Emoción, complicidad y pasión: entre las bambalinas de 'El Maleficio de la Mariposa'
El programa 'Lorca y Granada' acoge en el Teatro del Generalife este ensayo del poeta granadino, que estará disponible hasta el 21 de agosto
Llega el ocaso a la Alhambra y los alrededores del Teatro del Generalife comienzan a llenarse de espectadores. Unos pasean por los maravillosos jardines del monumento nazarí, otros aprovechan para fotografiar los últimos rayos de luz de la puesta de sol por el horizonte. "Es increíble poder disfrutar de un concierto en plena Alhambra y encima de noche", se escuchó entre la multitud que recorría la zona. Y no se equivocaba, ya que esa misma noche se celebraba en el Teatro el espectáculo El Maleficio de la Mariposa, obra que trata sobre este ensayo de Lorca, por lo que el entorno no podía ser más granadino si quisiese.
Desde minutos antes del comienzo de la función, el escenario ya rebosa vida y alegría. Los bailaores se preparan para el espectáculo y se prueban los ropajes, se acicalan el cabello y comienzan a ensayar los pasos de baile. Úrsula López, directora artística de la obra y coreógrafa, destaca entre todos los bailaores por su imponente vestido flamenco de rayas verticales negras y blancas con una gran cola. GranadaDigital ha entrevistado a la bailaora para conocer de primera mano cómo es llevar la voz cantante de un espectáculo tan mágico como es El maleficio de la mariposa y que este año se cumplen 100 años de su estreno.
"Desde que empezó este proyecto y lo escribimos en el papel hasta que se ha estrenado en el Generalife hemos tardado un año y medio. Montar El Maleficio de la Mariposa ha sido un trabajo muy elaborado y difícil", afirma la bailaora.
Antes de comenzar cada función, los bailarines deben calentar para dar lo mejor de sí: "La labor de calentar es imprescindible todos los días para luego hacer la función. Forma parte de lo que hacemos cada día cuando llegamos al teatro y debemos calentar nuestra musculatura para luego salir a la función a punto", señala Úrsula López.
Otra tarea que lleva la coreógrafa es la de coordinar todo desde la dirección artística, puesto que ocupa. Preguntada sobre esta labor indica que se hace "con paciencia y sabiendo siempre ver todo de una manera 'con relax' y siempre con paz. Es importante que los chicos siempre estén motivados y que cada noche cuando salgan den el 100%".
Una curiosidad de esta obra es que se usa un vestuario del siglo XXI pero con danzas propias de la época de 1920, año en el que Lorca estrenó el ensayo. Úrsula López comenta que "esa era la idea de este espectáculo, el tuétano de la obra. Lo que hacemos es recrear esos bailes tal y como eran y ponerle un vestuario del siglo XXI, y una puesta en escena de hoy en día con unas luces de ahora. Creo que ese contraste funciona muy bien y hace actual lo que se hizo hace 100 años".
Para esta obra se han rescatado danzas propias de la época que dejaron de usarse, la bailaora apunta que "hemos hecho una labor muy importante en rescatarlas y que esas coreografías, danzas y bailes en tiempos de Federico fueron grandes éxitos".
Sin embargo, detrás de cada truco de magia hay una explicación y una serie de personas que lo hacen posible. En el caso del ciclo 'Lorca y Granada' hay un montón de personal trabajando para que esta fantasía salga a pedir de boca, sin ningún fallo y de modo que el público disfrute al máximo. Enrique Gámez es el coordinador de este ciclo y el encargado de hacer que todo vaya correctamente.
Gámez afirma que la labor de coordinación es fácil porque el equipo lo pone muy sencillo. Hay un equipo estupendo compuesto por la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales y por empresas derivadas que se contratan específicamente para el trabajo. Nos apoyamos entre todos en el trabajo común para llevar adelante la coordinación".
Pero, ¿qué supone este ciclo para la ciudad nazarí? El coordinador afirma que este programa "es una proyección importante de su propia riqueza, cultural y de gestión. Para Granada es una proyección importante de su propia riqueza, cultural y de gestión. Cultural por todo lo que supone el patrimonio de la figura de Federico García Lorca y la generación del 27. De gestión porque está hablando de toda la enorme potencia de las empresas y los trabajadores, de los oficios, de todo el conjunto de empleos que hacen posible un programa tan complejo como este. La cultura no es sólo el espectáculo, sino todo el conjunto que hace posible el espectáculo, que es la parte oculta y lo que no se ve".
Respecto al impacto de la pandemia y a cómo está yendo el trascurso del programa ese año, Gámez indica que está trascurriendo "con mucha normalidad dentro de las circunstancias excepcionales que estamos viviendo. Con aforo al 50% en las localidades, con todas las medidas de cultura segura y con una participación, un cariño y una relación muy estrecha con el público".
Respecto las cifras de ventas de entradas el coordinador comenta que "estamos muy contentos porque estamos al 94% de ocupación de las funciones y se presenta un espectáculo excepcional con una buena respuesta de un público contento y satisfecho que hacen que estos días, esta pandemia y la situación en la que estamos se hagan mucho más llevadera. Estamos rondando las 15.000 localidades sobre una totalidad de 20.000".
No cabe duda de que el ciclo 'Lorca y Granada' no deja de sorprender cada año que pasa, y así lo ha venido haciendo durante los 20 años de vida que posee. El Maleficio de la Mariposa es una obra que nadie puede perderse y que combina ballet con flamenco en un enclave único como es la Alhambra y el Generalife. Estará disponible hasta el sábado 21 de agosto de martes y sábados.