El nuevo acceso a la Alpujarra supera el trámite de declaración ambiental previo a su licitación
Este acondicionamiento de la A-348 busca un nuevo trazado que dote de mayor seguridad a la conexión entre la Autovía de Sierra Nevada hasta Lanjarón
El proyecto del nuevo acceso a la Alpujarra granadina ha obtenido la Autorización Ambiental Unificada, trámite previo necesario para la licitación de las obras. Este acondicionamiento de la carretera A-348 busca un nuevo trazado que dote de mayor seguridad vial a la conexión entre la Autovía de Sierra Nevada (A-44) hasta Lanjarón, que actualmente se caracteriza por un recorrido estrecho y muy sinuoso.
Este recorrido, con un coste de once millones y con financiación europea garantizada a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), se ejecutará en dos tramos y supondrá la eliminación de una veintena de curvas, la ampliación de calzada y la reducción del recorrido desde el puente de Tablate hasta el municipio de Lanjarón.
También se contempla la ampliación del ancho de vía a dos carriles de 3,5 metros, con arcenes de un metro y bermas de medio metro. Además, en el primer tramo, que va hasta la envasadora de agua, se incluirá un tercer carril para vehículos lentos. Por último, el proyecto mantendrá el trazado antiguo como carretera de uso paisajístico y ciclista, así como vía de acceso a vías y servicios. El trazado se ha proyectado con una longitud de 3,1 kilómetros por los términos municipales de El Pinar y Lanjarón, en la provincia de Granada.
La Autorización Ambiental Unificada integra en una resolución única la evaluación de impacto ambiental y las distintas autorizaciones y exigencias ambientales con carácter previo a su ejecución o puesta en marcha. Entre las consideraciones, se propone "una serie de medidas compensatorias" para garantizar la supervivencia del gallipato en las charcas próximas a la planta embotelladora.
Así, se adaptará el drenaje que recoge las aguas de escorrentía de las vaguadas del polígono El Tejar y conducirla hacia las charcas, garantizando así el aporte de agua en el periodo de reproducción de esta especie –desde noviembre hasta mayo–. También se aumentará la profundidad de las charcas, eliminando sedimentos depositados en el fondo durante años.
Igualmente, se indican pautas como la ejecución de drenajes transversales, viaductos, túneles y puentes para fomentar la permeabilidad de la carretera y reducir el impacto de esta vía sobre la fauna existentes. Asimismo, se instalarán unas barreras guía permanentes que dirigirán a estas especies hacia estos pasos específicos.
También se respetará la vegetación propia de los ecosistemas de ribera y no se eliminarán ejemplares de especies que estén incluidas en el listado andaluz de especies silvestres en régimen de protección especial. Igualmente, la resolución destaca que, para reducir el impacto paisajístico, se propone la regeneración de laderas y taludes.