Nueve años de ‘botellódromo’
El 2016 parece que será el año del adiós definitivo a un problema que viene prácticamente desde su nacimiento
Son sus últimos días con vida. La prohibición de la Fiesta de la Primavera fue el comienzo de un final al que estaba destinado desde su nacimiento. Siempre hubo controversia en relación a esta “zona de ocio para jóvenes”, o como generaciones y generaciones de estudiantes universitarios han conocido como el ‘botellódromo’.
Su presentación, allá por el 2006, hablaba de un espacio ideal para evitar las masificaciones de gente bebiendo alcohol en las calles de Granada. Casi 9.500 metros para hacer deporte o asistir a actuaciones en directo decían, pero sobre todo, eran muchos metros para hacer botellón sin molestar a los vecinos. Ése era el objetivo y para lo que creado por el Ayuntamiento de Granada este "espacio para el ocio”. Se trataba de un solar a las afueras de la ciudad, así que todos estaban contentos. Pero no, nunca fue así. Su construcción ya fue al amparo de la ley antibotellón andaluza, que entraba en vigor pocos meses antes de su inauguración.
Ya desde el principio, las concentraciones en Hipercor y posterior vuelta con exceso de copas de los jóvenes comenzó a ser un problema para los vecinos. En el año 2008, el presidente de la Asociación de Vecinos del Parque de la Rosaleda, Francisco López de Haro, ya lo comentaba, aunque con cierta cautela por aquel entonces, en comparación a la negativa que plantean ahora los vecinos de la zona. “Pasan dando voces, destrozándolo todo y sin el menor miramiento. Si existe un espacio preparado, y los jóvenes quieren usarlo, posiblemente sea la solución menos mala”, explicaba.
La comisión del 'botellódromo' marcó el pasado lunes 7 de marzo la primera fecha para prohibir el consumo de alcohol en el recinto que habitualmente se conoce como ‘Hipercor’ o ‘Botellódromo’: el 1 de septiembre.
Granada se convirtió en el 2007 en la pionera en la construcción de botellódromos con un "recinto para el ocio”. Es el único botellódromo que existe en España, entendiendo por botellódromo un recinto habilitado, normalmente al aire libre, donde el consumo de alcohol está permitido. Esto ha sido un problema a lo largo de estos nueve años. Los viajes masivos de jóvenes procedentes de toda España a Granada por el ‘botellón’ ha afectado a una zona que estaba preparada para una población y no España entera, como ha dicho más de una vez el Alcalde de Granada, Torres Hurtado.
Así, y entre debate y debate, en Granada, cada fin de semana se concentran millares de jóvenes en este espacio cercano a una de las salidas por autovía de la ciudad. Y esto parece que está llegando a su fin.
NEGATIVA AL CIERRE A FINALES DE 2015
Tras las últimas reuniones, el botellódromo tiene que estar cerrado, como muy tarde, el 1 de septiembre. Mientras eso ocurra se debe seguir el decreto dictado por el Alcalde, que garantiza que los menores no beban y el control de los horarios de los establecimientos que venden alcohol.
En octubre de 2015, el Ayuntamiento no estaba por la labor del cierre de este espacio, y abogaba por encontrar soluciones que contentaran a todos, en busca de un decreto que buscaba “armonizar la convivencia”, haciendo posible el disfrute de los jóvenes y el descanso de los vecinos que residen cerca de este recinto.
PRIMERA COMISIÓN EN 2016
En la actualidad, la 'vida o muerte' del botellódromo ha cambiado mucho. El 2016 hizo definitivamente cambiar de opinión a algunos y poner de acuerdo a todos en este sentido.
El 29 de enero acogía la primera comisión para abordar la problemática del botellódromo. El objetivo era atender un asunto que afecta a los vecinos de la zona y fomentar un ocio alternativo entre los jóvenes es otro de los objetivos.
¿CREAR UN NUEVO ESPACIO?
El equipo de Gobierno local, tras escuchar las opiniones de los diferentes colectivos, propuso la creación de un “espacio de ocio saludable que puedan acudir los jóvenes mayores de edad y en el que se pueda consumir alcohol, de forma moderada y con un precio asequible”.
La idea, propuesta por García Montero, era “crear un espacio de ocio saludable, en el que se pueda consumir alcohol, de forma moderada y a un precio más asequible, siempre y cuando sean mayores de edad”.
“Tendríamos que articular que días se abriría, porque no sería todos los días, y podría acoger conciertos e, incluso, la Orquesta Ciudad de Granada podría ofrecer alguno”, sugirió el portavoz del PP. “Valorarlo y, si os parece, lo abordamos en la próxima reunión de esta comisión”, añadió el edil.
¿TRASLADO?
La Asociación de Vecinos del Zaidín-Campus de la Salud se reúnen este jueves 10 de marzo a las 9:00 con el alcalde de la ciudad, José Torres Hurtado (PP), para trasladarle su "no rotundo" a un posible traslado del botellón a esta zona de la ciudad mediante la creación de una zona de ocio para la juventud, lo que han calificado de "excusa hipócrita".
El colectivo vecinal reclama que no se cedan terrenos públicos para llevar a cabo esta iniciativa al considerar que es una forma encubierta de instalar en la zona, a pocos metros del nuevo Hospital del Parque Tecnológico de la Salud (PTS), un "mal llamado espacio de rock que, con capacidad para 15.000 personas", les quitaría "calidad de vida y tranquilidad los fines de semana".
MEDIDAS QUE SE PROPONEN EN LA ACTUALIDAD
PSOE
El grupo socialista en el Ayuntamiento de Granada ha reclamado que el cierre definitivo del botellódromo se produzca en junio, en vez de “aplazarse” hasta el mes de septiembre, y ha instado al equipo de gobierno, del PP, a tomar medidas que garanticen “acabar con la Fiesta de la Primavera”.
El portavoz socialista, Francisco Cuenca, advirtió este miércoles que los vecinos afectados por esta instalación, donde habitualmente se congregan los jóvenes para consumir alcohol, “no entienden por qué tienen que esperar” para su cierre y ha acusado al equipo de gobierno de “dar una patada hacia adelante” en vez de afrontar esta problemática.
IZQUIERDA UNIDA
El portavoz de IU, por su parte, Francisco Puentedura, ha valorado positivamente la medida actual del cierre del botellódromo el 1 de septiembre, algo que supone una nueva etapa para la ciudad pero que, en palabras de Puentedura, “se deben seguir planteando medidas de ocio juvenil alternativo y de ocio nocturno”.
En segundo lugar, desde Izquierda Unida apuntan a que se debe acotar el espacio “de tal modo que no entren menores al recinto ya que está contrastado que la mayoría de los comas etílicos que se atienden”, corresponden a menores de edad. Y, en tercer lugar, que el espacio esté disponible a este fin solamente los viernes, sábados y víspera de festivo.
CIUDADANOS
Desde Ciudadanos, las medidas propuestas consisten en a corto plazo “liberar a los vecinos de la zona, pero sin dejar que los problemas de los vecinos de hoy, sean los problemas de los vecinos de mañana”. A medio plazo, se pretende no permitir que la forma de diversión sea consumir alcohol de forma masiva, y a largo plazo, realizar campañas preventivas en centros escolares.
Esta es la realidad global del ‘botellódromo’ y su ‘botellón’ a 10 de marzo de 2016, una problemática que al fin y al cabo corresponde a toda la ciudad de Granada.