Multas de hasta 750 euros por dejar los residuos sólidos fuera de los contenedores
El Ayuntamiento de Granada pone en marcha el ‘Plan Encesta’ para concienciar a los ciudadanos de la importancia de depositar bien bolsas de basura, cartones o muebles
Dos millones y medios de euros anuales le cuesta al Ayuntamiento de Granada corregir el feo gesto de algunos ciudadanos de no depositar correctamente en sus contenedores las bolsas de basura o los cartones e, incluso, dejar los muebles y enseres en la calle sin avisar antes al servicio de recogida de Inagra. Pero, aparte del importante importe del coste económico, este incivismo de algunos también tiene consecuencia de insalubridad y, asimismo, de afear una ciudad turística y con el patrimonio que tiene Granada.
Las áreas de Medio Ambiente y Protección Ciudadana que dirigen Pepa Rubia y César Díaz, respectivamente, han decidido combatir a aquellos que no cumplen las normas con los residuos sólidos y, para ello, han puesto en marcha el ‘Plan Encesta’. Este tiene como objetivo precisamente eso, que los ciudadanos entiendan que las bolsas de basura hay que depositarlas a su hora en sus correspondientes contenedores y no en el suelo, lo que se denomina ‘soleras’, o en las papeleras no adecuadas para ello, lo que ocasiona problemas de higiene, mal olor y suciedad y estropea el entorno y la belleza patrimonial.
El plan también busca la concienciación a la hora de depositar los cartones en sus recipientes específicos, bien doblados, algo que no sucede todas las veces, especialmente en las zonas comerciales.
Y, en tercer lugar, pretende que aquellos ciudadanos que deben desprenderse de muebles y enseres no los dejen sin ton ni son en la vía pública, sino que llamen a los teléfonos correspondientes para su ordenada recogida por los camiones destinados a tal efecto.
La iniciativa se ha puesto en marcha porque desde que comenzó la desescalada ha ido in crescendo la fea moda de no cumplir con estas normas. De hecho, desde Inagra, su director Sebastián Fernández, ha indicado que durante el confinamiento aumentó el civismo en Granada, pero con el inicio de la desescalada se ha detectado un aumento de hasta un 30 por ciento más de estas malas prácticas que, además, con la crisis sanitaria actual, supone un mayor riesgo de exposición para los trabajadores al COVID-19 y una mayor contaminación, al tener que hacer más trabajo los camiones.
Pepa Rubia ha cuantificado en dos millones y medio de euros anuales el coste que supone al Ayuntamiento de Granada las llamadas ‘soleras’, “un gasto innecesario que, dada la situación actual, podríamos emplear en otros temas mucho más importantes. Es tarea de todos concienciarse”. Mientras, César Díaz ha explicado que 26 agentes de la Policía Local, de las patrullas de barrio y de Medio Ambiente, junto a un suboficial y un inspector, “velarán por que se cumplan las normas, especialmente en aquellas zonas que se ha detectado una mayor incidencia e, incluso, a las horas que más se incumple”. Incumplir estas obligaciones cívicas conllevará multas de hasta 750 euros.
En una encuesta realizada por GranadaDigital para preguntar sobre la decisión municipal de multar a los incívicos, y que está incluida en el vídeo que acompaña este artículo, la gran mayoría de los ciudadanos que han sido encuestados han acogido bien la medida y han destacado la importancia de evitar tales prácticas, especialmente por el olor y por la falta de higiene que supone dejar la basura fuera de los contenedores.