Las obras en la Catedral de Granada durarán hasta marzo
Los terremotos que sacudieron la ciudad provocaron varios desperfectos en la fachada del monumento que obligaron a acordonar la zona
Los técnicos de Arzobispado continúan con los trabajos de prevención en la fachada de la Catedral de Granada. El enjambre sísmico que sacude la ciudad desde hace varias semanas, ha provocado algunos desperfectos, solo exteriores, en el monumento. En concreto los tres terremotos de magnitud superior a cuatro grados que se dejaron notar en la ciudad en la noche del 26 de enero hicieron que uno de los pináculos se fracturase, llegando a caer uno de los trozos al suelo en la parte interior de la cancela.
Tras aquella madrugada de incertidumbre, el entorno de la Catedral se acordó para evitar un posible daño personal en el supuesto de que se produjesen más desprendimientos. Acto seguido, el Arzobispado comenzó con los trabajos de prevención en la infraestructura para reforzar los pináculos, obra de la que se encarga el arquitecto Pedro Salmerón. De los cien pináculos del conjunto catedralicio, incluyendo el área de la Capilla Real, donde se han visto afectados dos, los técnicos revisan los de los frontales de Pasiegas y calle Cárcel Baja. Se prevé que la actuación en el monumento finalice en el mes de marzo y que la zona del acceso principal, en la plaza de las Pasiegas, pueda abrirse nuevamente al tránsito en unos diez días.
Los trabajos que se están realizando son de una gran complejidad, teniendo en cuenta que los pináculos tienen un peso de unas dos toneladas. El proceso de rehabilitación consiste en reforzar la parte inferior con aros de pletina, que se separan de la piedra con una cinta de neopreno. Estos los dotan de una "fuerza extra de compresión" para evitar posibles caídas ante el "efecto látigo" de los seísmos. Asimismo, sustituyen los vástagos (piezas en forma de varillas que sirven para articular o sostener otras piezas) de hierro que van dentro de los pináculos, por otros de acero inoxidable.
La Catedral sufre con estos seísmos una "fatiga estructural incuestionable". Además, el grupo de trabajo que dirige Salmerón también revisa los "elementos frágiles" y decorativos de las cornisas, que se suman a los daños que, más allá de los movimientos de tierra, sufre la piedra por las "condiciones climáticas" extremas como las de Granada.
El arquitecto ha hablado sobre los trabajos de rehabilitación del monumento y ha detallado que plantea un proyecto de restauración a largo plazo en el que se necesitaría una inversión de “cientos de miles de euros”. Asimismo, Salmerón se ha referido a un futuro trabajo para restaurar la torre del templo metropolitano en la que se rehabilitaría su parte superior como un mirador.