Manuel Liñán, Premio Nacional de Danza: "Es increíble que todavía siga chocando que un hombre baile con falda"
"No sé porque ha tenido esta repercusión porque no he sido el primero que se ha puesto bata de cola", asegura
El bailaor granadino Manuel Liñán, Premio Nacional de Danza 2017 en la categoría de interpretación, ha lamentado que a día de hoy "todavía haya gente a la que le siga chocando que un hombre baile con falda" en los espectáculos flamencos, una de sus señas características de los últimos años junto con el mantón de manila.
"No sé porque ha tenido esta repercusión porque no he sido el primero que se ha puesto bata de cola. Esto es algo que no lo he hecho a través de ningún personaje o guión, sino que lo he hecho con mi cara y con mi cuerpo, que puede ser lo que haya causado más repercusión", ha señalado en una entrevista con Europa Press el bailarín.
Liñán ha defendido la danza como "un medio de expresión con total libertad" para el ser humano y, por ello, él ha hecho uso de esta disciplina en ocasiones de un modo reivindicativo. Por ejemplo, en su espectáculo 'Reversible' echa la vista atrás a los primeros años de edad para defender el baile como opción.
"Lo hice como una cura personal, tratando de ser honesto conmigo mismo en la distancia porque a los 7 años no pude manifestarme como me habría gustado. Y eso es un poco lo que pasa, hay que ser reivindicativo con el baile porque uno debe poder manifestarse como quiera", ha defendido.
En cualquier caso, ha reconocido sentirse "muy bien recibido" tanto por la crítica como el público más ortodoxo, a pesar de apostar por un flamenco que se sale de la línea tradicional. "Quizás donde más he notado la repercusión negativa hayan sido las redes sociales, donde me he encontrado con algo de homofobia", ha indicado.