El Gobierno aclara que las mascarillas seguirán siendo obligatorias en los aviones, pero no en los aeropuertos
Raquel Sánchez, ha puntualizado que tampoco será necesaria la toma de temperatura ni la distancia de seguridad en las instalaciones aeroportuarias
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha aclarado que las mascarillas seguirán siendo obligatorias a bordo de los aviones, al igual que ocurre con el resto de transportes públicos como trenes, barcos o autobuses. En el acceso a los aeropuertos, estaciones o andenes, la mascarilla no será obligatoria, aunque sí recomendada.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, indicó este jueves durante su intervención en el Pleno extraordinario del Congreso que "en el caso del transporte aéreo, ante la evolución de la emergencia sanitaria provocada por la Covid-19, el real decreto ley elimina la obligatoriedad de las aplicación de las directrices vinculadas con la pandemia en los aeropuertos y se establece que sean recomendaciones".
"Se elimina la obligatoriedad del uso de mascarilla, la toma de temperatura o el mantenimiento de la distancia en los controles", ha puntualizado refiriéndose en concreto a las instalaciones aeroportuarias.
Durante la defensa del decreto ley de medidas de sostenibilidad económica en el ámbito del transporte, así como de medidas de ahorro, eficiencia energética y de reducción de la dependencia energética del gas natural, la ministra indicó que "con esta modificación seguimos los pasos de los países de nuestro entorno, eliminando trabajas y potenciando la competitividad de los sectores del transporte y turismo".
Las palabras de la ministra llegan después de que en el mes de mayo la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) y el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) eliminaran la recomendación de llevar obligatoriamente mascarilla en aeropuertos y a bordo de aviones. Una medida que dejaban a elección de las aerolíneas y los distintos países.
No obstante, estos organismos no abogaron por la eliminación completa de esta directriz, sino que la aconsejan para los viajeros vulnerables, a los que se les aconseja utilizar una FPP2, y en los vuelos que despegan o aterrizan en destinos donde su uso sigue vigente para el transporte público.
Fuentes del Ministerio de Transportes han precisado a Europa Press que las mascarillas seguirán siendo obligatorias a bordo de los aviones, pero no en los aeropuertos, tal y como indica la norma actual.
La utilización obligatoria de la mascarilla se mantiene dentro del transporte. Así, deberán utilizarla todos los pasajeros y personal de los aviones, así como quienes viajen en tren y en autobús. Deberá utilizarse, además, en los espacios cerrados de buques y embarcaciones en los que no sea posible mantener la distancia de 1,5 metros, salvo en el caso de los camarotes cuando en ellos se encuentren únicamente personas convivientes.
Hace unos días la ministra de Sanidad, Carolina Darias, aseguraba respecto a la retirada de mascarillas en transporte público que "estamos en una etapa de final de pandemia, aunque con mucha prudencia". Darias subrayó que "si hay un cambio", su Ministerio estará "a lo que digan las personas expertas".
En este sentido, afirmó que la mascarilla "se seguirá usando en los entornos sanitarios y en las residencias, entre los trabajadores y las personas que visiten a familiares, así como en los transportes públicos" porque, aunque "estamos en una etapa de mucha luz", respecto la pandemia no hay que bajar la guardia.
"Ya prácticamente hacemos vida normal y la mascarilla ha sido un elemento protector-barrera muy importante. Siempre hemos ido de la mano de los expertos y así va seguir siendo", ha afirmado la titular de Sanidad.
Aena podrá revisar los precios de contratos
Por otro lado, también se establece, dentro de estas medidas que afectan al transporte aéreo, la posibilidad de que Aena pueda realizar una revisión extraordinaria de los precios en sus contratos de obras "a fin de evitar retrasos en las inversiones que está realizando".
El texto también prevé la participación de Aena en la instalación de puestos de control fronterizos automatizados y la contratación del servicio de apoyo para responder a la aplicación del reglamento "que fortalecerá el control de nuestras fronteras y que permitirá prevenir, detectar e investigar los delitos de terrorismo", según explicó la ministra.