de la sede en Mengíbar de Macrosad

Visión de futuro

Actualmente Macrosad se encuentra inmerso en su IV Plan Estratégico, que abarca de 2017 a 2020, y donde se lleva a cabo una relevante apuesta por los entornos innovadores con un activo departamento de I+D que posiciona a Macrosad como referencia estatal de intergeneracional y tecnológica para la educación y cuidado de las personas en su infancia y vejez.

“Tenemos previsto en nuestra agenda la apertura de varios centros y servicios y con una tasa de crecimiento medio en torno al 20%. Tenemos que terminar de completar la inversión productiva que habíamos diseñado hace cuatro años, nos queda en torno a cuatro millones de inversión para completar el ciclo que habíamos previsto”, señala con orgullo el director general de Macrosad.

Pero, esta cooperativa andaluza no se queda aquí y piensa ya en el momento de trabajar tras este IV Plan Estratégico. “Nosotros desarrollamos una agenda futura de manera compartida. La última vez que la diseñamos, más de 50 profesionales de esta organización participaron en su confección. El futuro de esta empresa será la que sus profesionales digan que tiene que ser”, afirma con contundencia Andrés Rodríguez.

La agenda de Macrosad también se basará en un futuro en la expansión. El volumen de negocio generado en Andalucía hace que la empresa se plantee de forma muy seria el salir fuera de la comunidad autónoma. Y es que, incluso, ya se está demandando en otros territorios la llegada de esta cooperativa con acento andaluz.

Una visión de futuro que tiene una estrecha relación con la apuesta de la empresa por I+D. Porque las necesidades que hoy tienen los usuarios no tendrán nada que ver con las del futuro. “Se están incorporando al sistema social los 'Baby Boomers', una generación con un nivel adquisitivo distinto. Han podido, en algunos casos, viajar, por lo que su nivel de requerimiento será más elevado”.

Trasladar el modelo

En breve, Macrosad empezará a trabajar, a nivel nacional, con una mutua de accidentes. La cooperativa quiere desarrollar una labor de retrospectiva sobre la gestión de la edad en las compañías de trabajo. Una forma de aplicar los conocimientos que puede extenderse a más ámbitos.

"Para nosotros es solo el principio. Es verdad que no hay mucho desarrollo en Europa, pero sí en países de otras zonas como puede ser Estados Unidos. La Cátedra Macrosad de Estudios Intergeneracionales, junto a la UGR, es un gran paraguas para validar y testar de manera científica lo que estamos haciendo, pero también que sirva como un puente y un enlace de trasferencia de conocimientos a terceros”, afirma Andrés Rodríguez.