María Molina, presidenta de la Agrupación de Mujeres Sordas 10 de Febrero: “Somos una discapacidad muy invisible”
La asociación granadina lucha por la igualdad de este colectivo en la sociedad desde 1992 por medio de actividades, talleres y sensibilización
En febrero de 1992 la Agrupación de Mujeres Sordas 10 de Febrero creó sus estatutos, y desde ese entonces se dedican a ayudar a la mujer sorda para que pueda integrarse de mejor manera en la sociedad por medio de diversas actividades dirigidas tanto a la misma comunidad como a personas oyentes.
Según explica la presidenta de la agrupación, María Molina Chillón, existen muchas barreras comunicativas para las personas sordas, como la falta de intérpretes en servicios públicos. Es por esto que desde 10 de Febrero realizan diversas tareas de sensibilización y difusión para que la "integración sea real y las necesidades de las mujeres sordas se cubran, como son la independencia, la libertad y el acceso a la información", comenta María.
Estas tareas incluyen diferentes tipos de actividades como talleres dirigidos a las mujeres sordas, y también la realización y muestra de videos que visibilizan la realidad que viven. Un ejemplo de esto es la pieza audiovisual que presentaron en la Agrupación de Personas Sordas de Granada y Provincia (ASOGRA), cuyo objetivo es mostrar algunas de las dificultades que vive la comunidad.
Cuando en la agrupación hablan de sus objetivos también hacen hincapié en el querer ser "libres e independientes". En este sentido la presidenta comenta que "las mujeres sordas queremos independencia. Por ejemplo, a la hora de viajar, de hacer gestiones, al final siempre tenemos que tener la compañía de otra persona o depender de otra persona".
María afirma que "somos una discapacidad muy invisible y la realidad del día a día, las situaciones de sufrimiento a las que nos enfrentamos y las limitaciones con las que vivimos son muchas".
Son estas limitaciones o problemas del día a día que no les permiten desarrollarse con la misma facilidad que las personas oyentes. Un ejemplo de esto es cuando deben acudir a algún tipo de servicio a hacer un trámite o pedir una hora al médico, "no siempre hay intérprete, también dependen un poco de subvención, a lo mejor conceden subvención para un intérprete cuando en realidad los usuarios son muchos", explica la presidenta de la agrupación.
Las barreras existentes
Ante este tipo de problemas existe una plataforma digital llamada 'SVisual' que es un servicio de intérpretes de manera telemática, pero incluso esta solución tiene sus puntos en contra según cuenta María. "No siempre funciona al 100%. Por ejemplo, algunas veces vas a un sitio en el que necesitas una intérprete y ves que no hay wifi, entonces la video interpretación no es igual", expresa.
Estas son las barreras comunicacionales que desde la agrupación buscan derribar para que así los problemas de accesibilidad sean cada vez menos, como explica la presidenta "esta accesibilidad no es perfecta y hay que seguir luchando para esta que sea real". A esto también agregó que un gran paso para lograr el objetico sería que en los colegios haya una asignatura de lengua de signos.
Es por este tipo de dificultades que la Agrupación de Mujeres Sordas 10 de Febrero trabaja diariamente en distintas áreas "para ganar en autoestima, para afianzar conocimientos, para formarnos, porque eso es una necesidad principal para nosotras", afirma María.
Una prueba del buen trabajo realizado por 10 de Febrero es el reconocimiento otorgado por la diputación provincial de Granada a la Mención de Igualdad. Este premio se le dio a la agrupación en 2020 por su trabajo a favor de la igualdad de las mujeres sordas y también de integración y visibilidad de las mujeres de la comunidad.