Decálogo para 2021
Se ha hecho largo, muy largo 2020. Demasiado tiempo hablando de muerte, de caída del PIB, de cifras devastadoras de desempleo y de ruina económica se mire por donde se mire. Afortunadamente el año toca a su fin y esperemos que con él todo lo malo que nos trajo.
Es, por tanto, tiempo de renovados propósitos para el año nuevo que comienza y he pensado que, por ser este mi último post del mismo, sería una buena despedida hacerlo con un “chute” de energía positiva, tan necesaria en estos convulsos tiempos que nos acompañan.
Les dejo pues, mi decálogo para 2021. Diez entusiastas recomendaciones válidas para afrontar la crisis y gestionar su propio destino. Además, me he permitido hacerlo, acompañando cada uno de esos consejos, con un breve tip, a modo de titular, que le pueden ser útiles a la hora de alcanzar sus metas y desplegar todo su potencial en el ámbito personal y profesional y, por si fuera poco, incorporar una foto de nuestro querido y admirado Rafa Nadal. Don Rafael Nadal Parera encarna en sí mismo muchas de las características que aquí describo, no se me ocurre mejor ejemplo de humildad, constancia y superación.
Aquí van:
- DIFERENCIESE.
Si no tiene nada diferente, no compita.
El éxito siempre procede de la diferencia. Puede ser lo que ofrece, cómo lo ofrece, lo que hace sentir o incluso su capacidad para ser notorio y tener visibilidad.
En cualquier caso, si no tiene algo que le diferencia, sus posibilidades de éxito son muy limitadas. Y estará en la media, será uno más.
“Dedícate a ser el mejor siendo diferente”
Francisco Alcaide, escritor y consultor de empresas
2. MANTENGA UNA ACTITUD OPTIMISTA.
Huya de los pesimistas, de los negativos, de la gente gris y tóxica que ante la falta de valentía para ir en busca de sus sueños intenta que otros tampoco lo hagan porque eso sería dejar al descubierto sus carencias y mediocridades.
“La peor derrota de una persona es cuando pierde su entusiasmo”
H.W. Arnold, teniente general del ejército de EEUU.
3. TRABAJE DURO.
Acción, acción, acción. Sólo se encuentran respuestas en la acción. Esperar a que se den las circunstancias perfectas para actuar supone caer en el inmovilismo.
Lo que configura nuestras vidas no es lo que hacemos de vez en cuando, sino lo que hacemos de forma consistente. La repetición es la madre de la destreza. Cada día que pasamos haciendo algo, mejoramos; cada día que no lo hacemos, también perdemos algo. Y no hay más misterio. A fuerza de repetir una y otra vez la misma tarea se acaba interiorizando, asimilando y dominando.
Para tener éxito no hay que hacer cosas fuera de lo normal, pero si ciertas cosas repetidas hasta la saciedad.
“La suerte se pega al sudor”
Maite Barrera, socio fundadora de Bluecap.
4. NO DEJE DE FORMARSE.
Su desarrollo personal es su destino, por eso, no hay mejor inversión que la que se hace en uno mismo”
“Si usted cree que la educación es cara, pruebe con la ignorancia”
Derek Curtis Bok, ex-Presidente de la Universidad de Harvard.
5. ARRIÉSGUESE.
Mucha gente fracasa a la primera, no siempre se acierta. Debemos interiorizar que si nos equivocamos no pasa nada. Unas veces se gana y otras se aprende. Nadie sabe a priori si algo funcionará o no, es el mercado en última instancia el que da el veredicto. Ahora bien, sí de los errores, los fracasos y las pérdidas se saca una lección, ya no son tales, sino un peldaño más en la escalera hacia nuestras metas.
“Sólo dejas de cometer errores cuando duermes”
Ingvar Kamprad, fundador de Ikea.
6. PERMANEZCA ATENTO A LAS OPORTUNIDADES.
Dedicarse a servir cervezas o servir pizzas no le quita dignidad a nadie. Nuestros abuelos lo llamaban de otra forma: O-POR-TU-NI-DAD. A menudo dejamos correr el tiempo esperando la oportunidad de nuestra vida, el negocio del siglo o el pelotazo del año para resolver nuestros problemas y dedicarnos a viajar o a tomar el sol. Es una posibilidad, aunque, antes que quedarse a esperar esa opción, que ocurre de higos a brevas, es mucho mejor ir poniendo un ladrillo cada día y terminar teniendo una gran pared construida. A veces, muchas veces, las oportunidades grandes nacen de haber sabido aprovechar las pequeñas.
“Lo que puedes hacer, o sueñes que puedes hacer, empieza”
Goethe, poeta, novelista, dramaturgo y científico alemán.
7. SEA SENCILLO.
La sencillez no admite mentira, tiene que ser auténtica. Es el mejor antídoto contra la arrogancia y la estupidez que son los principales factores de fracaso empresarial.
La sencillez es el recurso de los inteligentes, de los que saben apreciar la vida más allá de lo superficial. El problema es que, a menudo, lo cercano, por cotidiano, no se valora lo suficiente.
“La sencillez es la suprema sofisticación”
Leonardo Da Vinci, un fenómeno.
8. MUÉVASE DE LA ZONA DE CONFORT.
Casi siempre, en aquello que menos le apetece hacer y en aquello que más miedo le da hacer, es donde está su mayor crecimiento. Cada vez que sienta miedo, dese la enhorabuena, porque esa es una ocasión para mejorar y evolucionar.
Si su vida es demasiado fácil, probablemente está estancado, vive de manera rutinaria y por tanto no tiene más experiencia, sino más años repetidos.
“Si las cosas parecen estar bajo control,
es porque no estás yendo suficientemente rápido”
Mario Andretti, excampeón del mundo de fórmula 1
9. FOCALICE.
Tiene que decidir cuál es su máxima prioridad y tener el coraje de decir no a otras cosas. Personas de éxito, personas de foco. Saber decir no es una de las virtudes más importantes para la materialización de metas. Y el problema no es decir no a todo aquello que no nos gusta, sino decir no a otras cosas que también son interesantes. Todos los días surgen proyectos o colaboraciones interesantes. Si no tiene un férreo autocontrol, irá yendo de uno a otro sin finiquitar nada.
“Es preciso saber que se quiere; cuando se quiere,
hay que tener el valor de decirlo,
y cuando se dice, es menester tener el coraje de realizarlo”
George Clemenceau, político francés que alcanzó el cargo de primer ministro y jefe de gobierno durante el régimen de la Tercera República Francesa.
10. PERMANEZCA FIEL A SUS VALORES.
Educación, respeto, solidaridad con la comunidad donde la empresa desarrolla su actividad económica, sabiduría, lealtad, sentido de la responsabilidad, generosidad, coraje, determinación, compromiso por la ética, honestidad, son conceptos que, desgraciadamente parecen pertenecer a épocas pasadas, pero que nos ennoblecen y hacen que aparezca lo mejor de cada uno de nosotros. Así que no consintamos que nuestros valores dejen de inspirarnos en el que hacer diario de nuestros trabajos y hagamos que la distancia entre las palabras pomposas y el déficit de hechos siga creciendo.
“Procure no ser un hombre con éxito, sino un hombre con valores”
Albert Einstein, científico alemán, autor de la teoría de la relatividad.
¡Les deseo a todos una sana y feliz Navidad!
Espero verles aquí el año que viene a todos, saludos.
